Iván sabe bien que los elfos de luna, aunque son ligeramente superiores a los humanos, son débiles en comparación a los demonios, el no deseaba llevar consigo a un lastre, necesitaba a alguien fuerte, aun así, nunca pensó encontrarse con esta persona.
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[Nombre: Haguruma Hanzo Lvl. 1858]
[Trabajo: Fundador de la esgrima de luna azul (absoluto)]
[Fuerza: 20500]
[Agilidad: 15000]
[Intelecto: 9000]
[Vigor: 30800]
[Aura: 18020]
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—"Parece que la suerte a Erse le sonríe incluso cuando no está presente" —Medita el joven Milfiore —Hanzo era tu nombre, ¿no es así?, tu nodachi expide una sensación familiar.
—¿De qué demonios estás hablando? —Reclama el elfo.
—El estilo de la luna azul, parece no haber envejecido bien —Clama el joven llamando la atención del elfo —He visto espadas similares a esta, pero aquellas se veían más desgastadas, como si no supieran imitar bien los movimientos.
—Conoces mi esgrima, imposible no la he enseñado a nadie en mil años —Reclama el elfo.
—Eso lo explica, en comparación a su espada, las espadas que he visto se encuentran en un estado vergonzoso, tal vez usted no haya tenido discípulos, pero supongo que ellos habrán transmitido la información en ese tiempo, aunque claramente, lo hicieron mal...
—Entonces todavía queda una practicante de mi estilo... —Reclama el elfo —Supongo que yo mismo tendré que ver cuánto se han oxidado mis técnicas en estos mil años, Mocoso, querías un elfo, entonces iré contigo, a cambio señálame a la bastarda que está mancillando mi esgrima...
—Por supuesto... —responde el joven Milfiore —"Lo siento Erse, pero sé que me lo agradecerás a largo plazo"
Tras esas palabras Hanzo se retira de la tienda con una expresión hostil, al tiempo que el joven con una expresión más serena dirige la mirada a la líder de la aldea.
—Apuntaste a su ego, una jugada sucia... —Señala la Elfa.
—Usted no me detuvo, ¿no se preocupa por su hijo?
—Es mi yerno, y no es tan fácil de matar como de engañar —Responde.
—Comprendo...
—Aunque la verdad sé que el mismo se hubiese propuesto para ir, incluso si no hubieses mencionado su espada, después de todo el sería incapaz de dejar a uno de los nuestros en manos del aclamado héroe corrupto —Expone la mujer.
—Así que siempre lo supo...
—La elfa que encontró con los Ragadomon hace 10 noches es mi nieta además de la esposa de Hanzo.
—Imagino que, de haberle hecho, aunque sea un rasguño...
—Mi yerno te hubiese aniquilado al verte —Señala la líder de la aldea —cuando escuche de su encuentro yo también me sorprendí, que alguien tan joven incluso para los humanos estuviese tan seguro de sus palabras, derrocar al país del sol, ¿realmente es posible?
—Los imperios caen todo el tiempo, en especial aquellos que se sostienen a base de mentiras, solo necesitan de un empujón en el lugar correcto, y todo colapsara —Expone el joven —Después de eso solo quedaran cientos de hormigas corriendo en completo caos.
—Y supongo que planeas ser quien le ponga fin al caos, no, no es así, lo veo en tu mirar, hablas de soluciones pacíficas, pero en el fondo solo esperas a la menor provocación para tomar lo que quieres por la fuerza —Espeta la líder de la aldea —Eres perverso, pero en un buen sentido...
—Yo no poseo las cualificaciones de un rey, Los reyes deben ser abnegados y atentos, al mismo tiempo que firmes y osados, sabios pero también algo ignorantes, abiertos a las nuevas ideas pero sin olvidar los principios fundamentales —Aclama el joven —Yo soy demasiado egoísta y solo puedo pensar de manera objetiva; Ryan en cambio cumple con casi todas las condiciones que mencione, y el resto las aprenderá una vez suceda a su padre, para entonces, espero que los elfos de luna también le ayuden a dirigir apropiadamente.
—El príncipe Ryan ha sido amigo del bosque desde que tenía 6 años, le ayudaremos en lo que necesite durante su mandato, eso ya lo habíamos decidido...
—En ese caso ya no tengo nada más que hacer aquí —Responde el joven poniéndose en pie.
—Antes de retirarte, ¿puedo hacerte una última petición? —Solicita la mujer.
Así los vientos del cambio una vez más empiezan a moverse, extendiéndose hasta el otro extremo del desierto.
Ciudad de Ruranthel, 28vo día del 7mo mes del calendario de libra...
Dentro del palacio de los elfos una escena particular se estaba desarrollando, en medio de una sala de conferencia, se podía ver como 10 hombres cargan sobre sus hombros una enorme caja metálica que arde al rojo vivo.
Al mirarla directamente muchos elfos se sintieron maravillados mientras que muchos otros se sintieron curiosos e inclusive temerosos, pues para muchos de ellos sería la primera vez que la verían.
—Hermanos, después de un extenso debate hemos llegado a la conclusión que, para evitar la propagación de la infestación demoniaca, y frustrar las intenciones del héroe Corrupto, muy a nuestro pesar hemos decidido liberar el poder de la flama blanca —Expone uno de los elfos más ancianos —Puede que los más jóvenes no conozcan el poder de este artefacto apocalíptico, pero seguramente habrán escuchado de este en los registros de la torre...
La flama blanca, tal como lo dijo el anciano en los registros de la torre se describe como un arma de destrucción masiva, capaz de incinerar grandes hectáreas de terreno en cuestión de segundos.
Editado: 22.10.2024