Capítulo 4: Antiguo Compañero

El tiempo pasó y ese chico se amaestró más el uso de la espada, practicando todo el tiempo, aprendiendo lo más que podía. Sin embargo, había algo que le molestaba cada vez que se preguntaba qué tanto había mejorado, a pesar de los años que habían transcurrido, aún estaba algo que lo perturbaba… Algo que no lo dejaba sentirse satisfecho consigo mismo.

Era otoño, él limpiaba las hojas de los árboles del patio trasero. Fue entonces cuando oyó un ruido que provenía del otro lado de la casa, en la entrada. En el momento quiso completar su curiosidad yendo a ver, encontró a su padre peleando contra otro hombre adulto, de cabello largo. La pelea concluyó con la victoria de su padre y la espada de su contrincante en el suelo.

—¡Kjhhh! Algún día…

Dejándolos con esas palabras, el hombre huyo.

Ocurría muy a menudo durante aquellos días. Él vendría, desafiaría a su padre y terminaría de la misma manera.

Lo único que sabía es que era un antiguo amigo con el que su papá compartió un gran lazo, pero que un día los dos tuvieron un problema. Aparentemente el hombre no lo podía perdonar por un error que cometió y por eso lo odia, hablando de venganza. Siempre que el chico intentara cuestionarlo sobre el tema, él lo evitaba no dándole forma de hacer más, decidió que lo mejor era no presionarlo sobre ello.