Al caer la noche, la oscuridad invadía a la isla de Moonlight, aquella isla es muy pequeña que cuenta con 27 habitantes y 15 casas, la isla es puro desierto, los árboles se encuentran secos, y sin ninguna hoja, y para llegar al siguiente pueblo tomaría más de 56 horas.
Sin embargo, esa misma noche se puede encontrar a un chico de tan solo 17 años, aquel chico salió a dar una vuelta para distraerse un rato, pero al caminar tanto sus pies se cansaron que decidió acostarse en el suelo para platicar con la Luna.
—Mi querida Luna—dijo sonriendo—Antes de irme quisiera pedirte un favor, te pido que nunca me abandones y que por las noches me sigas acompañado, cada noche te estaré esperando para verte nuevamente, y contarte mi día a día hasta encontrar aquella chica que me arrebató la única familia que tenía, y cumplir la promesa del paraíso qué prometí crear.
Al decir estas palabras, el chico se levantó, y se dirigió al lugar donde vive, para volverse a encontrar con su soledad. Su casa es un viejo granero que el mismo reparó, eh hizo tres habitaciones, una se encontraba del lado derecho de la entrada, la otra estaba alado de la misma habitación, y la última se encontraba del lado izquierdo de la entrada, pero para ello se tenían que subir unas escaleras.
—Quisiera tener a alguien más con quien hablar, y así poderle contar los que siento ahora mismo—Dijo el chico
En ese momento el chico agachó la cabeza apunto de llorar, pero en ese preciso llegó un canario cantando.
—Lily—Gritó animado—Perdóname por haberte olvidado, tú eres la única familia que me queda.
El chico suspiró, alzó la cabeza y prendió la luz, mientras que su canario se acomodaba en su hombro izquierdo.
—Lily—Dijo el chico—Hoy nos marcharemos de aquí, la avioneta ya está lista y preparada para el viaje, pasaron varios meses desde la última que volé en ella, y ahora me siento listo para volver a pilotear, aunque solo me falta ir a buscar los mapas para iniciar el viaje, mientras las voy a buscar mantente en la avioneta y por nada del mundo salgas, ya que habrán visitas el día hoy.
Lily voló directo al asiento y se acomodó. Aquel chico se dirigió a la habitación de la derecha qué se encontraba junto a la entrada, pero sintió una presencia aterrorizante, pero eso no lo detuvo, abrió la puerta y entró, al entrar, vio en el suelo los mapas tirados, pero se le hizo extraño ya que también vio que la ventana estaba abierta, ya que antes de salir cerró todo, pero sin importarle demasiado dejó aún lado lo que pensaba y empezó a recoger los mapas, al terminar, notó una figura extraña que se encontraba en el lado derecho de su ventana, por lo que decidió no prender la luz, sino que lo miró fijamente por unos 5 minutos, y al pasar ese tiempo aquella cosa prendió dos luces redondas de color rojo.
—Veo que no eres alguien de por aquí, ¿no es así? —Dijo el chico.
Aquella cosa se levantó, y empezó a hablar en un idioma extraño; sin entender, el chico miró a la criatura y se percató que era un humano.
—¿Qué es lo que buscas?—Preguntó
La criatura se empezó acercar lentamente al chico, pero al estar cerca se aventó para atraparlo, pero no lo logró.
—¡Atrápame si puedes!—Gritó riéndose.
Al decir eso, el chico empezó a correr, y sus pies empezaron a dar vueltas con forma de círculo, como si se tratase de una caricatura. Y al salir de la habitación cerró la puerta con llave ,y también sello la puerta con madera y clavos que se encontraba a lado de la puerta, y al hacerlo, la criatura empezó a rasguñar la puerta para poder salir.
—Me preguntó por qué no intenta salir por la ventana, ¿Acaso es tonto o qué? —se pregunto riéndose
La criatura mide 3.34 metros, su cara no era muy redonda, más bien su cara parecía tener figura de triángulo invertido, tiene una piel muy oscura, sin ninguna prenda de ropa, tiene unas piernas bastantes largas y sus pies tienen forma de punta, sus brazos no eran tan largos como sus piernas, pero destaca por tener brazos en forma de anzuelo, pero los mas terrorífico es que tiene una mirada aterrorizante, que tan solo verla se te eriza la piel, en su misma mirada brillaba una luz roja que era capaz de alumbrar muy poco, no cuenta con ninguna nariz, ni tampoco con orejas, pero contaba con una aura más oscura que su piel, y su sombra reflejaba las misma oscuridad de su aura, pero en su misma sombra sus ojos brillan de la misma manera que sus ojos lo hacen.
El chico al alejarse de la puerta fue corriendo a la habitación de arriba, y al bajar trajo consigo un pequeño cofre, colocó el cofre en el segundo asiento de la avioneta, y al querer subir, cinco hombres llegaron a la entrada de su puerta apuntando con sus armas.
—¡Detente y aléjate de la avioneta, rápido!—Grito el hombre alto
El chico se alejó y dió dos pasos hacia atrás, y se volteó para mirar a los hombres, al verlos notó que tenían puestas unas máscaras, el más alto tenía puesta una máscara sonriente, el hombre que está en su lado derecho tenía puesta una máscara triste y el que estaba atrás su máscara tenía su cara sonriente sacando la lengua, el hombre que se encontraba del lado izquierdo del hombre alto trae su máscara con una cara sorprendida, y el hombre de atrás lleva una máscara con la cara de emoji muerto, y la vestimenta que traen puesta aquellos hombres es de un smokin negro.
Los rasguños de la puerta aún seguían sonando, y el hombre de la cara sonriente le pide al de la cara sonriente con la lengua afuera que vaya abrir la puerta y que revise lo que esté ahí dentro, aquel hombre empiezo acercarse a la puerta, pero el chico cerró los ojos.
—No te recomiendo que te acerques, ya que si abres es esa puerta podrías morir—Dijo el chico
—¿Qué es lo que escondes ahí dentro para que nos prevengas?—Preguntó el hombre con la máscara de la cara triste
El chico empezó a sonreír, ya que el tampoco sabía lo hay ahí dentro.