El Presagio de las Flores (libro de los tulipanes)

Volumen 4: El curioso caso de Perséfone Rosengard Acto 1

Paralelamente...

En la cima de la torre del campanario se podían apreciar a dos de los Barbaros Drakonskin custodiando a la joven Rosengard, quien había sido maniatada y sus ojos vendados.

—Se escuchan muchas explosiones en el horizonte, el jefe de la aldea debe estarse divirtiendo solo —Señala un bárbaro anciano.

—Cierra la boca Moro, ambos sabemos que un humano no sería capaz de igualar el poder del jefe Basara, ese bastardo debió romper su palabra y trajo a alguien más consigo —Reclama una mujer bárbara de mediana edad posando el filo de una lanza contra la garganta de Erse —Yo digo que la matemos aquí y vayamos a ayudar al jefe.

—Subestimas a ese muchacho Renei, si se parece en algo a su padre, ayudarlo ahora mismo solo hará que nos mate...

—Aun así me molesta estar en la retaguardia, No entiendo ¿porque el jefe de la aldea se toma tantas molestias para lidiar con ese humano?

—Precisamente porque ese humano se tomó muchas molestias para lidiar contra nosotros, puede que seamos guerreros, pero también somos cazadores, los mas viejos lo sabíamos, que no pasaría mucho antes de que nos convirtiésemos en la presa, si ese humano y sus técnicas llegan al país del sol, nuestros niños y sus niños vivirían siendo cazados, Basara renuncio al honor de un guerrero con tal de evitar ese futuro.

—Espera, ¿Renunciar al honor de un guerrero?, Pero eso significa...

—Así es, Basara acorralo a un humano y lo ataco a traición, por lo tanto, ya no está cualificado para ser el líder de la aldea.

Al escuchar esas palabras la rabia empieza a inundar a la mujer quien lanza un poderoso golpe en contra de una de las columnas de la torre, derribando una pared.

—Maldita sea...

—Entiendo tu frustración Renei, no... creo que en realidad, soy yo quien se está conteniendo —Clama el anciano, evidenciando varias venas latentes en su brazo.

La frustración, así como la ira que sentían los hombres de Basara en estos momentos no serian diferentes a las de perder un ser querido, y en este estado solo se requería la más insignificante provocación para hacerlos estallar.

—De verdad, lo siento... —espeta la joven Rosengard.

—¿Qué lo sientes? — reclama Renei quien sin pensarlo un segundo le conecta un fuerte golpe en el centro del rostro a la joven —¡¿Tienes alguna idea del desastre que ese bastardo ha generado?, ¿de las vidas que se perdieron de...?!

Antes de poder terminar su oración la mujer Drakonskin se percata de algo importante, frente al rostro de la joven se había manifestado una mascara blanca, la cual esta procede a retirar evidenciando así la apariencia actual de la joven.

—Una elfa... —Clama Moro con una expresión pálida.

—Esto tiene que ser una maldita broma — reclama la mujer antes de lanzar otro golpe.

—Renei, ¿qué planeas hacer exactamente? —Pregunta el anciano.

—No es obvio, los elfos están protegidos por la iglesia, si la dejamos ir el país del sol movilizara todas sus fuerzas para darnos caza, tampoco basta con solo matarla, es necesario deshacernos de toda evidencia.

—Ya veo, pensé que simplemente seguirías golpeándola, pero tu deducción, así como tu curso de acción son los correctos, prosigue...

Sin más interrupciones Renei recubre su brazo en escamas rojas y como si fuese una lanza atraviesa el vientre de la joven, no obstante, el daño que esta recibe es meramente superficial, pero lo suficiente como para hacerla desmallarse del dolor.

Paralelamente lejos de ahí el joven Milfiore recibe una notificación...

**

[Aviso: su propiedad está bajo ataque...]

**

—"Bajo ataque, ¿maldita sea Basara que estás haciendo?" — reclama internamente —Debo darme prisa...

Espeta antes de notar las fauces de Wilhelm a su lado.

Conforme el joven Milfiore luchaba por su vida, en su subconsciente la mente de Erse poco a poco empezaba a silenciarse.

—"Duele, esta frio, me da miedo..." —Exclama la joven internamente

El dolor que sentía en estos momentos era desgarrador y la sed de sangre que emanaba esa mujer le dejaban en claro de que iba a morir. Aun así, aquella sensación no le pareció tan mala, o más bien sentía como si en el pasado algo similar o peor hubiese pasado.

—"No quiero mirar" —espeta.

Aun así, incluso si no lo deseaba, las imágenes empezaron a propagarse por su mente como un enjambre de langostas, mostrándole un recuerdo, una escena que no había cruzado por su mente desde hace muchos años.

Año imperial 1099, en algún lugar del continente de Almah...

En una de las muchas instalaciones secretas del crisol una prueba perversa se estaba desarrollando, arrodilladas en el suelo se podía ver a una gran cantidad de dríadas y druidas, todos con espadas atravesando sus vientres desde el centro.

Una a una cada una de las dríadas empezó a desangrarse hasta morir, en cuestión de minutos más de la mitad de las presentes murieron por sus heridas.

Tras el paso de una hora 4 más murieron, tras el paso de 3 horas 6 más murieron, hasta que finalmente solo quedaron 10 de las cuales Erse se encontraba incluida, no obstante, sus condiciones actualmente eran notablemente distintas a las anteriores.

Al principio a todas las presentes se les enterró una espada de 1100 centímetros, a una profundidad de 900, actualmente, la profundidad a la que se encontraba el arma era de 400 centímetros.

Aquel era el propósito de este macabro ejercicio, en estas condiciones el 90% de las personas sucumben por el dolor y agravian sus heridas, mientras que otros retienen su posición en espera de asistencia médica, aquel era en único método conocido para sobrevivir a esta situación, no obstante, existe otro.

—Permítanme felicitar a todas las presentes — Clama una mujer cuyo rostro todavía se veía distorsionado en los recuerdos de Erse —Como ven pocos son quienes pueden llegar a este punto, esta prueba no solo las ayudara a sobrevivir a una situación crítica, también fortalecerá su resistencia mental en gran medida, extraer la hoja de una espada no es una tarea sencilla, el dolor que deben sentir a cada paso debe ser extenuante e insoportable, pero deben ir lento a cada paso y mantenerse firme, si aceleran el paso aunque sea por un segundo, morirán en el acto, pero quienes sobrevivan, ganaran un poder que ridiculizara a los usuarios de magia natural.



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En el texto hay: fantasia, mafia, suspenso

Editado: 05.06.2024

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