La Noche de las Estrellas era un día muy especial en el reino de Neflheim. La gente salía a las calles para celebrar la aparición de las estrellas en el cielo nocturno, un evento que solo ocurría una vez al año. Las calles estaban iluminadas por faroles y antorchas, y la música y las risas llenaban el aire.
Alastair, un niño de 10 años, salió con su familia a disfrutar de la fiesta. Caminaron por las calles, admirando los espectáculos de magia y comiendo dulces y bocadillos. Pero de repente, la luz del sol desapareció y la oscuridad cubrió el reino. La multitud comenzó a gritar y correr en pánico, y Alastair vio cómo sus padres eran atacados y asesinados por criaturas oscuras.
Alastair huyó corriendo a un refugio seguro, una pequeña cueva en las montañas. Temblando y llorando, se escondió allí hasta que la luz regresó al reino al amanecer. Cuando salió de la cueva, descubrió que la mayoría de la población había desaparecido y que el reino estaba en ruinas.
Desde ese día, Alastair sobrevivió en el reino solo, aprendiendo a cazar y cultivar su propia comida. Pero siempre se preguntó qué había causado la desaparición de la luz y la muerte de su familia y amigos. Y por qué él había sobrevivido.
Años después, Alastair recibió un misterioso mensaje de un mago llamado Merlín, quien le dijo que él era la única esperanza de restaurar la luz en Neflheim. Y así comenzaba la aventura de Alastair para descubrir la verdad sobre su reino y encontrar un camino hacia la restauración y la redención.