El regalo del Emperador.

Capitulo 20

Escuchar a mis posibles damas,casi hace que se ahogue con la cena.

-Perdoname amor mío,te exalte.

-¿Estas segura Danae? Esa mujer casi te asesina.

-Quiero tener a mis enemigos muy cerca,estos momentos críticos no puedo confiar ni en mi sombra.

-Como tu gustes ángel mío,solo cuídate mucho de tus decisiones.

Después me entregué a él temerosa de lastimarlo,pero parecía lo contrario en cada beso el se llenaba de una completa fuerza.Y tal como prometió entrenó junto conmigo y Dessire.

Cuando el emperador se retiró, platique con ella a solas.

-Oye Dessire el día del ataque,yo distingui unas luces extrañas.

-¿Eran negras con morado?

-Si,y brillantes pero con aura extraña.

-Eran luces malignas,de menos ya las sabes reconocer.Y ya sabes atacar con energía.

-¡Ahora si podré ayudar a mi emperador!.-dije alegre.-Pero esas luces solo las he visto aquí.

-Pon atención al entrenamiento, aún falta mucha práctica.

Dessire era muy enfocada a lo que hacía y prestaba atención a los detalles,a veces sentía que me estimaba y otras veces que me odiaba por sus fuertes ataques.

Terminando uno de los entrenamientos,me llegó una carta de que vendrían mis hermanas en una semana,me sentí muy contenta de que me visitaran,tenía mucho que contarle a Sofía sobre mi nueva etapa de emperatriz.

Cuándo me estaba aseando recordé que no me había llegado el sangrado,debo decir me sentí extraña suponiendo que en mi estaba pasando algo malo,ya que el sangrado era puntual cada 30 días.Este tema me tuvo distraída en los entrenamientos y en todo lo referente a mi entorno personal.Ansiaba la llegada de mis hermanas,para poder contarles lo que me pasaba.

-Danae, emperatriz mía te he notado algo extraña estos últimos días.

-No es nada emperador,solo el cansancio de los entrenamientos.

-Esta noche quizá no duerma contigo,tengo mucho trabajo atrasado,y por la mañana una reunión de presupuestos con los nobles.-dijo.

-Deberias de dejarme ayudarte.

-No es nada pesado lo haré de inmediato, deberías descansar para la llegada de tu familia.

Asentí con la cabeza y me fui a nuestro dormitorio,está semana había luna llena y mis fuerzas estaban en su punto máximo en esos días,así como también mis sentidos extrasensoriales.Me asome por el gran ventanal y a lo lejos volví a ver destellos de luces malignas,aquellas que le había preguntado a Dessire,pero solo eran destellos y ella me había dicho que eso no debía alterarme.

Dormí intranquila,pero si logré descansar un poco hasta que entrarón mis damas las cuáles por el momento eran Raquel, Anayeli y Marcela.

-Buenos días majestad,le traigo sus ropas,y ya está listo el baño de aseo.

-Gracias Anayeli.Hagamos esto rápido porque las mujeres de mi familia somos muy puntuales.

Terminando de asearme,me peinaron y me arreglaron un poco.

-¿Emperatriz? El carruaje Smirnovano ha llegado al jardín principal.

-Alegria bota de mi corazón,han llegado mis hermanas.

Salí corriendo a su llegada cuando escuché en el pasillo principal que Dessire reclamaba algo a Alexander.

-Yo creo que ella ya debería ayudarte con esto,es mucho trabajo para ti,la tienes muy consentida.

-Todo esto sera su trabajo en poco tiempo.-Replico Alexander.

-Es injusto que te mates trabajando y ella gozando.

En ese momento interrumpí y me dirigí firmemente a ellos.

-Estas en lo correcto Dessire, él no me ha dado responsabilidades y son necesarias para el buen funcionamiento del imperio y ambos.Por lo cual si él no me otorga tareas funcionales,yo misma me adjudicare algunas tareas.

-Danae,apenas está empezando tu reinado,yo puedo con esto.

-No está a discusión Alexander,o me dejas ayudarte o yo misma buscaré que hacer.

Dessire observaba y juro que sentía satisfacción de vernos discutir.Eso me enfureció.

-Ahora que si lo prefieres,hay personas que igual te aman y se preocupan por ti, también pueden ayudar.-Dije mirándola.

-¿Que dices? Danae, Danae.

No hice caso a su voz y seguí caminando hacia donde estaban mis hermanas,sentía celos y sentía irá de que ella seguía preocupada por él y odiandome a mi,en serio creí que ya estábamos llevándonos mejor.

Todos estos pensamientos se calmaron en cuánto ví a Sofía.

-¡Ahhh! Sofía te he extrañado tanto.

-Solo a ella,que tristeza.-Dijo Leonore.

-A todas, Leonore, Monique.-Las abraze.-¿Dónde está Alisse?

-Ella no vino por sus deberes matrimoniales,está en busca desesperada de un embarazo,en días así es fuerte su matriz.-Respondió Sofía.

Pasamos a tomar el té y mis hermanas estaban maravilladas con los jardines y el palacio.

-¿Pasa algo?.-Replico Sofía.

-No.

-¿Segura?

-Bueno si,pero es un tema de intimidad.-Replique.

-Descuida,a nadie le agrada hablar de ello,pero debería ser necesario.

-¿Que se necesita para tener un bebé?.-Dije.

Ella me miró extrañada por mi pregunta,entendiendo así que yo no sabía nada de intimidad.

-Danae ¿Que mi mamá nunca te dijo nada de lo que pasa entre hombre y mujer?.

-Sofia,te confieso que ni siquiera sabía cómo era tener intimidad,pensé que era solo un beso.

-No me digas que no sabes ni siquiera lo que es la culminación del hombre.

Moví la cabeza en negación.

-El sangrado también desapareció,no ha llegado está semana.

-¡Ay Danae! No sé cómo has estado con el emperador si ni siquiera sabes nada de la intimación.

-Necesito que me ayudes,pues no sé nada aún.

-Bueno básicamente...

Ella empezó a explicarme todo con lujo de detalles desde como empezamos a ser mujeres, hasta como puede surgir un embarazo,la forma en que los hombres culminaban y la de nosotras.

-El sangrado puede dejar de surgir en el primer mes que empezaste tu intimidad,no te preocupes en algunas es normal,y más por tu edad.

-¿Pero aún así cabe la posibilidad que este embarazada?




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