一¿Hijo? 一respondió uno de los caballos que nos observaba.
Los cuatro caballos que nos observaban se nos acercaron galopando mientras el resto de la manada nos observaba en la distancia.
一¿Alana podrías bajarte? 一pregunta.
一Claro 一respondo bajando de un salto.
Los caballos se detuvieron al verme bajar, Shaiming me miró pidiendo permiso, le sonreí y le susurre “Puedes ir”, se encabrita y sale galopando a recibir a los caballos que permanecen detenidos a unos cuantos metros de nosotros, observó como los caballos son envueltos por luces de color violeta, rosa claro, azul celeste y verde, cuando estas luces desaparecen dejan ver a una mujer joven de cabello rubio, de unos treinta y cuatro años, dos chicos adolescentes de cabello negro y castaño, de unos dieciocho-diecinueve años y una niña de cabello marrón poco menos de 6 años. Me sorprendí al ver como reciben a Shaiming todavía transformado en caballo, pensé que lo iban a lastimar así que me acerqué más para poder ver mejor la escena, pero cuando vi que mi amigo también se transformaba en humano me tranquilice. Los tres niños se abalanzaron sobre este tirándolo al suelo, pude notar que se echaban de menos así que decidí mantenerme lejos para no interrumpirlos.
一¿Quién eres? 一dice una voz masculina detrás de mí.
一Soy…soy 一trato de darme la vuelta para verle la cara, pero el dueño de la voz se acerca a mí y me sujeta los brazos para que no pueda moverme.
一Hueles a la princesa desaparecida
一¿Qué princesa de qué hablas? 一respondo seria e incómoda, ya que este sujeto no hacía más que oler mi cuello.
一¡Espera! ¿Sujin? 一dice la voz soltándome.
Me doy la vuelta encontrándome con mi mejor amigo Neron.¿Qué hacía aquí mi mejor amigo?
一¿Neron? 一sorprendida me acerco a él para quitarle algunas mechas naranjas de la cara.
一¡Eh! ¡Hola! 一responde nervioso rascándose la sien.
一¿Cómo que hola? ¿Tú sabías de este lugar? 一grito llamando la atención de Shaiming y de la mujer que estaba con él.
一Sujin es una larga historia, ven conmigo a la aldea y te lo explico porque también hay alguien que te debe una explicación 一nervioso extiende la mano para que lo acompañe.
Dude si sujetar la mano de mi amigo, no sabia que hacia aquí, no llevaba ni un día en este lugar y todavía no asimilo lo de ser princesa y que mi primo es mi hermano como para descubrir más secretos.
一¿Cómo puedes demostrarme que eres Neron? 一pregunte seria y fría.
一¡Sujin te juro que soy yo!, necesito que me creas no te lo puedo demostrar aquí ya que esta es mi forma humana 一desesperado responde Neron.
一El Neron que yo conozco no tiene orejas de perro, ni mechas naranjas, ni melena… 一conteste enojada.
一¿Qué pasa Alana? ¿Te está molestando?一pregunta Shaiming regresando junto a mi.
一¡Shaiming jefe regresaste! 一emocionado Neron empieza a saltar alrededor de Shaiming.
一¡Kenzo pesado! ¡No ves que estoy aquí! 一Shaiming empieza a empujar a mi mejor amigo que se transforma en un enorme lobo gris.
一¿Kenzo? 一pregunto.
一Si, este es mi nombre aquí, pero si quieres puedes seguir llamándome Neron ya que es mi segundo nombre 一mi amigo emocionado se acerca a mi moviendo la cola de lado a lado.
Miro a Shaiming que me daba la espalda, miraba triste la lejanía donde hasta hace unos minutos estaba una manada gigante de caballos. Me acerqué a él mirando al mismo sitio, no dije nada.
一Es mi familia
一¿Por qué no vas con ellos? 一lo mire curiosa.
一No puedo 一responde serio y con tristeza.
一¿Por? 一pregunto curiosa.
一Porque hace diecinueve años hice un juramento y debo cumplirlo…一sus ojos se llenaron de lágrimas 一...los reyes murieron por esa maldita promesa.
一Shaiming no voy a obligarte que me cuentes lo que pasó en aquel entonces, solo quiero descubrir cuál es la misión que me dijo Kieran que tenía que hacer para regresar a donde vivo actualmente 一cierro los ojos, ya que no quería pensar que era una trampa para atraerme aquí.
Shaiming y Neron se miraron entre ellos, no preguntó ya que sabía que había caído en una trampa, pero no quería creerlo. Estuvimos un rato más mirando la lejanía, hasta que empezó el atardecer, nos acercamos andando a la aldea acompañados por Neron. Llegamos a una lujosa casa nada comparada con el resto de casitas que había por la aldea, esta casa era una mansión gigantesca.
一Esta es mi casa 一murmura Shaiming.
一¡Qué! 一grito, llamando la atención de los vecinos, Shaiming de la vergüenza se puso colorado.
一¡Callate! No debemos llamar la atención 一susurra Shaiming abanicándose con su mano.
Entramos rápido en la casa, ya que los vecinos empezaron a llamar a Shaiming. La casa es mucho más pequeña por dentro.