Capítulo 4.

El centro de entrenamiento había estado más lleno de lo habitual toda esa semana y, a pesar de que Alissa era capaz de hacer lo que la mayoría ahí, no podía evitar sorprenderse cada que alguno de los mentores usaba sus poderes.

Sin embargo, ese día sólo se dedicaba a lanzar furiosamente estacas de hielo contra el objetivo frente a ella bajo la atenta mirada de su primo Eithan.

  ─No entiendo por qué estás tan enojada─Alissa lo ignoró y él rodó los ojos─, es sólo mi amiga─hizo una mueca al terminar de decir la frase.

Alissa lo miró y sus ojos se abrieron como platos.

  ─De verdad te gusta─afirmó señalándolo con un dedo─, realmente quieres algo con ella─lanzó otra estaca.

  ─Puede ser, pero no tienes que preocuparte─la mirada de Eithan se clavó en el suelo─, Elena no está muy interesada de todos modos.

Ella frunció el ceño.

Habían pasado un par de días desde la visita al mausoleo de los Roadlight, y ese par de días habían sido suficientes para que Alissa descubriera que el auto que había recogido a Elena en la mansión, era de su primo.

Las piezas comenzaron a encajar en  su mente, el rostro preocupado de Eithan al salvar a Elena de los Awwim no había sido coincidencia, Alissa se había recriminado mentalmente por no haberlo notado en ese momento.

  ─¿Cómo podría no estar interesada?─lo miró de reojo antes de arremeter nuevamente contra el objetivo─, eres un Maintless.

  ─Soy un OHara─la corrigió─, y ella está interesada en otra persona.

  ─Eres un Maintless, el abuelo Calder lo dice─sonrió de lado─, además, no veo cómo podría estar interesada en alguien más teniéndote a ti enfrente.

  ─Bueno...─se pasó una mano por el cabello─, ya sabes que ella y Kyle iban a casarse.

  ─Si, también sé que Kyle no la ama─otra estaca voló, pero esta vez, quedo enterrada en el blanco debido a la fuerza con la que la había lanzado, Alissa se miró las manos y sonrió con suficiencia antes de girarse completamente hacia su primo─, no entiendo porque insiste en eso sabiendo que tiene a alguien como tu que la quiere─Eithan hizo una mueca extraña que hizo que Alissa enarcara una ceja─, porque sabe lo que sientes por ella, ¿cierto?.

  ─Sobre eso...

  ─¿Si?.

  ─No he encontrado el momento adecuado, es sólo...

  ─Espera, espera, espera...─negó con la cabeza confundida─, ¿hace cuánto que te diste cuenta que sientes cosas por ella?.

  ─Cinco o seis...

  ─¿Meses?.

  ─Años...

  ─¿Ibas a dejar que Elena y Kyle se casaran?, ¿de verdad?.

  ─Lo único que quiero es que sea feliz, y ella parecía serlo con él.

  ─Vamos, Eith, ambos sabemos que, incluso sí ellos realmente hubieran llegado a casarse, no hubieran sido del todo felices, ¿por qué Elena insiste en intentar algo con alguien que no siente lo mismo?.

  ─El matrimonio de sus padres fue arreglado, igual que el de sus abuelos, sus bisabuelos... y el de la mayoría de la familia Breastplate─suspiró─, el que Kyle fuera el chico con el que tuviera que casarse fue una especie de alivio para ella, es por eso que se aferra a él.

  ─Pues es hora de que lo deje ir y tu puedes ayudarla─comenzó a crear flamas en la palma de su mano con colores distintos, algo que el abuelo Saintcox le había enseñado, cada color tenía una función diferente, quemar, carbonizar, herir de gravedad sólo por mencionar algunos─, ¿por qué nunca intentaste decirle nada?.

  ─No podía, los nervios no me dejaban hablar─bajó la voz cuando notó que había hablado más fuerte de lo que le hubiera gustado─, Karlene y Samay me ayudaron durante semanas y el día que al fin estaba decidido... Elena y Kyle anunciaron su compromiso.

  ─Debiste decírselo de todas formas, Eith─se acercó a él y le sonrió con tristeza─, eres demasiado bueno, pero siempre pones el bien de los demás antes que el tuyo y eso no está bien─él se encogió de hombros─, eres un gran chico y mereces ser feliz, al igual que ella.

  ─¿Qué?─frunció el ceño─, me estoy perdiendo, ¿no era que la odiabas?.

  ─No la odio sólo... no me agrada, ¿bien?, de todos modos no es como que yo si le agrade─rodó los ojos─, pero jamás le desearía el mal a nadie, sobretodo si ese alguien te importa─su mirada se perdió en la palma de su mano, donde había comenzado a crear flamas nuevamente, pero su ceño se frunció cuando se dio cuenta que la llama había tomado un color violeta bastante peculiar, miró nuevamente hacia el objetivo y la lanzó sólo para averiguar que pasaba.

La llama alcanzó la pared y, con un sonido raro, las cosas que estaban colgadas en ella desaparecieron sin dejar rastro.

Todas las personas que se encontraban en el lugar miraron a Alissa sorprendidos.

  ─¿Cómo hiciste eso?─la voz de Eithan sonaba demasiado temblorosa─, nosotros no... se supone que nuestros poderes...

Un hombre mayor, de complexión robusta, cabello castaño y ojos cafés se acercó a ellos.