P.O.V MARCUS
-Me encontraba afuera de la habitación, pensando en cómo se lo diría a Danielle, ya tenía todo arreglado, Martín estaba dispuesto a lo que sea por mi hijo, solo me faltaba una cosa, juntar el valor necesario para decírselo a Danielle, pasaron unos cuantos minutos en los que caminaba en círculos pensando la mejor manera de decírselo finalmente me arme de valor y entre aunque seguía nervioso y bastante tenso decidí entrar.
Intentaba controlar mi respiración un poco finalmente accedí a la habitación tomando valor de donde no tenía, Martín tenía razón no se trata de flaquear, se trata de ser firmes en nuestras decisiones.
Hola amor ya he venido le doy una vista rápida, aún en su rostro se nota el cansancio por el parto y todo lo que ha transcurrido durante este tiempo
-Marcus amor ¿Dónde estabas? Te extrañe suspiro, estuve esperándote un largo rato hasta que me aburrí hago un puchero y sonrío
-Este…
Fui al parque a caminar y a pensar me encontré con un viejo amigo y fui a beber algo y hablar sobre todo lo pasado y acontecido en estos últimos años...
Ya sabes para ponernos al corriente el uno y el otro
-Me parece muy bien pero bueno en fin, analizaba cada movimiento que hacía, -Pensaba que él nunca era bueno mintiendo algo ocultaba y lo tenía que descubrir muy pronto, más debía ser cautelosa y decidí no mencionarlo, le daría el espacio para que me lo diga el mismo-...
¿Te encuentras bien? ¿Qué tienes? Estas algo ansioso y nervioso frunzo el ceño y lo miro fijamente siguiendo sus movimientos que delataban perfectamente su estado de nerviosismo y que tenía algo que decirme pero por la manera que se encontraba no me iba a gustar nada
-Mira Danielle yo...
Frotaba mi nuca buscando calmarme pero era en vano, bueno amm como empezar a explicarlo.
-Pues por el principio no crees -Cruzo mis brazos y lo miró con dudas y a la vez un poco de temor por lo que valla a mencionar- Siempre que se pone así es algo que no me agrada en lo mínimo, y seguramente no es una buena noticia.
-Bien no tengo de otra sólo hablar suelto un gran suspiro la miro de reojo y me siento
Esperando así aliviar un poco mis nervios, sintiendo que muy pronto me desplomare a penas y lograba mantenerme en pie
-De acuerdo te escucho, lo sigo con mi vista hasta que toma asiento y mira el techo de la habitación buscando así algún tipo de respuesta hasta que se da por vencido y centra su vista en mí
-Lo que hable con mi amigo sobre lo que estábamos pasando tú y yo...
La cuestión del bebé y todo eso y él me comento algo demasiado triste y a la vez doloroso y pensé que tal vez bueno él...
-Él que -Sueno cortante y fría-
-Él podría quedarse con uno de nuestros bebés podemos estar cerca de él y no pasará nada malo, ya que somos mejores amigos y es una persona de mi entera confianza bueno él nos dejara verlo de vez en cuando y nos ayudara económicamente a cambio del bebe agarro mi nuca él…
Él podría darle una vida buena, una vida mucho mejor de la que podríamos darle tú y yo juntos él puede darle todo lo que el necesita para su crecimiento tanto personal como económico, su educación puede ser de las mejores solo piénsalo
-¿Estás loco acaso? Me siento muy molesta, como dices estupideces así tan tranquilo sin pensar es nuestro hijo.
Marcus yo no lo pienso dejarlo así como si nada es NU-ES-TRO HI-JO le recalco con mi voz alta y demostrándole toda mi inconformidad con la noticia Marcus él es sangre de tu sangre, lleva en cada célula de su piel tu A.D.N.
No puedes venderlo así como si fuese un simple juguete, es una criatura inocente, él no tiene la culpa de nada, Mar…
-Ya Danielle ¡Para! -Me pongo de pie bastante molesto- Yo sé que no es algo fácil, pero no hay alternativa piénsalo, quien más de confianza que él, tú y yo estaremos cerca del bebé siempre lo podrás ver cuando quieras, además de ello a cambio del niño nos pagará una buena suma de dinero –Digo en tono más bajo- Es una buena salida, te sacaría de este hospital mañana mismo a cambio de ese dinero, puedo sacar a esta familia adelante.
Con eso podemos realizarnos como personas, mejorar nuestro estatus social, piensa en nuestro otro hijo, podemos darle una vida más cómoda y no una tan llena de baches, de miserias por que es en lo que vivimos, no tenemos ni para comprar un pan y estas aquí en una clínica tan cara, un seguro que nos vimos obligados a robar te tiene aquí porque la realidad de las cosas es que no teníamos ni para un simple hospital, peor para más, estaba al borde de la histeria y no podía parar de decir tantas estupideces, sabiendo que toda la culpa era mía, siempre fue mía desde el principio
-Escuchar a Marcus hablar de esas cosas así como si nada me molesto aún más pero el tema de la suma de dinero no me pareció tan malo -Me relaje un poco-, Lo mire y solo hable aún no tan convencida, no lo sé tal vez pueda considerar el tema pero antes que nada quiero saber cómo es eso de que pagará por el bebé habla Marcus Alberto Henderson Pena, quiero saber toda la historia sin peros o escusas y luego te daré mi opinión personal.
Editado: 16.06.2021