El Origen De Dos Grandes Reinos

Capítulo 81: Últimos Deseos

Ubicación: Afuera De Las Fronteras Del Reino de los Elfos

Círdan abre sus ojos para percatarse que miles de demonios de origen Naakros, Nigromantes entre otros; huyen de ellos de forma desesperada. Se percata que Salomón se dirige contra esos enemigos junto con Grom para asesinar al mayor número posible.

Comenzando Círdan a correr  contra sus enemigos mientras que prepara sus flechas, ya que no esperaba  ser transportado hacia otro lugar por medio del dios malévolo: Lius.

Logrando ver Yelena que sus flechas penetran con gran facilidad las armaduras de sus enemigos mientras que decide acercarse contra un demonio Naakro para atacarlo físicamente con su espada.

Atacando Yelena a su enemigo mientras que él prepara su gran garra afilada para dirigirla contra su costado izquierdo, segundos más tarde el demonio la contraataca con una sonrisa, ya que se percata que Yelena no le deja escapar con gran facilidad.

Decidiendo Yelena cerrar sus ojos, ya que teme ser asesinada en ese momento delante de todos.

A lo lejos, Círdan y Rave dirigen su mirada hacia ella para descubrir que está en problemas, por lo que deciden ellos acercarse hacia su ubicación mientras que Salomón, Anastasia, Heriberto y todos los demás; siguen atacando a las tropas restantes que han logrado alcanzar.

Impactando fuertemente la garra afilada del demonio tipo Naakro contra el costado de su objetivo, pero el demonio se percata que no ha logrado perforar la armadura de Yelena, ya que ella empieza a abrir sus ojos para darse cuenta que su armadura ha soportado el fuerte golpe por parte de su enemigo.

—¡Funcionó! —grita asombrada Yelena mientras que su enemigo retrocede completamente asustado, ya que no puede creer que su ataque no haya podido atravesar la armadura de ella.

Sorprendiéndose bastante Círdan junto con Rave mientras que ambos atacan al demonio Naakro para asesinarlo delante de Yelena.

 Todas las tropas aliadas se percatan de este hecho, por lo que deciden acercarse hacia Yelena para observarla más detenidamente.

Aprovechando esta oportunidad las tropas restantes de Calista para escapar por su vida.

—Es imposible, yo mismo vi que el demonio atacó fuertemente la armadura de ella —suena la voz de un guerrero humano.

Observando junto con los demás guerreros que la chica de origen elfo, decide quitarse su armadura delante de ellos para checar su cuerpo en busca de alguna herida o alguna herida.

Pudiendo ver todos, el cuerpo sensual que posee Yelena, pero no le prestan atención; ya que están sorprendidos por la forma en que su armadura pudo resistir el golpe de su enemigo.

Logrando ver Yelena que no existen rastros de alguna herida en su cuerpo, confirmando ella que tiene un material bastante poderoso que va a poderse utilizar en el futuro para beneficio de su reino.

Por otro lado, Melody observa con una sonrisa el acontecimiento junta con todos los demás dioses malévolos.

Se logra apreciar que Anderson se acerca hacia ella seriamente para poder hablar.

—Gran diosa, Melody —dice Anderson, llamando la atención de todos los dioses hacia él mientras que inclina su rostro hacia la tierra para hacerle una reverencia.

Decidiendo todos los demás dioses alejarse de ambos para dirigirse hacia otro destino desconocido, seriamente.

Lográndose apreciar un poco lejos que Monlix se acerca hacia Anraii para poder hablar.

—Joven Anraii —dice Monlix llamando la atención del dios de las bestias hacia él.

—Diga —suena la voz de Anraii, volteando a verlo seriamente en ese momento mientras que los demás; invocan sus respectivos portales para desaparecer.

Percatándose todos los reinos aliados que al fin han derrotado a una amenaza bastante poderosa y que ahora podrán volver a sus vidas normales. Sabiendo todos que tienen el apoyo del Ser Supremo Definitivo: Tsubaki, ya que él fue el que derrotó a Calista.

—He usado mi habilidad para ver el futuro y veo que nuestro amo; va a querer que usted vaya hacia su presencia —informa Monlix, deteniéndose junto con Anraii en ese momento, añadiendo—. Disfrute su momento al máximo.

Comenzando a sonreírle Monlix mientras que avanza hacia un nuevo destino, ya que deja a Anraii en su lugar seriamente.

Dándose cuenta Anraii que el anciano le acaba de avisar de algo que va a suceder un poco adelante, por lo que decide invocar un nuevo portal para dirigirse hacia un nuevo destino en ese momento.

Dejando todos a Melody junta con Anderson, ya que el joven hechicero se prepara para poder hablar con ella.

—Es el final, ¿verdad Gran diosa, Melody? —inquiere Anderson tristemente, pudiéndose ver a lo lejos que Heriberto, Cleto, Mauricio, Celina, Anastasia y Julián; se acercan hacia ellos.

Percatándose todos que Anderson decide quitarse su sombrero en ese momento para que la diosa lo pueda observar con gran claridad.

—Si mi estimado alumno, lamentablemente ya llegó el momento —dice en voz baja Melody, logrando ver Anderson que ella trata de aguantar las ganas de llorar.

—¿Qué va a suceder? —inquiere el alumno sin tomar en cuenta la presencia de sus demás compañeros que llegan hacia ellos.

Comenzando la diosa a dirigir su mirada hacia todos seriamente por unos momentos, ya que no tiene la confianza de explicarles, pero varias voces llaman su atención en ese momento.

«Madre, él fue uno de sus mejores discípulos en el pasado, ¿acaso no va a tener la confianza de revelarle lo que va a suceder? »,suena la voz de Hitori, comenzando a afirmar Melody en silencio.

Percatándose todos que un portal se abre para emerger Eufemia seriamente.

«Están todos reunidos, será mejor que no se le olvide de la misión especial de Cleto »,informa Ventisca.

Decidiendo Melody acercarse un poco más hacia Anderson para poderle explicar la situación, ya que a lo lejos; Círdan, Rave, Salomón y Grom; los observan seriamente delante de todos los ejércitos.



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En el texto hay: romance, magia, guerra.

Editado: 14.03.2023

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