El Nuevo Origen: El Inicio

Capítulo 32. Preparativos para el año nuevo.

Kitaro

Era lunes por la mañana y no puedo quitarme del rostro la torpe sonrisa que tengo, aún sigo muy alegre tras lo ocurrido la noche anterior, por desgracia eso hizo que me fuera muy complicado conciliar el sueño sino hasta tres horas antes de despertarme, estoy casi seguro que me quedaré dormido en la meditación de hoy, solo espero que la maestra sea piadosa conmigo cuando suceda.

Y tal como me lo esperaba… Me había quedado dormido a mitad de la meditación lo cual hizo que la maestra me diera una bofetada con un látigo de agua sobre mi cabeza para despertarme.

Desde hace varios días la maestra Annilea nos ha dejado salir por una hora a mitad del entrenamiento para poder comer y descansar algo, así que por toda la hora libre que teníamos no hice más que dormir, cuando terminamos la sesión la maestra me pidió que le explicara la razón ya que es la primera vez que me dormía a mitad de su sesión, no podía mentirle en nada por lo que le comenté lo sucedido la noche anterior (claramente me guarde algunos detalles embarazosos) y una vez que finalicé me dio una mirada muy cariñosa lo cual hizo que me sonrojara un poco.

—Ja... En verdad eres adorable Kitaro...

—¡Ma-maestra! —exclamé sonrojado

—Je, je... Puedo comprender bien tus sentimientos... pero por favor trata de no volverte a dormir para el futuro —me da una sonrisa cariñosa.

—L-lamento si le ofendí... —dije con algo de pena.

—Para nada... mejor regresa a casa y duerme un poco, parece que lo necesitas en verdad.

—Le agradezco su comprensión.

Me retiré del salón y justo al pasar por la puerta no hice más que dar un suspiro tratando de liberar mi vergüenza por lo ocurrido, una vez que me decidí por salir de la torre comienzo a caminar por los pasillos. No sé porque, pero desde hace un momento tengo una sensación de que algo ha sucedido, no me explico de que se trataba, creo que puede ser en parte la pena que acabo de pasar con la maestra Annilea, por suerte hoy no tenía que asistir al entrenamiento del dual de espadas ya que por el momento son una vez cada dos semanas.

Cuando estaba acercándome a la entrada principal miraba a los alrededores y noto que el vestíbulo estaba más animado que de costumbre, me daba curiosidad por saber que estaba sucediendo ya que vi a varias personas ir de un lado a otro con cajas, bolsas, incluso latas que parecían ser de pintura por lo que se me paso por la cabeza que estaban preparando alguna especie de evento para estos días, creo que le preguntaré a los muchachos al respecto.

—¡Kitaro!

No me esperaba escuchar mi nombre en aquel lugar, no hice más que voltear a dónde provino la voz, noto que se me estaba acercando una entara desde lejos, me resulto extraño porque no me parecía conocida, pero cuando se me acerco lo suficiente mis ojos se abrieron demasiado a ver de quien se trataba.

—¿¡NI-NITASHA!? —exclamé en completa sorpresa.

-—¿Como has estado Kitaro? Ya ha sido un buen tiempo ¿no?

Me había quedado mudo con la boca abierta y los ojos abiertos a mas no poder cuando la vi de cerca, no hacía más que mirarla de pies a cabeza una y otra vez, Nitasha estaba completamente diferente desde la última vez que la vi, su cabello una vez negro ahora era de color castaño oscuro y en vez de estar suelto lo tenía amarrado con una cola de caballo, las escamas que cubrían su piel se oscurecieron ahora aprecian se de color rojizo oscuro con marrón y la textura daba la sensación de ser como la terracota y su piel era más clara como si se hubiera bronceado muy ligeramente, lo único que no cambio fueron su rostro y sus ojos marrones claro.

—Je, je... Parece que te sorprende ver como estoy ahora.

—¡SÍ! —dije atónito— ¿¡Qué te sucedió!?

—Parece que cuando alguien despierta es muy posible cambiar ligeramente la apariencia física je, je.

—¿¡Ligeramente!? —exclamé desconcertado.

—Sí, yo también me sorprendí mucho cuando me vi al espejo un día de estos, esto paso a los tres días después de que despertó mi elemento.

¡Me gustaría saber bien que es lo que entiende Nitasha por «ligero cambio»! ¡Nada más hay que verla para saber qué cambio casi por completo, si no hubiera recordado muy bien su rostro de seguro me iba a ser imposible reconocerla! ¡¿Acaso todas las personas cambian de una forma tan drástica cuando despiertan?! ¿¡Acaso yo pasare por algo similar!? De alguna forma me preocupa el pensarlo… Ahora que lo pienso... Siento curiosidad por saber que apariencia tenían los muchachos y los maestros antes de despertar sus elementos.

—En fin... ¿Cómo has estado estos días Kitaro?

—¿Yo? Bien, ¿pero qué paso contigo? pasaron días desde que despertaste tu elemento y no sabía nada de ti, ni siquiera respondiste a mis mensajes.

—H-hablando de eso... —se puso algo nerviosa— Pasó algo muy gracioso con mi teléfono je, je, je... —rio nerviosamente mientras jugaba con sus dedos.

Nitasha tenía una mueca un tanto nerviosa cuando me comento al respecto, espero que me dé una buena repuesta después de pasar tanto tiempo sin verla, ya estaba comenzando a preocuparme por ella.

—¿Y qué fue lo que le sucedió a tu teléfono?

—Lo rompí... —dijo mirando a otro lado.

—¿Qué? —parpadeé un par de veces.

—V-veras... hubo una ocasión cuando tomé mi celular para contestar una llama, y bueno... Apenas lo sostuve se hizo pedazos en mi mano...

—... —acabo de sentir un escalofrió recorrer por mi espalda.

—Je, je... Resulta que cuando desperté me fue más complicado controlar mi fuerza y desde ese gracioso incidente he estado incomunicada, sabía que estarías preguntando por mí así que me puse a esperar todos los días aquí en el lobby después de estar libre con la esperanza de cruzarme contigo... En verdad lamento mucho que te preocuparas por mí.

—Bueno… Pensándolo un poco yo tengo en parte la culpa... Después de todo no sabes en donde vivo, así que no te preocupes por eso... Como sea, me alegro que estés bien Nitasha —le sonrío.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.