Capitulo 22

Dastian

Desde que se fue la bruja, estoy dándole la pésima a Sam, solo la puedo despertar yo, nadie más. Mañana ya empieza la escuela y no logro despertarla del todo, no camina bien, así la estoy llevando al baño yo y solo es para que se dé una ducha fría.

Ya es de madrugada y yo estoy a su lado, no puedo dormir sabiendo cómo esta ella por mi culpa. Toco su mano y veo las cicatrices en ellas, Elion intento varias veces lamer sus heridas para que cicatricé pero no funciona. Supuestamente, dicho por mi madre, solo puede mi bestia curarla, yo no lo creo. En primer lugar él fue quien le hizo esto, no puedo dejar que vuelva y la acabe.

-Lo intento Sam, pero no puedo- la acaricio – solo quiero que vuelvas a ser la de antes. Llena mi casa con tu timidez y miedo, porque no quiero más este silencio de ti-

Ella sigue durmiendo como si nada pasara, mientras yo estoy volviéndome loco por verla otra vez. Miro la hora y ya son las tres de la madrugada, tengo que darle la poción, la despierto y ella solo puede mover su cabeza, toma la poción y me mira – Dastian…- dice apenas su voz audible- me siento mareada y siento ganas de vomitar- toce – no quiero manchar tu cama…-

-Tranquila Sam, no pasa nada, tu solo has lo que tengas que hacer y yo me encargo de lo demás – me preocupa los nuevos síntomas de Sam, está empeorando cada vez mas, lo que me dio esa bruja no sirve de nada

-Recuerda lo que dijo su madre, hay que ser paciente- dice Elion

-Tienes razón, debo esforzarme más –

En eso suena mi puerta, alguien golpea. No me preocupa que Sam se desperté, así que me tomo mi tiempo para atender, abro la puerta y es Armando – hola primo, perdón por molestar a estas horas, pero quería saber cómo te encuentras – lo dejo pasar y nos sentamos en la parte de los sillones

-No aguanto más, ya intente de todo.-

-¿Qué hay con lo que te dio la bruja?-

-No hay resultados, está empeorando –

-Ten paciencia, dijo que estaría mejor para mañana, seguro que para el mediodía mejorara –

-Eso espero, tengo que pedirte un favor- él mueve su cabeza- mañana tengo que ir a la oficina del trabajo, no voy a estar. ¿Puedes tu cuidarla por mí?-

-Claro, para lo que quieras estoy – le pongo mi maño en su hombro y le agradezco, y él se marcha

No quiero dejar a Sam sola, no me voy a arriesgar a que algo le pase. Vuelvo a la cama y descanso un poco con ella a mi lado

…

Antes de irme le di el antídoto, para mí se veía igual, así que me fui furioso y desesperado. Ahora me encuentro en la junta con todos los hombres que van a trabajar en el proyecto, todos hablan y contentos porque vamos hacer lo que Sam me propuso esa noche, voy a construir un hospital, comedor y un alberge. A todos le gustó la idea ya que deberás esta cuidad lo necesitaba, a mi lado esta Ricardo y nota que no estoy concentrado en nada de lo que se habla.

-Señor Alwars, podríamos hacer un evento de baile como para festejar lo que propuso. ¿Qué le parece? Para celebrar todo lo que se ara, los ciudadanos están muy contentos, porque además se contratara gente para trabajar en todo lo que propuso y eso ayuda aún más.- lo miro y no escuche nada de lo que dijo, no apreste atención en nada

-Si, como ustedes quieran, por mi está bien- me pongo en pie- yo lo apruebo, mientras sea para una buena causa- me marcho hacia la puerta- solo mantengan a tanto a Ricardo, él me avisara de todo lo que se ara y… bueno que tengan un buen día- me voy a mi oficina

-Señor Alwars, el arquitecto llamo dijo que en unos minutos estará aquí- mi secretaria me avisa mientras caminamos a mi oficina

-De acuerdo, gracias por todo. - Ella vuelve a su lugar y yo me encierro en mi despacho

Me siento en un sillón que tengo cerca de la puerta, me paso la mano por la puerta mientras suspiro con dificultad, no tarda mucho en aparecer Ricardo. Pasa y me ve derrumbado en el sofá y camina hacia él estate de las bebidas, prepara dos vasos con vodka y me da uno.

-Veo que no hay buenas noticias-

-No, ya estoy perdiendo la cabeza, ya no sé qué intentar y para colmo el antídoto no funciona. Esa mujer me engaño.- tomo el vaso

-Tranquilo, no creo que ella mentido con el antídoto, debes ser paciente y esperar como ella te dijo-

-Tenías razón, soy un idiota. Debí tomarla como mi reina apenas la vi, nada de esto estaría sucediendo si no hubiera sido muy testarudo.- dejo el vaso en la mesa de vidrio

-No es tu culpa Dastian, solo hiciste lo que pensaste correcto. Además la respétate dándole su espacio, no sabemos si te hubiera aceptado al saber lo que eras. No podías arriesgarte a que se marchara de tu lado si no sabía de ti. –

-Sea como sea, tengo que pensar en la manera de curarla, si el antídoto funciona y se mejora eso significaría que lo que dijo la bruja es verdad y que solo estaría bien por un tiempo. Yo debo encontrar la manera de sanarla por completo. Eso me frustra demasiado-

-Ya encontraremos la manera de que se sane, pero lo primero es que recupere las fuerzas. – Pone su mano en mi hombro –no estás solo, todos te apoyamos- yo lo miro y le agradezco