La llamada

Y así pasaron dos, tres días... se saludaban, e ignoraban el hecho de que no podían parar de textearse el uno al otro, se preguntaban cosas hasta más que absurdas, pero ya las 9 o 10 de la noche Catrina dormía pensando en cosas que podrían llegar a suceder con su ex Y su hermana, y es que de un día a otro no se le olvidaría todo.

Esa noche entre sueño su celular vibró y se espanto, lo observó su celular vibraba por una llamada entrante lo cuál a ella le parecía extraño, revisó la pantalla del celular aún con su vista borrosa por la manera en que despertó.

Clark el sexy. 
Decía la pantalla de inicio, sonrío como nunca y aceptó la llamada.
-Hola preciosa.
-Hola-Ella se escuchó débil pero su voz sonó muy dulce, las ganas de escucharla toda la noche sobraban.
El sonrío a pesar de que ella no estuviera viéndolo y es que escucharla a él le agradaba.
-¿Estabas durmiendo?.
-Algo así.
-Perdón, te dejo descansar.
-Tranquilo, no creo que me valla a dormir-bostezo.
-Jaja ¿Segura?- se escuchó juguetón .
-Sí-ella río por lo bajo.
Hablaron por casi una hora hasta qué ella lo escuchó respirar agitado.
-¿Qué haces Clark?.
-Nada-susurró pero su voz era lo bastante ronca como para que no fuera nada y ella mal pensó totalmente.
-¿Te estás tocando?-La pregunta fue susurrada como si alguien la fuese a escuchar hablar a altas horas de la madrugada.
-¿Eso crees que hago?.
-Es que-Se avergonzo y trató de hablar pero no puedo.
-Es que, ¿qué?.
-Tu respiración, tu voz.
-¿Te gusta?-Pregunto de manera sexy, acompañado de su ronca voz, lo cual alteró las hormonas de Catrina.
-No pongas la voz así-le pidió de manera agitada, él sólo escucharlo hablar así le ecxitaba bastante como para que su intimidad se humedeciera bastante.
-Juguemos-Una loca idea pasó por la cabeza de él, pero ella no pensó en lo que esa madrugada podría pasar.
-Está bien juguemos-Respondió inocente.
-Te diré muchas cosas, tú sólo trata de imaginarlas.

Y pensó, ¿qué es lo peor que podría pasar?, aceptó y así empezó el juego.