Cap 16: La cita.
Carolina.
Estaba caminando hacía el salón, era un viernes hermoso cuando veo a William parado afuera.
—¿Estás esperando a Emma?
—No, a tí.
—¿Por qué?
—¿Cómo le dijo lo que siento a Emma?
Silencio.
Emma.
Quede con verme con Willi el domingo en la noche, pero aún estaba dudando así que me reuní con Carolina e Isabella cuando invite a Keira dijo que no.
—No se que responderle a Willi.
—Obviamente dile que sí. —Contestó Isa. —Liam es un fantasma, él no te dará ni la mitad de lo que te puede dar William.
—Yo opino que sigas siendo amiga de William y si ves que empieza a gustarte más William termines con Liam.
Estuvimos debatiendo un poco más y llegué a la conclusión de que la mejor idea sería la de Caro.
DOMINGO.
Ya era de noche y ya había terminado de alistarme poniendome mi vestido favorito el mismo que me puse para el cumpleaños de Liam, vi un carro afuera de mi casa, me despedí de Liam y le dije que cualquier cosa me llamara. Me subí al carro y fuimos a un restaurante, cuando llegamos estaba solo, William me corrió la silla para sentarme.
—Me alegra que hayas dicho que sí.
—No me negaría.
Al poco tiempo llegó un mesero y pedimos nuestra comida.
—¿Te gusta hacer deportes?
—La verdad nunca fue mi fuerte cuando era pequeña practiqué atletismo, pero… —Recordé que me sacaron debido a lo de mi madre. —me sacaron.
Como si William hubiera leído mis pensamientos no me preguntó al respecto.
—Ya veo ¿y leer?
Ahora si un tema que me gustaba.
—Claro, amo leer, siempre fue mi refugio ante problemas familiares.
—A mi también me gusta leer, pero no tan de seguido.
—¿Has visto alguna serie o algo así?
—The umbrella academy ¿y tú? —Nunca fui muy fan de ver series, pero cuando me recomendaban una me la veía hasta el final y esa me la recomendó Isabella.
—No te quiero decir. —Ví una sonrisita tímida en él.
—William.
—Emma es que… te vas a reir.
—No me río. —Lo iba a hacer.
—Me gustan los… —Ví que desviaba la mirada. —K-dramas.
—Eso no tiene nada de malo. —Le conteste sonriendo un poco.
—Me volví fan por mi hermana.
—¿Por qué te gusta la docencia?
—Cuando era pequeño tuve una maestra que nos adoraba, su nombre era Diana, ella siempre fue un amor de persona y… ella nunca fue como otros profesores que parecían haber escogido su carrera por obligación a ella se le veía la pasión por ello entonces de ahí nació mi amor.
—Yo quiero ser docente porque siempre he amado a los niños.
—Ya veo.
Nos trajeron la comida y comimos un poco luego de eso fuimos a dar una vuelta.
—¿Por qué te gusta el ajedrez?
—Mi abuela era aficionada.
—Te reto a una partida.
William se giró hacía mí y me tocó la punta de mi nariz.
—Acepto el reto, pero mañana por que ya es tarde pulguita aventurera.
—Oye, mi tamaño no es tan bajo.
Él se reía un poco.
—Me acuerdas de mi hermano.
—Oye ¿por qué nunca me cuentas de tus padres? —Me quede quieta solo le había tenido tanta confianza a Liam, además no sabía como reaccionaría.
—Mi madre me abandonó a los siete.
Él me abrazó.
—Si necesitas hablar con alguien en algún momento no importa la hora, lugar o fecha siempre estaré okey.
—Gracias.
Le devolví el abrazo apoyando mi cara en su pecho mientras me inundaba de su olor nos quedamos ahí por unos minutos hasta que él me dice.
—Es hora de ir a casa Emma.
—Bueno.
Luego nos fuimos al carro y él me llevó a casa.