Mientras avanzaban, la fortaleza se transformó: pasillos que se movían, escaleras que desaparecían, y paredes que parecían querer aplastarlos.
—Morvan diseñó esto para detenernos —dijo Seraphine—. Cada paso requiere concentración, valentía y control musical.
Ian tocó la flauta antigua, Clara la armónica, y juntos guiaron al grupo con melodías que iluminaban los caminos correctos.
Cada obstáculo era superado usando la música como llave y protección.
Editado: 12.11.2025