Miércoles 26/Marzo/2014
08:34 p. m.
Sebastián vino de nuevo a mi casa, ahora con la preocupación de los exámenes finales.
Ambos nos sentamos en el piso de mi habitación, cada quien leía algo diferente, hasta que levante a la cocina por algo de comer.
—Conseguí algo de fruta— le dije cuando entré de nuevo al cuarto.
— ¿Qué piensas estudiar cuando termines la preparatoria?— Me dijo, con la mirada perdida.
—Pues, el plan es una ingeniería en robótica, pero bueno, todo puede pasar. Tú, ¿Qué piensas estudiar?— Dije, dejando la fruta a un lado y sentándome junto a él.
—Siendo sincero, no estoy seguro. No creí llegar tan lejos— dijo, dándome una sonrisa triste.
— ¿De verdad no tienes idea?— dije preocupada.
—Pues, me llama la atención alguna ingeniería, es decir, me encanta eso de armar y desarmar cosas— sonreí al escuchar su emoción— Pero, no quiero terminar como un simple mecánico.
—Sebastián, tú ya eres mucho más que solo un mecánico. Confía en ti—
—Robótica suena interesante, lo tendré en mente— Me acerqué un poco a él y me recargue en su hombro.
—Estas a buen tiempo de planear tu futuro—
—Pues, a como veo las cosas, tal vez en el futuro, terminemos estudiando lo mismo—