El Secreto De Una Canción

21| Encontrarme antes de buscarme.

Jamás esperé que esas palabras salieran de la boca de Kayla.

— Okey....

— ¿Eso es lo único que dirás? — Alex me mira sin entender mi reacción

De todo con lo que pudieron salir jamás pensé que sería con eso, es extraño saberlo porque se supone que nunca debes salir con el ex de una amiga y yo lo hice, antes de que fuéramos amigas pero lo hice.

En mi mente pasan mil teorías de cuando, como y que habrá pasado para que los chicos lo odien tanto y ella luzca así de mal.

Con sinceridad, estoy en shock.

— Estoy impactada, confundida y curiosa por las reacciones que tuvieron todos ustedes al escuchar el nombre del idiota más grande que he conocido así que, sí, eso lo único que pude decir.

Kath parece que va a hablar pero Harry sacude su cabeza en negación y ella resopla frustrada por no poder decir lo que piensa

— Creo que mejor dejamos este tema para otro día, por respeto a este lugar y a la fecha del día de hoy.

Las palabras de Ryan las agradezco demasiado, no es el día ni el momento y al parecer los demás están de acuerdo, nos ponemos de pie y caminamos a la salida.

Al llegar, le escribo a mi primo para que venga por mí

Para: Mickey Mike🤓✨

¿Puedes venir por mí?

Estoy ahí en media hora
porque Emma y Lily no me
dejan en paz 🙄

Te espero jsjs 😅😅

😒

Guardo mi celular en mi mochila y miro a Kevin

— ¿Estás bien?

Él revuelve su cabello y por su suspiro se escucha como si estuviera pensando las cosas demasiado.

Me gustaría saber que pasa por su mente ahora.

Estoy sentada en un muro de piedras que hace el camino a la entrada del lugar y él está de pie entre mis piernas, me abraza y su cabeza está en mi pecho mientras yo lo abrazo por los hombros.

— Estoy luchando con las ganas de ir a golpear a ese intento de ser humano.

Los chicos están en el auto de Lukas esperando por él y se que nos están viendo pero no me importa ahora, tarareo de forma suave una melodía cualquiera y como no me gusta verlo así, empiezo a pasar mi mano por su cabello de forma lenta, haciendo que se relaje y la tensión en su cuerpo se vaya poco a poco.

— ¿Cómo lo haces? — Me pregunta con voz perezosa — Estoy a minutos de caer rendido y solo tuviste que acariciar mi cabello.

Me es inevitable reír — Eres como un cachorrito cuando quiere atención, solo debo mimarte un poco y listo.

Él gruñe y eso solo me hace reír más

— No es gracioso y no soy un perro.

— Si es gracioso y tienes razón, no eres un perro. — Digo mientras pongo mis manos a cada lado de su rostro y empiezo a hablar con voz aguda mientras lo acaricio — Eres un chico lindo y grande ¿Verdad que sí? Si, tú lo eres, eres un chico lindo Kevinboo.

Kevin se sale de mi agarre y me empuja haciendo que casi me caiga pero rápidamente me atrae de nuevo hacia él sosteniendo mis manos.

— ¡Santa virgen de los susto! ¡Kevin!

— Ahora ya no es tan divertido ¿O sí? — me dice riendose, lo golpeo — Sabes que fué graciosa tu reacción

Suelto un bufido y él me sonríe, me da esa sonrisa.

>> Creo conocer la forma de que sonrías de nuevo para mí.

Oh no, conozco esa mirada en sus ojos

Tiene una mirada retadora y juguetona, a eso súmale la sonrisa y se que corro el riesgo de perder en este juego

Él se acerca, de forma lenta y yo me mantengo rígida, cuando nuestros alientos se están por mezclar se detiene. Son solo tres centímetros, tres malditos centímetros y el muy idiota se queda ahí para provocarme, empuño mis manos reprimiendo las ganas de golpearlo y me mantengo mirándolo a los ojos fijamente, aceptando su desafío ni dicho en voz alta pero que ambos entendemos.

Quien aparte los ojos primero pierde.

No es fácil, no cuando Kevin Sanders en una tentación andate que provoca sentimientos en mí que nadie a logrado. Esos hombros un poco anchos y sus brazos apoyados a mis costados me hacen sentir más cálida que el abrigo que llevo puesto, su cuerpo atlético gracias al baile y al ejercicio, ni hablemos de sus ojos azules que son un jodido sueño o sus labios...

¡Malditos fueran sus estúpidos genes por hacerlo tan guapo y sexy!

¡Maldita sea su actitud arrogante al saber cómo ponerme nerviosa!

¡Maldito él por gustarme tanto, joder!

Me concentro y trato de pensar en otra cosa y como si los ángeles hubieran escuchado mis suplicas para no caer ante semejante tentación, escucho la moto de mi primo llegar pero el sonido hace que sea yo quien aparte la mirada primero por lo que su sonrisa se ensancha.

— ¡Gané!

— ¡No es justo!

Lo miré molesta pero antes de que pudiera quejarme, él dejó un pequeño beso rápido sobre mis labios y me bajó del muro en un mismo movimiento

— Claro que fué justo — dijo él muy arrogante, se acercó a mi oído y susurró — Mi premio lo cobraré otro día cuando solo seamos tu y yo Princesa.

Sonó de una forma tan sugerente que tuve que respirar hondo antes de alejarlo con un empujón e irme directo hacia de Mike con las mejillas tan rojas como dos cerezas

— ¡Nos vemos el lunes Rivers!

No me giro y solo le grito un:

— ¡Jódete Sanders!

Su risa se escucha y no le di tiempo de preguntar a Mike, le quito el casco de las manos poniéndolo en mi cabeza, me coloco la funda de mi guitarra como mochila hacia atrás y me subo a la parte de atrás de la moto

— Entonces...

— Tú solo conduce. — mi gruñido habló por sí mismo

Maldito Kevin Sanders

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Domingo 17 de Noviembre

Estos días para mí han sido de mucha ayuda.

Fue como un golpe cuando me di cuenta de varias cosas que he estado haciendo y que, en mi opinión, no son buenas.




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