- Jared -
Después de terminar de recoger mis cosas me dirijo al estacionamiento de la escuela para regresar a casa, sin embargo el bullicio de los alumnos llamó mi atención y al acercarme un poco más al grupo de jóvenes que estaba en el jardín me percato de que hay dos jóvenes peleando. Cuando logro pasar por el tumulto veo que una de las jóvenes es Tara y la otra...
¡No puede ser! ¿Violeta?...
Violeta se está peleando pero qué rayos les pasa a estas dos.
- ¡¡Violeta... Violeta ya basta, dejen de pelear!! - les grito desesperado pero ninguna parece querer hacerme caso - ¡¡Tara, Violeta, por el amor de dios van a lastimarse!! -
Cuando veo que Tara se posiciona sobre Violeta intentando golpearla no lo soporto más y decido intervenir.
- ¡¡Ya déjala en paz Tara!! - le ordeno cargándola por la cintura para apartarla de ella - ¡¡No te atrevas a volverle a poner un dedo encima!!
- Pero... -
- ¡¡No quiero oír tus excusas, alejate de ella Tara!! - le advierto interrumpiéndola
Cuando regreso mi mirada hacia Violeta la veo de pie, pero no se ve bien y no tanto por los golpes más bien pareciera que otra cosa le está pasando. Me intento acercar hacia ella en el mismo instante que la veo caer de rodillas al suelo, en eso todas mis alarmas se encienden y antes de que deje caer el resto de su cuerpo la atajo con el mío cubriéndola con mis brazos.
- Violeta, por favor Violeta hablame - la llamo en un intento de que hacerla reaccionar
Pero ella apenas si abre los ojos para después volverlos a cerrar.
- Por favor Violeta reacciona, no te duermas Violeta - le insisto pero no responde, está inconsciente
- No puede ser ¿que carajos le hiciste Tara? - escucho a Brisa reclamarle
Ni siquiera había visto que estaba a mi lado.
- Nada, yo no le hice nada - le contesta entre nerviosa y asustada
- ¿Como que nada? No es posible que Violeta se desmaye así sin más, algo tuvo que haberle pasado - le grita
Yo trato de pensar que le pudo haber pasado cuando un extraño zumbido cerca de mi oreja me desconcentra pero veo que solo es una abeja. Esperen un momento…
Abeja, veneno, alergia... ¡Ay no, por favor que no sea eso!
Empiezo a revisar el cuerpo de Violeta con desesperación y veo algunos aguijones clavados en su cuello y sus brazos.
¡¡No No No!!
Cómo es que no lo vi antes. Sin pensarlo la levantó sobre mis brazos y la llevó a mi auto
- Brisa llama a sus padres, diles que unas abejas la picaron y que me encuentren en el hospital - le explicó al verla correr a lado mío
Ella solo asiente y toma su teléfono para empezar a marcar mientras yo acomodó a Violeta en el asiento del copiloto y después de reclinar el asiento y sujetarla con el cinturón me doy la vuelta para empezar a conducir.
Aumento toda la velocidad que puedo, rebasó a todos los autos que tengo frente a mí e incluso me paso algunos altos pero aún así siento que no es suficiente y que voy más lento que una tortuga.
- Resiste mi amor, todo va a estar bien - le susurro tomándola de la mano, sé que no me escucha pero aún así lo hago - ya casi llegamos pequeña solo un poco más no te vayas por favor no quiero perderte mi vida, no lo soportaría -
Sigo hablándole todo el camino como una forma de consuelo aunque creo que lo digo más para mi que para ella. Al llegar al hospital salgo del auto lo más rápido que puedo y la vuelvo a cargar en mis brazos, ni siquiera me preocupo por apagar el auto lo único que me importa en estos momentos es que la atiendan lo más pronto posible, en estos casos cada segundo cuenta.
- Por favor ayudenme - empiezo a hablar en cuanto atravieso las puertas de urgencias
- Es alérgica al veneno de las abejas y algunas la picaron por favor atiendala - le ruego a una doctora que se acerca a mi
Ella le llama al personal para que la recuesten en una camilla mientras empiezan a revisarla.
- Reacción anafiláctica aguda por alergeno, y constricción de las vías respiratorias llevenla a la habitación, preparen el resucitador cardiopulmonar necesito epinefrina, una cánula nasal para el oxígeno, antihistamínicos intravenosos y cortisona y salbutamol como beta agonista - escucho decir a la doctora haciendo que todos se muevan de un lado a otro
Cuando veo que se llevan a Violeta intento ir con ella, pero uno de los enfermeros me detiene y yo me siento impotente, no entendí nada de lo que dijeron pero sé que no era nada bueno y eso me pone peor.
Creo que ya ha pasado como una hora pero para mi parece una eternidad, estoy sentado con los codos en las piernas y las manos enredadas en el cabello. No presto atención a nada de lo que pasa a mi alrededor los recuerdos de la pelea de Violeta y verla caer al suelo con los aguijones clavados en su cuerpo pasan por mi cabeza como si de una película de terror se tratase.
- ¿Señorita, tiene alguna información de Violeta Sandoval? - escucho a un hombre preguntarle a una enfermera sacándome de mis pensamientos
- ¿Ustedes son los padres de Violeta? - les pregunto acercándome a ellos
- Si, usted debe ser su maestro verdad - me dice la mujer que supongo es su mamá - ¿como esta ella? ¿Que paso? -
Les empiezo a explicar lo que pasó y mientras conversamos veo todas las similitudes que tiene Violeta con sus padres. Su madre es castaña de tes morena y ojos de color verde oscuro por otro lado su padre es pelirrojo pero más que Violeta, de ojos azul claro y piel blanca, es claro que Violeta es la combinación perfecta de ellos dos.
Después de una media hora vemos a la doctora que atendió a Violeta acercarse a nosotros.