Él soy Yo

Mi batichica

Siento aquél espectacular cuerpo bajo el mío, las partes correctas se rozan propocando en mi un jadeo, observo atentó aquélla figura de ojos mieles y cabellos castaños salvajes, quiero besarla pero es más rápida colocándose sobre mi moviendo sus cadejas llevandome al cielo.

Su delicado rostro se acerca al mío mis manos pican y se dedican a recorrer su estructural cuerpo, empiezo por sus hombros su tersa piel está caliente al tacto, bajo por sus brazos hasta su abultado abdomen, frunzo el ceño y la observó, ella me mira sonriente y sin más su lengua me lambetea la cara.

¿Pero qué mierda?

La dejo hace lo que quiera y bajo aún mas mis manos, recorro aquéllas sexis piernas, y voy a su trasero.

Su belludo trasero.

¡Carajo!

Aparto mis manos como si de fuego se tratase y la observó sonriente con la lengua afuera soltando un sonido bestial.

¿Acaso ha ladrado?

De la nada su blancusco rostro se alarga llenandose de bello y una nariz pequeña y negra...

¿mi lujuriosa batichica acaso y es un una mujer lobo?

Esa bola de pelo empieza a babearme la cara con su lengua mientras se frota en mi pierna, ahogo mis gritos mientras oigo unas carcajadas destartaladas de fondo.

 

Mis ojos se abren de golpe y lo primero que veo es a un Richard en cuclillas sujetando su estomago mientras ríe, mi pierna siente empujes constantes y mis ojos captan al culpable: un Golden Retriever me esta violando la pierna.

-¡Quitame a esta bestia de encima!-grito mientras trato de apartar al can.

-Pero si hace unos segundos lo estabas disfrutando...-mi amigo habla o eso intenta la verdad es que no ha parado de reir, maldito.

-Que me quites al perro-gruño.

-Ay que sensible-gira los ojos parando al fin con la locura de su estruendosa risa.

Un bajo silbido llama la atención del perro que obediente lo sigue hacia la salida de mi habitación.

-Tienes 10...-

-¿10 qué?-mi voz sale amortiguada por la almohada.

-10 minutos para salir de la cama o te traigo al perro de nuevo, debes ir a Ilusion travel-y sin mas siento sus pasos cerrando la puerta alejandose por el pasillo, se reirá por siempre de esto.

-Cojines...-hundo mi cara en mi comoda almohada.

_*****_

-Genial.. Te has salido con la tuya-resopla Richard molesto.

-No es para tanto Viejo.

-¿A no?-gruñe-te di 10 minutos Frederic, ¡No dos horas! ¡Es casi la hora del almuerzo pelmazo rubio hueco!!

-¡Ey! No ofendas mi cabello-digo mientras me acomodó el jopo por el retrovisor.

-Quita-chilla golpeandome en el rostro.

-Menudo amigo-suelto por la bajo ganando un zape.

Ilusion Travel. No es más que un simple edificio de solo una planta, con colores pasteles aburridos y un letrero en grande sobre el techo que anuncia tal nombre en color fucsia.

Y su interior no es tan diferente del exterior: simple y aburrido.

La campañilla anuncia mi llegada, una que otra cabeza se levanta, entre aquellas una morena de infarto, una rubia algo extraña y una castaña de lentes, las tres sonrientes y algo sonrojadas, les sonrió la rubia ríe, la castaña se esconde tras su cubículo y la morena solo mira a mi acompañante.

Le pedí a mi queridísimo mejor amigo que no se aparte de mi para llevar este asunto adelanté sin problemas.

-Hola me llamo Katrina, bienvenidos a Ilusion Travel señores ¿en qué puedo ayudarlos?-me dice la rubia enrendando su dedo en uno de sus mechones algo pajosos.

-Soy Frederic Evans y vengo a hablar con el director de...-me detengo sin finalizar la oración echando un ojo al aburrido lugar, fijando mi vista en el entorno pienso en el aspecto del dueño, sin ser tan despectivo, ha de ser horrible-este lugar.

Cuando la pequeña rubia iba a hablar una voz masculina algo dura la sorprende desde el fondo de uno de los pasillos.

-¿Quién la necesita?-pregunta un joven de ojos marrones  elevo una ceja cuando llega hasta a mi tendiéndome una mano la cual acepto con educación, una rígida educación.-Samuel Miller.

-Frederic Evans, usted debe ser el director de...

-No, ella en estos momentos esta ocupada puede hablar lo que requiera conmigo-dice serio interrumpiéndome, okay,  no me agrada.

-Lamento contradecirlo señor Miller, pero por si no ha escuchado, soy Frederic Evans, de Evans&Scheck ¿es acaso esto de su primordial atención?-pregunto mientras le sonrio de lado.

-Muy bien-dice firme-vere que puedo hacer.

Dandose la vuelta se aleja por el mismo pasillo del que habia salido, no es un él, es una ella, sera mucho mas facil.

-Esto sera una ganga-sonrio complacido.

-Ajá...-susurra Rich quien estuvo extrañamente callado desde nuestra llegada.

-¿y a ti qué te pasa?-le pregunto escudriñándolo con la mirada, estaba tenso con la mirada fija en uno de los cubiculos del medio, afilo mi vista alli, aquella sexi morena era a quien observaba atanto.-Follaras.

-Cierra la boca Evans- quiero contradecir pero alguien esta de vuelta.

-Por el pasillo segunda puerta a la derecha-dice sin siquiera mirarme para luego encerrarse en lo que parece su oficina.

sonrio complacido, acomodo mi traje.

-Ando Richard necesito acción-silencio-¿Richard?...-mi vista cae a un costado. no esta, al otro, tampoco, tras de mi... parezco un idiota girando en mi propio eje-Dónde...

Su pequeña cabeza castaña se filtra sobre aquel cubiculo, se revuelve el cabello nervioso,eso no es normal jodido Richard, me dejo solo.

Inspirar, exalar, repite esto como nuestra terapeuta ha dicho y la carga.

Mi fuero interno maldice al cabron de mi mejor amigo, mientras doy pasos largos y según yo seguros me aproximó al pequeña puertita blanca donde anota la palabra DIRECTORA, valgame la redundancia.

Acomodó mi traje de diseñador, y con mi sonrisa matadora golpeo la puerta, un murmullo se oye del otro lado y pasos acercarse.



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En el texto hay: misterio, comedia, doble identidad doble vida

Editado: 18.03.2019

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