Cap 35

41 
Luis Mejia  
causa de un deseo que pidió en su juventud, Roberto preg ¿qué es lo que me 
quieres decir? Zona continuo escucha es verdad lo que te diré le respondió y no 
puedes decírselo a nadie más esto debe quedar entre nosotros dos él era 
inmortal no podía morir sin importar lo que hiciera puede vivir sin necesidad de 
comer ni beber ninguna clase de líquido o alimento, empezó a relatar la historia 
que su ex esposo le había contado y lo que sucedido viviendo con él y su madre 
finalizo diciendo te digo todo esto porque no quiero que este relato desaparezca 
con el pasar de los años y en la hora de mi muerte, su esposo no podía creer lo 
que acababa de escuchar, en medio de su desconcierto preg ¿Dónde está esta 
persona? “no lo sé” respondió zona desde el día en que salió de esta casa no he 
vuelto a saber de él. 
Con todo lo que su esposa le había revelado y no le creyera le dijo ¡no importa lo 
que haya pasado antes de conocerte quiero seguir contigo si me lo permites! 
Zona por su parte respondió: quise mucho a Ringo, pero ahora quiero estar a tu 
lado para siempre. Después de haberse quitado ese gran peso de encima que la 
consumía, decidieron seguir adelante los dos como una familia, se querían 
demasiado. 
Ringo después de la muerte de Serafina estuvo unos días en la ciudad cuidando 
de Zona, en ese tiempo se dio cuenta que ya no lo necesitaba ahora tenía alguien 
en su vida que le podía dar la felicidad que no había podido darle, así que decidió 
dejarla ir para siempre, antes de marcharse decidió hacerle saber que siempre 
estuvo cuidándola aunque ella no lo hubiera notado para cumplir la promesa que 
le había hecho el día que le confesó que la quería un día antes de irse paso por la 
panadería que ella y su madre tenían para despedirse, este vestía un pantalón 
negro, camisa gris y una chaqueta de cuero negro que le llegaba hasta las 
pantorrillas, al estar al frente de la panadería vio a su esposo en el mostrador 
atendiendo, quien pregunto ¿Qué necesita señor? él no respondió a la pregunta 
solamente se quedó mirando a la mujer que amaba que estaba de espalda, de 
repente suspiro, con lágrimas en los ojos, deseo que seas muy feliz, que puedas