Capítulo nueve.
La contestación del gringo nerd.
Las 3 chicas traviesas se pasaron castigadas todo el resto del mes, yendo de la casa a la escuela y de la escuela a la casa, hasta que llegó el día 5 de marzo y el empleado del correo le entregó la revista de su suscripción a doña Adelina a selecciones del readers digest, entre otras cosas y un sobre de carta de correo ordinario destinada a Romaia.
- ¿Ya nos va a levantar el castigo doña Adelina? Mire que ya nos hemos portado bien y queremos ir al cine a ver la película de E. T. El extraterrestre. –dice Romaia.
- ¡Y la de juegos diabólicos! -dice Érika.
- ¡Esta bien, pero se van a la función de las 5 para que lleguen a las 7 a más tardar, nada más ven una película hoy y la otra mañana, nada de juegos diabólicos, ni nada de terror, porque luego no se quieren dormir y andan inventando cosas! Y que sea en Plaza Mocambo que es la que les queda más cerca.
-Gracias doña Adelina, ya verá que vamos a llegar temprano.
- ¡Tienes correo, muchacha! -le dice doña Adelina entregándole la carta a Romaia.
- ¿De quién o qué? –pregunta Romaia revisando el sobre para leer el remitente. - ¿Nathan Verch? ¡Es el gringo Érika, me contestó el gringo!
Dice y las dos suben corriendo las escaleras ante la complaciente mirada de Adelina, que a todas las veía como a sus hijas.
Érika buscaba un abrecartas cuando Romaia ya estaba pellizcando el sobre por un costado para abrirlo y lo primero que sacó, fue la foto de Érika, la misma que le habían enviado.
- ¿Qué raro? Nada más está tu fotografía. –dice Romaia.
- ¡Hola chica de mis sueños! Te devuelvo la fotografía de tu amiga, le dices que es muy linda y me la saludas, ojala también me hubiera escrito ella en otra carta para conocer a la chica de mis sueños y a una amiga sincera al mismo tiempo, me dio mucho gusto recibir tu carta y me dispuse a contestarla en cuanto el cartero la aventó por el buzón, me pareces muy linda y especial y me gustaría conocerte completamente, yo no tengo cámara instantánea pero te envió una foto de hace poco más de 2 meses donde estoy con mis hermanos, celebrando mi cumpleaños número 19, espero que tú también sepas quien de los 4 soy yo para saber si yo también soy el hombre de tus sueños o tan solo un amigo sincero.
-Ya revisé en mi libro de atlas mundial que precisamente mis hermanos me regalaron ese día, la ubicación del puerto de Veracruz y me doy cuenta, muy contento que no queda muy lejos, aumentando las posibilidades de que algún día pueda yo ir a verte.
Un abraso y espero me contestes pronto. Nathan Verch.
P.D. Espero yo también ser el hombre de tus sueños.
- ¡Te la regresó, increíble, pero te la regresó! Y me refiero a la trampa, no a la carta, pero; ¿Cómo demonios adivinó quién de las 2 eras tú?
Dice Érika mientras su amiga observaba en silencio la fotografía que Nathan le había enviado.
- ¡Ya siento que lo odio! Pero ahorita mismo se la regreso. –dice Romaia. –Y me refiero a la carta y a la trampa.
- ¡Hey espera! Tranquila, cuenta hasta 10 y cuéntaselo a quien más confianza le tengas, primero tenemos que saber quién de los 4 hermosos gringos que están aquí es él, así que por ahora me dejas en paz ese cuaderno y esa pluma, que tenemos que hacer la tarea si es que queremos ir al cine.
-Porque ya sabes que doña Adelina no nos va a dejar salir si no la hacemos primero.
Y Romaia, tratando de no pensar mucho en el asunto, se dispuso a hacer la tarea de ese día, para poder salir a Plaza Mocambo y sin novedad se divirtieron viendo la película de: Juegos diabólicos y después de la cena, mientras miraban en la televisión de su cuarto un capítulo de la telenovela; Gabriel y Gabriela; Romaia pensaba en la manera de regresarle la trampa al astuto Nathan que había adivinado quien era, y no solo adivinado, sino que lo aseguraba y mientras más miraba y miraba la fotografía que mostraba a 4 hermanos con distintas indumentarias, con un paisaje costero en el fondo, cortes de peinado diferentes y una cercana diferencia de edad, no lograba adivinar, y ni siquiera imaginar cuál de ellos era el tal Nathan.
Lástima amigo sincero, pero yo soy la otra, en esta carta te devolveré mi foto para que me devuelvas la de mi amiga, también a mí me da mucho gusto que hayas contestado mi carta, también te devolveré tu foto, a mí también me hubiera gustado que tú fueras el hombre de mis sueños, pero no adivinaste, así que esa fue la señal divina que me indicó, que el hombre de mis sueños no puede estar tan lejos de mí, y en una situación tan imposible de conocer.
Igual Besitos de tu amiga más sincera y más lejana:
Romaia Montero Sobrevilla.
- ¿A ver que le escribiste? –le pregunta Érika arrebatándole el cuaderno. - ¿Cómo, así nada más, ya te vas a dar por vencida? La gran Romaia Montero Sobrevilla, la líder no elegida de las 3 mosquetebrias, las más terribles cazadoras de hombres infieles del siglo XX; ¡Para eso me gustabas!
- ¡Pero es que no tengo ni idea de quién de los 4 sea él! Aunque me da igual porque los 4 son bien guapos.
-Mira chaparrita; ¡Ni a mí, ni a mi mejor arpía! Digo, ni a mi mejor amiga nos va a ganar un méndigo gringo nerd como éste, y no le vas a contestar la carta hasta que no estemos 100% seguras de quien es el tipo, mañana mismo iniciamos la operación de averiguar la identidad del gringo. –dice Érika.
- ¡Mañana mismo voy a averiguar en qué cuarto las voy a acomodar para separarlas si no se duermen! –dice Adelina desde la puerta. –Ustedes siempre inventando cosas.
Y así, terminó ese día para las 2 mosquetebrias, con la difícil misión de averiguar la identidad del gringo nerd.