–AHHHH; PAREN POR FAVOR!!! – Mi grito retumbaba en el laboratorio, estaban tomando parte de mi poder que sentía que se drenaba de mi… era como una tortura, me estaban arrancando una parte de mi y yo ya no podía más…. Era insoportable y alguien gritó por encima de mi voz:
–YA BASTA LA LASTIMAN, dejen que se reponga de su herida, esto no era parte del trato– era la voz de Derek y el Dr. Robert detiene el rayo. Agitada y desorientada mi respiración acelerada como si hubiera corrido una maratón, estaba segura de algo, estaba muy cansada.
Derek se acercó a mi costado y me toma la mano derecha y yo lo miro
–Oye estas bien? – me dijo mirándome a mis ojos.
–Si aunque estoy mareada– le alcancé a decir y mi voz sonó quebrada
–Ven te ayudaré a levantarte– me desató y me dijo– Agarrate bien fuerte de mi cuello– acto seguido le pase mi brazo por su cuello y me saco de la cama fría de metal y me llevó fuera del laboratorio.
Fuimos por un largo pasillo con candelabros a los costados bañando de una luz amarilla calida el ambiente. El pasillo tenía un tapizado de alfombra roja, de el lado derecho habían muchas puertas de un algarrobo macizo y de el lado izquierdo tenía ventanas que estaban cubiertas con unas cortinas de color bordó y las paredes eran de un color beige.
Llegando al final del pasillo había una puerta entreabierta y entramos en el anteúltimo cuarto al final del pasillo.
Luego el me apoyó sobre la cama que había allí y se alejó para cerrar la puerta. Se acercó hasta mí y me miró con sus ojos avellanas, prentando mucha atención a mis movimientos.
–Quedate aquí y descansa, te hará mucho mejor sin duda– y acarició mi cabello
–Donde están los otros? – Necesitaba saber, algo de ellos y entonces recordé lo que pasó en la mañana– Oye tu, ¿no estabas herido por ellos?¿y por que te dejaron escapar conmigo del laboratorio? – Lo dije alterada ya que se suponía que ellos querían cazarnos.
–Lo siento Clarisse, pero yo ahora trabajo para ellos, esto viene mucho antes de cruzarnos y encontrarnos con ustedes, con Jace y contigo, la verdad, no pretendía ni quería que nadie salga herido, pero todo se salió de control, y solo fingí mi desmayo en el departamento cuando atacaron, la verdad es que solo los quise guiar hasta donde estábamos pero no quería que hubieran incidentes, ni tampoco heridos, pero los hubo y por haberlos guiado ahora como te digo trabajo para ellos, me pagan y con eso cerramos el trato. Tus amigos supongo, estarán bien, pero no por mucho tiempo y esta es la situación, ahora si me disculpas tengo cosas que hacer antes de matarlos– y se dio media vuelta, agarró una soga y me ató las manos en la cabecera de la cama, ató mis piernas y me puso una cinta fuerte sobre mi boca y se despidió y se fue de la habitación.
Yo quedé allí observando a mi alrededor, se veía todo mi alrededor todo tan ostentoso, que era como una habitación de personas adineradas y todo eso lucia de esa manera, pero que haré aquí, nisiquiera se como se encuentran Marcos, Jace, Scarlett.
Entonces se me ocurrió invocar a mi fuego, quizás me puedo soltar, inspiré aire 3 veces y me concentré y cuando vi mis manos se despedía y se arremolinaba a mi alrededor lenguas de fuego violeta que consumieron las cuerdas que me ataban a la cama.
Por fin era libre y feliz de estarlo. Ahora debería de encontrar a los demás.
Me acerco a la puerta y giro la perilla. Para mi suerte no estaba abierta la habían cerrado, ahora por donde saldría? No tenía ni la menor idea de que hacer, asi que miré a mi alrededor estudiando por donde debía de salir y buscar otra manera de escaparme.
Me percato que habían cortinas y detrás de esta había una ventana, decidí tener que romperla y atar sabanas para poder descender al patio ya que me encontraba en el 2do piso y asi me pude escapar de aquella habitación, ya para cuando estaba en el suelo mire a mi alrededor, era como una mansión ostentosa con su gran patio que parecía un parque y tenía una piscina demasiado grande y ostentosa.
Me pregunté qué clase de gente vive aquí?
Caminé por alrededor de la mansión y aproveché que estaba de noche y encontré la puerta trasera y entré por allí.
Había una especie de bodega que seguía derecho hacia una cocina muy blanca y reluciente. No había nadie allí así que me fue fácil ingresar de nuevo a la mansión. Cuando salgo de la cocina, me encuentro con una especie de sala de estar bien iluminada con sillones de color bordó, eran varios de ellos uno grande y tres pequeños para ser exactos y para mi sorpresa de espaldas estaba sentada en uno de ellos Scarlett. Así que con mucho sigilo me fui acercando a donde ella estaba. Cuando llegué detrás de ella le toqué el hombro, pero no se dio vuelta así que rodeé el sillón y esta estaba dormida y la intenté despertar de nuevo y abrió sus ojos sobresaltada.
–Ayyy Clarisse casi me matas del susto! – dijo mirándome frunciendo el ceño y con voz enojada