El secreto del Alfa

Capítulo XXVI: Hasta pronto

Celestia había cometido muchos errores a lo largo de su existencia, para algunos este sería un error pero ella sabe que lo que hizo fue por un bien común, el fin justifica los medios dirían en el mundo humano. Si tal vez fuera una de las líderes más crueles como decían sus detractores allá afuera pero con el pesar de muchos Drimelux era la primera corte con democracia y con más prosperidad de todo WordNess así que sí, sus métodos no eran los mejores, lo reconocía, pero ha hecho lo necesario por su gente e indirectamente hacia las demás cortes.

Aunque claro todo eso no lo veía su pareja, Liam Ross, el primo del Alfa de Cuxem. Sus ojos color musgo la veían como si fuera el peor de los monstruos, tal vez lo era pero pronto todos se darán cuenta de que lo hizo por el bienestar de esa pobre muchacha a la que ese maldito vampiro había involucrado.

–No entiendo porque la Diosa Luna me emparejo con alguien como tú– dijo Liam con repugnancia– detrás de toda esa belleza y opulencia se esconde una criatura cruel y sin escrúpulos que no teme lastimar a los demás con tal de llevar a cabo sus fines.

Liam y Celestia estaban en la habitación de la última, mientras que la líder de Drimelux se encontraba recostaba despreocupadamente, el lobo de encontraba dando vueltas y vueltas por toda la habitación.

–Cariño, los dos estamos dentro del mismo costal–respondió con superioridad Celestia a pesar del nudo en su garganta– o ya te olvidaste como trataste a todos en Cuxem, cariño eres demasiado incongruente.

–yo no he matado a inocentes.

–Querido, tal vez ahora no lo comprendas y a tus ojos sea la peor de las mujeres, pero le hice un favor a esa niña, es joven puede tener más.

–eso no te justifica.

triunfad siempre, no importa cómo, y siempre tendréis razón ¿no es eso lo que dijo Napoleón?

–No entiendo ¿Cómo es que dos personas pueden vivir en el mismo entorno y una sea tan cruel y la otra tan compasiva?

–Creo que la realidad es otra– Celestia cubrió su denudes con una bata de seda verde y se dirigió hacia Liam, el hada pronto posicionó su mano en la mejilla del lobo y lo miro con melancolía–  Aurora aun es un ser inocente que cree cualquier cosa que le diga Vlad y Richard mientras que yo no me dejo manipular por nadie.

<<Gracias a mi esfuerzo estoy aquí y continuaré aquí por mis propios medios. Tal vez tú lo veas de otra manera siempre lo tuviste todo: presencia, prestigio, riqueza y a demás eres hombre te aceptan en todos lados e incluso eres parte del consejo, consejo al cual has volteado en contra de tu primo porque admitámoslo le tienes celos porque tú nunca podrás ser el Alfa. <<

 –No sabía que ahora nos dedicábamos a relucir los trapitos sucios– dijo Liam alejándose de la mujer y comenzando a vestirse– espero que la próxima vez que nos veamos cambies tu mentalidad porque yo no soporto que mi mate sea una tirana.

–como tú dices, somos pareja no puedes estar separado de mi– dijo Celestia observando cómo se alejaba la persona más importante para ella.

–Obsérvame.

 

Aurora

Termino de arreglar mi bolsa con las pocas pertenencias que había traído de Cuxem, me aliviaba el hecho de que ya nos fuéramos, me sentía demasiado tensa en este castillo, sentía desconfianza hasta de mi propia sombra.

– ¿Estas lista?– me pregunto Richard tomándome de la cintura.

–Muy lista– respondí y me abrace a él. Richard ha sido un gran apoyo después de nuestra perdida, porque sé que a él también le dolió pero juntos hemos podido “sobrellevar” la situación. –quiero regresar a casa.

–Yo también, en cuanto lleguemos te atenderá el mejor médico de la manada.

–No quiero más médicos, Richard– dije separándome de él y agarrando mi suéter porque el clima se veía frio allá afuera. –Ya paso lo que tuvo que pasar.

–no quiero que quede ninguna secuela.

–no la habrá o el medico de aquí me lo hubiera dicho.

Al parecer Richard quiso llevar la fiesta en paz, por lo que nos dirigimos a la puerta del castillo, al parecer éramos los últimos ya que todos estaban esperándonos.

El ambiente estaba tenso, Celestia estaba como ida, mientras que Liam le lanzaba miradas asesinas, Rowina se encontraba hablando con Erick aunque en cuanto nos vieron todos se callaron.

–me apena que se vayan de manera tan apresurada– dijo Celestia con pena acercándose a mí– espero que te mejores tanto física como mentalmente, Aurora, sabes que aquí me tienes para lo que necesites.

La rubia me abrazo como si fuéramos amigas de toda la vida, pero mi cuerpo pensaba otra cosa porque me tense de pies a cabeza, algo me decía que no tenía que confiar en esta hada, no sabía porque pero mi sexto sentido me lo indicaba.

–Gracias Celestia, por el apoyo y tu hospitalidad– dije con la mejor sonrisa que me salió en ese momento.

Posteriormente fue el turno de Rowina, que gracias a la Diosa Luna solo me abrazo y me deseo un buen viaje, después fue el turno de Erick quien me abrazo fuertemente, trate de retener las lágrimas pero me fue imposible.




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