Capotulo 7

He hablado un poco de la ansiedad, la tristeza, el estrés y algo más pero en este punto de todas las cosas hay algo que quiero dejarte como obsequio:

Si te fijas bien cada una de estas emociones cuando estamos viviendo demasiado en el pasado o en el futuro, viajamos constantemente y damos vueltas y vueltas. Cuando estas creando cosas maravillosas en tu vida el futuro se ve brillante y si estas feliz recuerdas cosas que en algún punto te hicieron sentir en el cielo, el problema llega cuando eso se vuelve una obsesión y estamos todo el día allí conectados a lo que aún no llega y a lo que ya fue, para esto existe una técnica milenaria que puede servirte para retomar el camino, va de esta manera:

-En la comodidad de tu hogar, pon algo suave para relajarte, puede ser una melodía de piano, un saxofón o algo que de verdad tenga un ritmo suave, colócate en una posición que te haga sentir muy cómodo o cómoda, inclina un poco tu quijada hacia arriba y luego comienza a inhalar, luego a exhalar mientras piensas:

-Inhalo el futuro, Exhalo el pasado.

Entre cada inhalación y exhalación habrá un punto medio, una pausa. Cuando la sientas, justo allí termina por pensar respiro en el presente. Repite esto una y otra vez, hazlo con entrega, paciencia y poco a poco ese exceso de futuro y pasado se irán, dejándote liviano. Listo para disfrutar del presente.

Nadie hoy en día valora su respiración, nadie se toma el tiempo de respirar, no saben que están perdiéndose de una gran oportunidad para liberarse, para ser felices.

Todo lo que necesitas en este momento es oxígeno, si te falta el oxígeno justo ahora morirás casi en segundos, será una muerte extremadamente dolorosa y desesperante, ahora bien fíjate en esto:

-No te falta ese preciado oxígeno, allí se encuentra para ti. Que bello regalo. Aquí esta.

Tu cuerpo sigue funcionando, tus pulmones siguen recibiendo y enviando, tu maquinaria no está fallando para nada, solo piensa en la cantidad de personas que desean tu oportunidad, en este momento seguro alguien se arrepiente en algún hospital porque no tuvo más tiempo, porque ha llegado su hora, se lamenta pero tiene que partir.

Tú aun tienes cosas que hacer, tienes oportunidad de iluminarte, de gozar la vida al máximo.

Algún día la tierra ya no tendrá nada que ofrecernos, morirá…

Yo espero que sea de manera natural y no que nosotros seamos los causantes, pero si así termina siendo pido perdón por todos los que te han maltratado, te reverencio. Creo que todos deberíamos hacerlo, solo la tierra se toma el trabajo de ayudarnos de la forma en la que lo hace. Toda la naturaleza se basa en un servicio.

Solo vean a las abejas, si ellas desaparecen al plazo de algunas semanas nosotros también lo haremos, nos creemos independientes con toda nuestra tecnología pero la verdad detrás de toda esa superioridad existe una gran dependencia hacia lo más importante la madre naturaleza.

Sin ella no somos nada, no podríamos existir. Cuidémosla que ella lo hace con nosotros.

Hay algo que quiero revelarte que de seguro no habías escuchado antes o simplemente no le habías prestado atención pero llego el momento de que lo hagas. Muchas veces seguro has estado triste y al comprar algo que te encantaba te sentías feliz, también está el caso de que cuando necesitabas apoyo llamabas a un gran amigo y este sin pensarlo aparecía para ayudarte y pensabas:

-Que feliz me siento porque mi amigo me apoyo.

La verdad es que la felicidad no está en las cosas que hacemos, está en nosotros, en nuestro interior. Las cosas que hacemos solo son una especie de puente pero al final todo empieza y termina en el interior, volver esto parte de ti te ayudara a evitar depender de lo que pase afuera, cuando construyes un circulo de felicidad que solo proviene del interior todo lo demás que provenga de afuera solo es un adicional porque ya tu estas completo o completa.

También te permite sentirte más cautivado, sales al mundo cada día no buscando de ser feliz a través de las cosas si no que quieres compartir tu felicidad a través de las cosas que haces, volviéndose así una retroalimentación sana a nivel interior. Cuando te topas con alguien te enfocas en ese ser con una entrega total, porque te sientes lleno para entregar, no estás buscando recibir.

-Una vez estaba con mi maestro y yo me encontraba llorando porque por primera vez en mi vida había conocido el desamor, el no ser correspondido y le dije:

-Maestro no es justo. ¿Yo quiero que me amen como yo amo?

Mi maestro estuvo en silencio, respiro y me pregunto:

-¿De qué manera te amas tu para que otros te amen?

La pregunta me dejo en shock, nunca había pensado en de qué manera me amaba a mí mismo, allí fue cuando entendí que en realidad quería amar a la otra persona pero no me amaba a mí, ni siquiera conocía cual era la forma en que me amaba, ante mi yo era un completo extraño. Allí fue cuando comenzó mi camino para comenzar a auto conocerme, a entenderme. Paso a paso fui llenando el vaso que estaba vacío, comenzó a ver lo hermoso en mí. Con el tiempo a quien tanto desee amar volvió para decirme de que se había dado cuenta de que estaba en un error pero yo le dije:

-No fue un error, lo que hiciste fue maravilloso porque tuve la oportunidad de descubrirme, quien necesitaba amarse era yo.