El Regreso

28

Peyton

 

Conduje a toda velocidad que se podía. Aquí no me podían joder ni un carajo. Necesitaba salir de Los Ángeles lo más pronto posible. Llegue a mi destino.

Aquí toda la mierda de mafiosos, gánster más poderoso de todos los jodidos continentes se reunían aquí. Entre sin ninguna emoción en mi rostro. Todos me conocían e hicieron un asentimiento en señal de saludo mientras caminaba. Llegué a la sala donde se reunían todos, y me encontré con lo más poderosos. Los cinco.

Luke, John, Andrew, Allec y Derek.

Todos se voltearon a verme de inmediato y sonrieron sarcásticamente.

–Diabla pensé que habías ya habías olvidado tus jodidas responsabilidades –soltó sarcásticamente al verme Andrew. Apreté mi mandíbula conteniéndome.

–Como solo pasas por la ciudad como si fueras una jodida estrella –término de decir Luke. Joder.

Mátenme antes que los mate.

–No se me olvido –aclare –Solo estado poniendo en orden algunas cosas, pero he hecho todo lo que me han pedido –respondí seca mirándolo sin ninguna expresión. Él ni siquiera se inmuto. A ellos no los podía intimidar –Regrese de hacer la jodida investigación y estoy aquí es lo más importante –termine de decir mirando al resto, estos asintieron.

– ¿Sabes que ha regresado el supongo? –Pregunto John pasándose una mano por el cabello, asentí –Estamos aquí reunidos para hallar la jodida manera de eliminarlo como lo hicimos la primera vez –explico el motivo del que estaban aquí reunidos.

Derek se levantó y fue a sacar algo del escritorio. Tiro en la mesa un montón de sobres. Lo mire sin entender.

–Todo esto mando el muy infeliz amenazándonos de que acabara con todo nuestro alrededor y tú también estas en esta jodida mierda mezclada –dijo serio mirando los sobres. Sabía que estaba metida aquí en esta mierda junto a ellos. Suspiré, cogí un sobre y lo abrí

 

Derek

 

Viejo amigo. Cuánto tiempo, ¿no?

 

Pensaron que acabarían conmigo, pero se equivocaron. Los eliminare a todos.

Comenzó la jodida cuenta regresiva.

Los hare arrastrase a pedirme clemencia todos ustedes. Luke, John, Allec, Andrew, Ryan, pero sobre todo a la estúpida de la pequeña diabla. Le hare pedir que me suplique que la mate.

 

Todo se acabará para todos ustedes, la cuenta regresiva comenzó.

 

Prepárense

 

Ax

 

Mierda.

–Joder, maldito infeliz –murmuré entre dientes mirando el resto de sobres que supuse que dirán lo mismo. Luke carraspeo llamando mi atención.

–Tenemos que prepáranos para todo lo que se venga. El muy cabron viene a jodernos nuestra jodida vida –dijo mirándonos a todos, asentimos. –Aparte de lo que te mandamos a investigar, yo también hice algo de eso –comento cogiendo aire –Ha reclutado mucha gente, no está solo –soltó de una sola. Algo no me cuadraba muy bien desde que recibí el primer sobre.

¿Cómo podía estar vivo si nosotros acabamos con él?

Yo acabe con él.

–Como pudo pasar esto, si hace años nosotros nos deshicimos de él. –los mire –No lo entiendo joder –dije frustrada con la situación –El debería estar muerto. Mierda, yo lo mate –mire a todos.

–También pensamos en eso y lo investigamos, pero no encontramos nada. Es como si hubiera resucitado del maldito infierno –murmuro Derek entre dientes

Comenzamos a discutir la manera de acabarlo definitivamente. No dejaríamos que nos jodiera, no otra vez. Durante tres horas pasamos hablando de eso. Cuando miré mi móvil y me di cuenta que era tarde y en cualquier momento llegarían a la mansión mis hermanos. Me levante, ellos me imitaron.

–Cualquier cosa nos avisas –dijo Derek, el resto asintió. Me despedí de un abrazo con cada uno de ellos y me retiré de aquel lugar. Acelere todo lo posible, llegue y salí rápido del coche.




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