Capítulo 18: "Aceptando sentimientos"

Ya había pasado dos semanas desde que el baile de primavera se llevó a cabo; y al cual Adrián fiel a su palabra, no asistió, causando asombro entre sus conocidos e incluso molestia en sus fans, que habían esperado un cambio de parecer de él, pero este no se dio.

Su amistad con Julieth seguía creciendo, así como los sentimientos de ambos; aunque no querían reconocerlos aún, Julieth por temor a sufrir nuevamente; y Adrián porque a pesar de que ya se había dado cuenta de que estaba enamorado de ella tenía cierto temor de aceptarlo, pues el aún no comprendía como alguien tan popular y atractivo como él podía haberse llegado a enamorarse de alguien como la joven de lentes, a la que todos la veían poco atractiva; pero que ante los ojos de él era la niña más dulce, inocente y linda que había conocido y que además poseía aquel perfume que él no quería percibir por el resto de su vida.

Julieth por su parte, durante esas dos semanas había fortalecido su amistad con Priscila, quien incluso iba a su casa para que juntas hagan las tareas o simplemente platiquen de su día. Es así que ella, se entero que Priscila y Franks estaban teniendo algunas citas, aunque aún como amigos, a su vez ella le mostro su verdadero rostro a la rubia, pero le hizo prometer que no comentaría con nadie sobre ello.

—Si te animaras a mostrarte realmente como eres, callarías muchas bocas en la preparatoria — expresaba una rubia, mientras llevaba una taza a sus labios.

—Ya te dije que no quiero que nadie sepa como realmente soy físicamente — contesto con calma Julieth, mientras dejaba una taza sobre una mesa.

—¿Por qué?, la verdad no comprendo porque escondes tu belleza — acotó Priscila.

—Por que así es más fácil conocer a las personas — respondió la castaña.

—Sé que te dije que por ser amigas no es necesario que me cuentes todo sobre ti, pero yo siento que hay algo que te duele mucho, y si no lo hablas con alguien ese dolor te lastimará aún más — agrego la rubia.

—Papá ya debe estar por llegar — expreso Julieth, poniendose de pie.

—Nuevamente evades el tema — dijo para sí Priscila.

—No lo estoy evadiendo, es solo que decidí dejar mi pasado en ello, en el pasado, además es más fácil conocer a las personas cuando acercan a ti no por ser popular, ni por tu inteligencia, sino por lo que proyectas….

La platica del par de chicas se vio interrumpida por el sonido de unas llaves, tras algunos segundos, el padre de la castaña entro a la casa.

—¡Buenas tardes papá! — pronunció Julieth.

—¡Buenas tardes señor Halls! — añadió Priscila.

—¡Buenas tardes hija! ¡Buenas tardes señorita! — respondió el hombre.

Mientras tanto, en otra casa tres jóvenes se habían reunido para hacer una tarea, y aprovechando el termino de la misma empezaron a platicar sobre sus vidas.

—Por lo visto la pasaste muy bien el fin de semana — decía Adrián, tras escuchar lo que su rubio amigo comento.

—No puedo negarlo, me divertí mucho con Priscila en el parque de diversiones — respondió Franks, sonriendo.

—Al menos tú ya te libraste de su hechizo — expreso Daniel, con una sonrisa plasmada en su rostro.

—No hables así de Julieth, ella no es ninguna bruja, es una niña maravillosa, si te permitieras conocerla más te darías cuenta de que digo la verdad — contesto Franks, con calma, haciendo una breve pausa para añadir mirando por momentos a su Adrián — No hay que juzgar a las personas sin conocerlas y mucho menos guiarnos de apariencias, además lo que siento por Julieth, sigue intacto; pero ya me di cuenta que yo no tengo opción con ella, sin embargo, hay alguien que si las tiene, por eso decidí hacerme a un lado, solo espero que esa persona acepte pronto sus sentimientos y deje de atormentarse con el qué dirán y decida confesarle sus sentimientos a ella, porque estoy seguro que ella también siente lo mismo por él solo que tiene temor a que solo quieran jugar con ella, por ello esa persona debe confesarle ya sus sentimientos pues solo nos faltan dos meses para acabar la preparatoria y luego tal vez ya no la vuelva a ver.

Ante las palabras del rubio, Adrián bajo la mirada, mientras Daniel, miro incrédulo a Franks.

—¡Ah! sí, ¿Y quién según tú puede fijarse en un patito feo como ella?, solo hechizado podrían verla linda, yo no discuto lo que sea como persona, pero exteriormente lo que proyecta no es nada agradable para los ojos,…— pronunció Daniel, siendo interrumpido con un molesto Adrián.

—¡Ya cállate Daniel!, ¡No te permito que te expreses así de ella! — expreso con rabia.

—No puedes ser, esto es una broma, ¿Verdad? — dijo Daniel, en tono irónico.

—No, no lo es — contesto Adrián con firmeza, haciendo que los otros jóvenes posen su mirada en él. La persona que ha puesto sus ojos en ella, soy yo — agrego con seguridad, sorprendiendo con su confesión a Daniel, mientras Franks sonreía.

—No amigo, no te desgracies la vida, solo aguanta dos mesecitos más, eso sí aléjate de ella, en cuanto vayas a la universidad conocerás chicas que, si estén a tu nivel; ya que no quieres retomar tu relación con Brisa o Caro, tienes que alejarte de ella; yo sé que en cuanto acabemos la preparatoria ese maldito hechizo que la fantasmita puso sobre ti se romperá — pronunció Daniel.