El sentir de las letras

Mensaje de Luz

Mensaje de Luz 

No recuerdo haber nacido, más se cómo fue, lo que ocurrió para que sucediera. Y por lo que veo a mis alrededores mi trágica e inevitable muerte es… eso mismo, inevitable. El primer recuerdo que tengo de mi vida es uno donde al abrir los ojos veo un montón de puntos brillantes y hermosamente estáticos, que no hacían nada más que estar allí, no me saludaban, ni hablaban y tampoco me dirigían la mirada. Recuerdo encontrarme rodeado de gases y polvo. Pronto logre confortarme, estar tranquilo de que solo no estaba, había otro cuerpo muy cerca en comparación con los demás, era muy grande y brillante, ¡Otro más! Y luego otro aparecieron muchos. En total yo había contado 8 además de uno de visitaba únicamente cada cierto tiempo. Sin duda mi favorito de entre esos cuerpos era uno muy brillante, rocoso y de tamaño mediano. Con montañas y siempre verde y azul. Aunque cuando tenia resfriados era blanca. También una vez que chocaron contra ella ardió cuan volcán, más gano una blanca amiga.  


Me agradaba, era mi mejor amiga, charlábamos siempre, todos los días. Quien imaginaria que sería en uno de esos que con una sola charla cambiaria mi perspectiva de la existencia para siempre.  
Discúlpame -exclamo ella- Pero te tengo malas noticias, Ya no podré hablarte más.  


¿Por qué? -Pregunté un poco asustado- ¿es algo que dije?, ¿te insulté?, o… ¿es acaso que no te caigo bien?  
¡No! No es nada de eso, solo que yo ahora deberé guardar silencio. 


¿Por qué? -Cuestione nuevamente- 
En mi superficie crece algo hermoso, algo que lo cambiara todo, se hacen llamar humanos y… son listos, inteligentes amorosos… un poco descuidados, pero están aprendiendo. Debo guardar silencio para que ellos puedan vivir sus vidas en paz y armonía.  
Así que… ¿me dejaras? 


No, yo siempre estaré aquí, pero el dilema es que ya no podré comunicarme más contigo. No te preocupes aquí es donde me voy a quedar.  


Ella solo dejo de hablar de un momento para otro. Comencé a llorar.  Ya no tenia a nadie mas con quien hablar. Pasaron los días, meses, años, décadas y siglos. Y yo sin escuchar aquella voz que tanto me reconfortaba. Un día escuche de un tipo de luces extrañas que salían en la Tierra, del otro lado de donde yo me encontraba y que nunca lograría ver. Estaba emocionado por ver a que se debían esas luces. Y entonces lo vi, todo ese amor e inteligencia al cual se refería la tierra lo vi reflejado en aquellos seres que se hacían llamar humanos. Me sentí completo una vez más, todavía extrañaba aquella dulce voz, pero, estos seres extraños ayudaban con mi terrible depresión. Y por lo que se ella era feliz. Era un precio aceptable: nunca volver a hablarle a cambio de que ella fuese feliz. ¿Verdad?  


Un día note que ella estaba muy desesperada, haciendo señas, habían pasado siglos desde que o dirigía la mirada a su superficie, con u poco de intriga me atreví a mirar… No se si fue lo mejor o no, si nunca debí hacerlo para mi propia tranquilidad o si debería de haber mirado lo antes posible para hacer algo en contra y para evitar el dolor de mi mejor amiga. Lo que vi fue horrible. Un montón de chimeneas muy grandes, gente tirando basura en las calles, otra quemándola, casando otras formas de vida igual o más hermosas que los propios humanos. Vi como todo el amor del que me hablo mi compañera de platica, se había ido a la mugre, todas las emociones y sentimientos, y algo de valores había cas desaparecido. Si bien su inteligencia aumento, no era suficiente. Mi paciencia se rompió cuando vi un gigantesco árbol de color rojo que sobresalía con gran brillo de su corteza. Fue entonces cuando busque formas de intervenir… pero… ¿Qué podría hacer yo para apoyar?  Mis capacidades de veían limitadas por la distancia y además de que los humanos no entendían mi idioma. Una vez más me sentía impotente, incapaz de hacer cualquier cosa a pesar de mi gigantesco poder. Tenía la capacidad de borrarlos a todos sin dañar mucho a la tierra, mas eso no era lo que ella quería. No podía hacer nada. ¿Solo que quedaba ver a mi amiga morir tan lento como el que recibe porciones de comida cada vez mas pequeñas?, ¿a la persona que tanto me quiso y la única que se atrevió a hablarme?  
¡No! No es la única opción debe de haber una salida a todo este juego macabro. 


¡No! No acepto que sea este el único final existente. 
Luego vino a mi mente una grandiosa idea, había recordado que esas personas manipulaban sus medios de comunicación por medio de luz. A sí que sí. Ese era el plan.  


Tras varios intentos fallidos, esta vez enviare el mensaje con 8 minutos de retraso y a un alumno de 18 años que tiene una clase de astronomía, quizá allí, en esa clase puedan ayudarme, ya trastornado por no hablar con nadie y quien habla conmigo calla y muere, eso no debería ser así. 
 


Dejen de a su hogar destruir, 
A mi amiga la hace sufrir,  
A ella y a mi esta dañado,  
Yo con mi amiga quisiera seguir hablando, 
Si siguen así a ella van a matar, 
Por favor contesten, 
Pues solo quero alguien con quien hablar 
Firma:  

Sol   

 



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En el texto hay: solo historias, solo cuentos

Editado: 20.02.2020

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