El relojero del tiempo

3.C El tiempo lo dira

—Tal vez solo se fueron para no tener la carga de un bebé —Murmure. Camine lentamente hacia mi casa, mirando la puerta que estaba a tan solo unos metros lejos de mi. La casa últimamente a estado vacía y silenciosa desde que mi abuelo falleció. Era algo que me causaba más tristeza. Mirando a el interior de la casa hacia que me acordara a el.

Todo me recuerda a el

Pase los últimos meses desde que falleció mi abuelo, Buscando pistas de ese reloj. Solo ese reloj podría hacer que todo volviera a la normalidad.

¿Tal vez ese viejo tenía algo que ver con el reloj que yo buscaba?

Abrí la puerta principal de mi casa, entré y me senté en la silla del comedor pensando sobre lo sucedido. Pero cada pensamiento me llevaba al mismo. La muerte de mi abuelo no solo me había afectado a mi. Si a casi todos los del pueblo. Era muy querido por todos, y conocido por sus historias. Aunque los papás de Will lo llamaban loco, por eso. Will me caía bien, aunque sus padres nunca fueron de mucha ayuda. Siempre me quisieron que estuviera lejos de él. Aunque, solo éramos unos niños cuando empezó nuestra amistad.

Estaba tan consumida por mis pensamientos hacia mi abuelo y will, que no escuché que alguien tocaba la puerta de mi casa

Estaba tan consumida por mis pensamientos hacia mi abuelo y will, que no escuché que alguien tocaba la puerta de mi casa. Me levanté de mi asiento y camine hacia la puerta principal. —¡Ya voy! —grité al escuchar la desesperación de los golpes. Abrí la puerta lentamente y mire por el medio de la puerta asonándome lentamente.

—¡Oma! Mi linda niña —dijo aquella mujer con una voz demasiado chillada y suave. Era Margaret.

—¡Margaret! —abrí la puerta por completo. Me miró con una sonrisa suave y dulce. Tenía una pequeña caja entre sus manos. Aunque Margaret era aún más mayor que mi abuelo, ella me cuido. bueno, me cuida desde que nací y desde que falleció mi abuelo.

—Mi niña pensé que habías salido. No te he visto desde hace días —Me dijo de una manera regañandome, mientras pasaba a mi casa.

Solo sonreí y cerré la puerta detrás mío. —bueno es que he estado ocupada co..

—Buscar el reloj que retrocede el tiempo. Si ya me lo has dicho muchas veces —Interrumpió mientras dejaba aquella caja sobre la mesa de la sala. Me acerqué lentamente. Me sentía dolida por sus palabras, ella sabía que era importante para mí ese reloj.

—Pero, tu sabes que con eso puedo regresar a mi abuelo a la vida —tartamudee. Suspiró, Mirándome de reojo. —Neoma, querida eso solo era un cuento de tu abuelo, que te contaba para dormir.

Me encogí de hombros. —Claro que no lo es —murmure

Ella solo se sentó en el sillón dándome una seña para que me sentara a su lado. —Claro que lo es. Todos sabes que tú Abuelo era muy fantasioso con sus cuentos —Dijo teniéndome paciencia.

Me recosté en su regazo, sintiendo como su mano pasaba por mi pelo, acariciándolo. Me mantuve en silencio. Pensado una respuesta para darle.

No es justo. Ella siempre ha sido como una madre para mí. Y no me cree.

—Tal vez creas que no es justo lo que te digo. Pero. Es verdad. Tu abuelo cuando era niño fantaseaba demasiado con eso.

Me medio levanté al escuchar sus palabras.

—Nunca se callaba, siempre decía: "hay un reloj del tiempo Margaret, lo he visto" —dijo con una risa. Su risa era tan cálida y hermosa, que podría hacer que me distrajera de lo que hacía.

—¡Entonces eso significa que si existe un reloj del tiempo

Suspiró. —Eso no existe neoma. —respondió.

Me levanté de un brinco del sillón. —Claro que si. Tu lo acabas de decir.

Ella solo suspiró mientras me miraba dar vueltas por la habitación, mientras creaba respuesta hacia mis dudas. No me di cuenta cuánto tiempo llevaba creando supuestas soluciones a mis dudas y cómo podría encontrar ese reloj.

Hasta que escuche que la puerta se abrió. Mi piel paralice y me mantuve en silencio sin querer voltear hacia atrás. —Solo deja que el tiempo te lo diga neoma —dijo para luego salir de la casa cerrando la puerta lentamente.

Me quede consumida por el silencio que invadía mi hogar. Esto, así era como se sentía la soledad. Un silencio. Ya no era de escuchar a mi abuelo hablar mientras yo me encontraba sentada en aquella silla. sola, sin nadie que me mirara hacer mis cosas.

—Tal vez tenga razón...

Extraño a ese viejito, y ni siquiera lo conozco😭 Que tal si le regreso el abuelo a neoma en el siguiente capitulo para que sea feliz y no llore y yo tampoco llore y para que se acabe esta historia ya

Extraño a ese viejito, y ni siquiera lo conozco😭 Que tal si le regreso el abuelo a neoma en el siguiente capitulo para que sea feliz y no llore y yo tampoco llore y para que se acabe esta historia ya.

Perdon por el capítulo corto. Es que los hago mientras estoy en la escuela.

 



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En el texto hay: aventura, magia, viajeros del tiempo

Editado: 23.06.2024

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