Un grupo de chicas miraban alarmadas a un apuesto joven de cabello negro, tras las palabras que había pronunciado, palabras que no les había causado ninguna gracia, sino más bien molestia.
—Marilú, dime que lo que escuche, ¿No fue cierto? — expresaba una de las jóvenes, mientras empuñaba sus manos.
—Pues si lo que escuchaste Caro, fue decir a Adrián que sus verdaderos amigos son Franks, Priscila y la fantas….
—¡No! ¡No sigas hablando! — respondió Carolina, cubriéndose sus oídos con sus manos.
—¡Esto tiene que ser una broma! — agrego Brisa en tono incrédulo.
—No me pareció que lo dijera en broma — replico otra joven, con molestia, mientras la joven de lentes bajaba la mirada, y sus tres compañeros de mesa la observaban.
—No hagas caso — dijo Priscila, tomando la mano de la joven de lentes, al tiempo que una de las fans de Adrián dio un golpe con el puño de su mano a la mesa donde estaban Julieth y sus amigos, haciendo que estos posen su mirada sobre ella.
—Vez lo que ocasionas fantasmita, ahora ellos por tu culpa ya no quieren ir a la fiesta de primavera — expreso con rabia otras de las jóvenes que eran parte del grupo de Brisa y Carolina, haciendo una breve pausa para acotar con rabia — ¿Qué clase de maldita pócima les distes?
—Sí, ¿Qué cosa le diste de beber a mi querido Adrián? — agrego Carolina, mientras Brisa, asentía, y el nombrado posaba su mirada sobre la joven que había hablado.
—Cálmense Pierina; Caro y Brisa — expreso una de las chicas del grupo.
—¿Cómo nos pides calma Dalí?, si esta poca cosa, a base de pócimas esta…..
—¡Deja de decir eso!, ¡Yo no les di nada! — dijo Julieth, con firmeza, pero a la vez calma, haciendo una breve pausa para agregar con la mayor calma que pudo — Yo no soy una bruja para hacer pócimas extrañas y con ella ganarme la amistad de las personas, no lo soy. Si ellos no quieren ser mis amigos, es decisión de ellos, si quieren ir o no a esa fiesta, es también su decisión, yo no tengo nada que ver en estás.
—¡Y piensas que te creeré! bruja — replico la joven.
—¡Pierina! — dijo Franks con molestia, poniendose de pie, ya no pudiendo aguantar más el cargamontón que le estaban haciendo a la joven de lentes.
—¿Qué?, solo digo la verdad — respondió la nombrada, posando su mirada en el joven.
—Es cierto, Pierina solo ha dicho lo que todos en el aula pensamos — expreso Carolina, con firmeza.
—¿Todos?, no lo creo — dijo Priscila poniendose de pie, al tiempo que añadía — Solo las personas con un pensamiento tan….
—Priscila, una chica de tu apariencia debería ser amiga nuestra, no de ella, reacciona querida, no te dejes manipular por su hechizo — pronunciaba Brisa, pero no pudo completar lo que iba a decir, pues Adrián la interrumpió.
—¡Basta!, dejen de decir tanta tontería — expreso el joven, con firmeza.
—Pero no son tonterías, son verdades, es solo que como te tiene hechizado al igual que a Franks y a Priscila, no se dan cuenta de lo distintos que son…
—¡Qué pensamiento más absurdo!, Yo no veo que seamos distintos, somos iguales — dijo Franks con firmeza, mientras la joven de lentes, respiraba hondamente para tranquilizarse.
—Si, si son bastante iguales — pronunció Pierina con ironía, mientras la joven de lentes, contenía las ganas de llorar.
—¡Basta, basta!, es nuestra decisión el que queramos o no ir a ese dichoso baile, no tienen por qué desfogar su malestar con Julieth, ella no tiene la culpa de nada — dijo Adrián con firmeza, mientras Priscila, posaba su mirada en la castaña.
—Ahora te volviste defensor del patito feo — pronunció Carolina, en su molestia.
—¿Qué has dicho? — expreso Adrián con rabia.
—Solo la verdad, te convertiste en su defensor….
—No me refiero a eso, sino a lo otro — respondió con firmeza Adrián, haciendo una breve pausa para añadir con firmeza — ¡Discúlpate con Julieth!
—¿Qué?...
—¡Discúlpate con Julieth! ¡Discúlpate por haberla ofendido así! — agregó Adrián, mientras Franks, miraba con desilusión a las fans de él y su amigo.
—Pero si no es ninguna ofensa, ella sabe que no es ni un poquito agraciada y ustedes también, no se hagan — añadió Carolina con firmeza.
—¡Ya basta Caro! — expreso en voz baja Dalí, mientras tomaba del brazo a su amiga.
—No tengo porque callarme, solo estoy diciendo la verdad — dijo la joven.
—Así es, Caro, solo dice la verdad, ellos no pueden estar tan ciegos como ella — agrego Brisa, debido al dolor de haber sido una vez más rechazada por el chico que le gustaba.
—¡Cállense víboras! — expreso Priscila, mientras la castaña, ya no aguanto tantas agresiones hacia ella, se puso de pie y hecho a correr hacia la salida del lugar. ¡Julieth! ¿A dónde vas? — dijo la joven, mirando con molestia a las chicas, antes de echar a correr tras su amiga.
—No puedo creer a donde llega su crueldad — expreso Adrián, posando su mirada en sus fans, luego de ello camino hacia la salida del lugar.
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Editado: 20.06.2025