El regreso de la oveja

Capitulo 54

— ¿Cómo te sientes?

Él se intentó levantar, pero le dolió la columna.

— No te pares, quédate quieto.

— ¿ Bendición?

— Dios te bendiga.

— ¿Y papá?

— Está trabajando. Estuvo desde tempranito esperando que despertaras, no quería ir a trabajar y le tuve que insistir, dijo que trabajará hasta mediodía. Y tus tías estuvieron aquí.

— ¿Se fueron?

— Si.

— ¿ Qué hora es, pues?

— Las diez.

— ¿Y la madre de José?

— Ay, pobre mujer, debe ser un gran dolor. Dijo que quería hablar contigo. Y Luis pasó por aquí tempranito y dijo que pasaba más tarde— ella hablaba y Edward miraba el techo, quizás pensando en lo que sucedió anoche, pero aún así prestaba atención a lo que decía su madre—. El pastor vendrá más tarde.

— ¿Le contaste?

— Si. De todos modos quería hablar contigo el domingo, pero como pasó esto tendrá a visitarte y de seguro aprovechará.

— Mmmm.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.