El Planeta Pilar: Pieza Clave Del Poder

Capítulo 45: Evolución

Universo: Zona oscura uno punto cinco

Bolt-Ra abre sus ojos. Se encuentra tendido en el piso. Recuerda que antes de desmayarse sentía mucho dolor por alguna razón; extrañamente, ahora se siente mucho más fuerte que antes.

Revisa sus grandes manos, las cuales son más delgadas y musculosas, pero han cambiado totalmente; en lugar de estar cubiertas de escamas, están cubiertas por piel humana de tono morena oscura.

—Uhmmnn —medita el dracónico mientras se levanta de su lugar—. Nuevamente me acaba de pasar —asevera el en voz alta.

Con ayuda de su mano derecha, destruye los eslabones de la cadena que aprisiona su brazo izquierdo. Sabe que ha ganado más fuerza de la que posee normalmente, por lo que se libera de las demás cadenas en solo segundos. Mueve su cabeza hacia arriba y hacia los lados, tronando los huesos y músculos entumidos del cuello, a causa de todo este tiempo que ha estado prácticamente descansando en una sola posición.

—Si no fuera por la ayuda de esa chica, nunca lo hubiera logrado, pero… —expresa Bolt-Ra. Su cuerpo empieza a generar bastante electricidad, destrozando las cadenas restantes, liberándose por completo—. Excelente —dice él.

Mueve su larga cola de reptil color negra, rompiendo poco a poco el mismo piso. En medio de esas labores se detiene, dirigiendo su vista hacia el frente y hacia la puerta principal de su celda; camina varios pasos, pero se vuelve a detener de golpe.

—Uhmmnn. A ver, a ver… —musita Bolt-Ra.

Sus ojos brillan fuertemente de color blanco, volviendo a su estado normal

—No, si voy ahora, el maldito se va a dar cuenta de mi presencia. Espararé el tiempo adecuado.

Sonríe de forma malévola mientras que se aleja de la puerta principal; se sienta en el piso e invoca con su mano derecha una gran esfera de agua.

Ese orbe refleja se convierte en un epejo de mano, ayudando al prisionero a estudiar su nueva apariencia. Ahora tiene pelo corto de color negro que cubre un tanto sus ojos, aparte de unos cuernos bastantes afilados en su cabeza que apuntan hacia arriba. En su cuello hay un símbolo misterioso de color dorado, el cual abarca hasta su pecho. Bolt-Ra sonríe ampliamente, entendiendo el significado de esa marca.

—Paythius…  —susurra él; otros orbes se van apareciendo alrededor, compuestos de diferentes elementos—. Realmente todos cometieron el grandísimo error de atacarme y encarcelarme, jejeje.

Cada esfera comienza a brillar de diferentes colores; Bolt-Ra se enfoca en una esfera de color blanca, recordando un fragmento del pasado.

“¡Bolt-Ra! ¡Pagarás por tus pecados!”, suena la voz del arcángel Miguel de ese orbe.

Ahora observa otra esfera color café.

“¡Cursed Chain!”, suena la voz de Paythius de esa bola de energía.

En el rostro de Bolt-Ra se dibuja una sonrisa, al tanto que más esferas aparecen alrededor, mostrando su pasado.

—Realmente cometieron un gran error al encarcelarme —expresa Bolt-Ra, recordando que la Deidad única y suprema lo atrapaba por medio de su poder, mientras que Hastur y Azathot lo atacaban en conjunto con más demonios—. Todo su poder ahora me pertenece y no podrán derrotarme tan fácilmente —menciona el dracónico en voz alta.

Bolt-Ra regresa su atención a la puerta corrediza doble de barrotes gruesos que lo tiene encarcelado; en esos momentos, la puerta comienza a romperse.

 

*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*{}*

 

Universo: Desconocido

Ubicación: El espacio sideral

 

En este lugar en medio de millones de estrellas y miles de planetas, se encuentra Lucifer junto con algunos otros demonios mayores; todos esperando un momento especial.

—¿Ayudamos a Ginjo? —inquiere un sirviente.

—No. Esos insignificantes no van a ser un desafio contra él —responde Lucifer al tanto que niega con su cabeza—. Nuestro amo quiere que lo apoyemos en la conquista del planeta pilar.

—No hay problema, jejeje —expresa otro general de alto rango mientras frota sus manos.

—Lo más seguro es que el arcángel Miguel va a querer defender el planeta pilar; esta guerra va a ser bastante complicada… pero divertida. Apoyaremos a Ginjo durante la gran batalla, y así ganar un tanto de renombre como los demonios más poderosos de todos los universos.

Entre tanto, uno de los sirvientes presente voltea hacia una dirección en especial.

—No puedo sentir la presencia de Belfegor —comenta perplejo él.

—Déjenlo; él no importa. Si quiere apoyar en esta guerra, será mej…

Lucifer se queda a medio enunciado, dirigiendo su mirada hacia otro lado.

—¿Sucede algo, señor Lucifer? —inquiere uno de los demonios generales.

—Qué extraño. Uhmmnn. Pude sentir una presencia bastante poderosa que nos supera con gran facilidad —responde Lucifer con seriedad.

—¿Más poderosa que nosotros? —inquiere uno de los sirvientes entre risas burlonas.

—Así es; esto es extraño —expresa Lucifer, ordenando al instante siguiente—. Todos vayan preparándose para apoyar a Ginjo en su conquista; mientras tanto, yo voy a investigar el origen de ese problema.

El gobernante del infierno menor se mueve, mientras que los demás demonios lo observan seriamente.

—Tan fácil que es invocar un portal, pero prefiere levitar —comenta uno de ellos.

—¡Déjalo! ¡Lo hace para perder el tiempo! De seguro no va a intervenir en la guerra; ahora Ginjo posee una gran fuerza —responde el otro.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.