El regalo del Emperador.

Capítulo 12

-No se atreva a volverme a tocar sin mi consentimiento.-reprocho.

Jamás en la vida alguien me había golpeado y a pesar de ser una mujer tan menuda,su mano era fuerte,sentí como me empezó a arder mi mejilla.

-Es usted el emperador,pero eso no le da derecho a abusar de ninguna mujer.-replico al tiempo.

-Ni tu a golpearme,eso me dolió.Y si tengo derecho,todos aquí me obedecen soy la máxima autoridad,si yo lo deseo te hago en este momento mía y nadie dirá nada, ni tus padres.

-No quiero ser obligada a intimar con usted.

-Entonces prepárate para ser la futura emperatriz virginal,en cuanto cumplas 18 años nos casaremos para mantener el bienestar de mi imperio,y... solamente será contacto político,nadie te tocará.

-Quiero hablar con mi familia antes.-dijo.

-De hecho quiero que regreses a Smirnova y que tús padres te preparen para que aprendas a reinar.-replique.

-Estos 3 meses me mantendrá alejada,no juzgo sus acciones pero tampoco las consecuencias de ellas.

-Necesito que estés preparada para ser una emperatriz no una princesa,en cuánto llegues al trono empezaremos a practicar tus poderes,no espero nada de ti,más que la preparación necesaria.

-Usted manda.

-Partes mañana mismo.

Me quedé estrujado por alejarla,pero mis intenciones no eran del todo malas,si había un enemigo en el imperio haciéndose pasar por quien le placiera,ella también estaba en peligro.Me retiré de los aposentos tenía que buscar a Donatello, porque alguien se había hecho pasar por él.

Me transporte a velocidad luz a el palacio donde se hospedaba Donatello.

-¡Ay! Mi querido emperador,que noble visita hasta sentí mariposas.

-Donatello cállate ¿Cuando fue la última vez que viste a Danae?

-Hoy en la mañana justo cuando le prohibiste verme.-refirio.

-Donatello esa cosa sigue aquí,y se está haciendo pasar por todos.

-¿Ahh si? Cómo se que no eres esa cosa;y porque lo dices.

-No seas tonto vine a prevenirte.Y lo digo porque ya se hizo pasar por ti.

-¿Y era guapo como yo?

-Principe estamos en peligro,basta de bromas,creo necesario que regresé a Dryfor,en lo que terminamos está guerra.

-Jamás,a eso vine a luchar,si demuestro aquí mi valor seré rey inmediatamente.Y no juzgue mi decisión aquí me quedaré,es mi misión también.Tenemos que inventar una palabra clave para poder reconocer cuando estemos con el enemigo.-Dijo.

-Que sea luna,es la cosa favorita de Danae.

-Sabes Alexander, hablando de ella,si no te interesa yo si la querría como reina.

-Calla tu arrogancia Donatello,me interesa demasiado que la convertiré en mi emperatriz.-replique.

-Espera...¿!Que!?...es tan pequeña Alexander,cómo planeas darle un papel con suma responsabilidad,la expondrás a sin fines de peligros.

-Por esa misma razón la deseo como emperatriz,para que se aprenda a defender de peligros y por su juventud no me preocupa yo tenía 12 años y saque a relucir el imperio.

-Entonces que sea luna,informe a los más allegados a usted.-dijo cabizbajo.

-No de hecho solo quiero que lo sepamos, Dessire, Danae tu y yo.Nadie más.

-¿Cuándo se irá?

-Mañana mismo.-replique.

Me despedí y tome rumbo a mi estudio, empezé a trabajar papeles administrativos,para distraerme del tema.Estaba concentrado en ello,ya era muy tarde y el cansancio me vencía; cuándo escuche un estruendo aterrador que hizo temblar todo el palacio,mi pensamiento en primera instancia fue hacia mi amada Danae.

No estaba tan fuera en lo correcto,pues Dessire era la que luchaba en los jardines con aquel ser obscuro.

-¿¡Que pasa Dessire!?.-grite.

-Encontre a la porquería que se hizo pasar por mi,me he equivocado pensando que era él,pues en realidad solo es una serpiente rastrera.-replico

Aquella cosa se retorcía en el suelo,debido a el hechizo que le había lanzado.

-Eres tan poca cosa para tanto poder que uso mi hechicera.-le dije al obscuro.

-No fui yo,tu mujer lanzo una bola de energía yo también voy saliendo.-menciono Dessire.

Aquellas palabras me alertarón a correr a la habitación de la princesa Danae.

-Dessire,destruyelo.-sali corriendo.

El rostro de ella se mostró sonriente ante esas palabras.

-¡Danae!

-¡Emperador! Esa cosa trató de aprovecharse de mí.-decia sollozando.

-¿Que te hizo? Dime todo, Dessire se está encargando de él.

-Entro y me dijo que me amaba y quería estar conmigo,le dije usted ya ha tomado su decisión y contestó si, alardeó quererme,me di cuenta que no era usted cuando le dije a qué hora partire y me dijo ¿A dónde irás? Él solo dió a notar que no era usted.

-Maldito basura.-grite.

-Emperador pero eso no es todo,me tocó mi marca, metió su mano bajo mi vestido y me decía que era mi amo,sabía que no era usted porque su mano era muy áspera y sentí que quemaba mi piel con su roce.

Sus palabras hacían que la rabia se desbordara por todo mi ser.

-Y eso no es todo emperador,cuando me quiso besar, su olor era putrefacto,no era usted estaba segura,lo empuje y se abalanzó en mi fue cuando emergió un círculo de energía y lo hice estallar directamente en él,pero alcanzó a brincar por la ventana y la energía estalló en el suelo del palacio.

-¡Dessire! Hazlo sufrir y torturalo lo más posible.-grite con todas mis fuerzas.

 

Danae.

Cuando el emperador me besó sentí que el cuerpo me ardía, esperé tanto tiempo aquel beso,y me sentí a la vez tan desechada,como si el hubiera dicho ahí está ¡Ya cállate!

Le solte una bofetada,no por coraje si no de tristeza,apenas había besado otra boca y había permitido que esas manos lo tocarán,y tan fresco venia a besarme a mi.

-No se atreva a volverme a tocar sin mi consentimiento.-replique.

Se que se molestó,porqué empezo a decirme que yo era su propiedad y que si el quería podía hacerme suya sin que nadie me defendiera.Empezamos de nuevo a discutir que no quería intimidad con él,no forzada,cuando entre la discusión mencionó unas palabras que me quebraron el alma.




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