Capitulo 7
Narra Tsuki
Aquel hombre que servía a una joven prácticamente loca era ni más ni menos que el hijo menor del científico Austen.
Austen era un hombre algo extraño, con una mente brillante, pero apesar de su trabajo, siempre tomo en cuenta a su familia el hijo mayor era Eusebio kinsert, la sucesora en su trabajo era su hija Clarisa bonttua, y el menor Gregorio solkurt, el crío a sus tres hijos solo, pues su esposa había muerto poco después de que Gregorio cumpliera 3, un fatídico 'accidente' se las arrebato, pero aún así ellos continuaron, pero lo que tubo que hacer el padre para mantener a tres pequeños, darles una buena educación, y estar presente para ellos, fue demasiado; el precio de la felicidad de sus hijos, lo valía todo y tubo que sacrificarse.
:3Continuando...:
Kiruko: Gregorio, eres tú? (Me acerqué para ver mejor su rostro y... Vi su rostro cortado, y remendado, con múltiples moretones, pero lo peor fue que le faltaba el ojo izquierdo y el derecho ya no era cafe sino azul, habían convertido al joven Gregorio en una especie de Frankenstein)
Quien te hizo eso!!!????
Fue ella la que te hizo esto???!!!
Gregorio: ... No importa ya, ahora es Kejuto quien importa, yo no puedo ayudarte, y tampoco puedes ayudarme, pero el aún está a tiempo de ser salvado, así que ve y salvalo!!!... La puerta está abierta solo hace falta de que empujes un poco, pero no creo que te guste lo que verás allí... Ella no tiene piedad, lo único que quiere es tenerlo a el, ~sujetando mi camisa me dijo~ no se lo permitas!!
(Gregorio me empujó y salió corriendo, para luego desaparecer en la oscuridad)
El tenía razón en algo, y es que ahora a la única persona a la que debo ayudar es a kejuto, debo hacerlo...
Me dirijo a la torre en donde se encontraba Kiruko y aquella joven, pero fue entonces que escuche unos jemidos, comencé a pensar lo peor, y con toda esa irá que tenía abrí las puerta para ver a aquella joven, estaba siendo tirada de un lado a otro, por un ser oscuro que no pude ver, y vi que los jemidos eran un simple eco, de una sinfonía rayada, me acerqué a Kiruko y vi que tenía la cabeza agachada, levanté su mirada y lo que Vi fueron ojos negros con pupilas rojas, me asusté al ver eso pues se suponía que el no poseía nada así en su interior, pero...
Empezó a descascararse como una pintura ya gastada y vieja, vi que en realidad no era Kiruko...
Cuando levanté nuevamente su rostro vi algo que me Helo la sangre, vi que era un cuerpo descomponiéndose y esos ojos que una vez me asustaron se habían desvanecido...
Entonces quién era este ser, pero lo que más me inquietaba era donde estaba Kiruko, fue entonces que salí corriendo a al cerro y cuando estaba apunto de llegar Vi a Kiruko, era el en verdad, Vi la hora y aún faltaba media hora para nuestro encuentro, y me sorprendió pues yo a esta misma hora había estado en la plaza, pero ya no me importaba, lo único que me importaba era que Kiruko estaba bien, fue entonces cuando corrí a abrazarlo fuertemente, el se sorprendió pero me continuo el abrazo, estuvimos así por un rato hasta que decidí que ya era hora de contarle todo, sin más mentiras, sin ocultar más lo sucedido...
Narra Kiruko
En cuanto me desmaye, no sabía a dónde iba pero tras eso sentí algo cálido, me desperté poco a poco y Vi que esa chica estaba haciendo algo en una esquina no pude ver bien pero estoy seguro que era un cuerpo, pero después de eso ella actuó aún más raro, simplemente se tiró al suelo y ese cuerpo se veía igual a mí fue entonces que Vi que algo salía del cuerpo de la chica, era una sombra oscura que hizo que todo se volviera oscuro, me miro con sus ojos amarillos, y tras eso me levanto y me puso en una esquina...
Tras eso puso el cuerpo en la misma posición en la que yo estaba y a la chica junto a él, vio por la ventana y tras un rato se volvió hacia mí y me levanto, tras eso me saco del auto, eso es lo último que recuerdo no puedo recordar más y cuando desperté estaba en el cerro hechado bajo un árbol, y fue entonces cuando recordé lo que había sucedido, no entendía nada, quién era esa sombra?, Por que me salvó?, Cuánto había dormido?, Y que era ese cuerpo que cambió por el mío?, o quién era?...
Tras pasar un rato intentando relajarme sentí como una persona empujó hacia el suelo abrazándome, fue entonces que note que era Kiruko, y solo me aferre a el, sentí su calor era relajante, pero aún más tranquilizante fue volver a verlo.
Tras un rato abrazándonos el se alejó un poco de mi y mirándome fijamente a los ojos me dijo:
- te lo contaré todo.
Esas palabras hicieron estremecer mi cuerpo y me quedé mudó para luego decirle:
- esta bien, cambio yo también lo haré.
El parecía algo sorprendido después de escucharme, pero sonrió y solo con esa sonrisa me relaje.
Nos separamos y vimos juntos una vez más como en los viejos tiempos un amanecer, era como volver a nuestra antigua rutina, era como volver a sentir todos esos sentimientos y me hicieron olvidar por completo cuanto tiempo había pasado, el como nos habíamos separado, el hecho de que nos separamos; sentí como si siempre hubiera estado con el, como su el tiempo se hubiera detenido, como si todo fuese perfecto, y me gustó esa relajación.
Pero este amanecer también simbolizaba el hecho de que era hora de decirlo todo, sin más rodeos, sin más mentiras, era hora de confesar todo.
Holiiii!!!
Bueno hasta aquí les traigo el siguiente capítulo de "el pacto" espero y les guste, e informo que empezaré a subir más seguido, así que atentos.
Bueno hasta un próximo capítulo.
Editado: 06.04.2020