En las buenas y en las malas

De alguna manera lograron sacarlo, llamaron una ambulancia para llevarlo al hospital. Según el médico que lo atendió, ya estaba fuera de peligro además de que no parecía un accidente que haya caído a ese lugar, era probable que se quedara dormido. Mugi no se separó de él después de llevarlo a una habitación. Hideto se quedó afuera junto a Fabián.

— ¿Porque habrá hecho eso?

— No creo que haya sido al propósito — dijo Fabián — podemos considerar que se quedó dormido

Hideto iba a replicar pero una mujer joven se acercó a ellos. Llevaba zapatos de distintos colores y una bolsa que no sabría decir de dónde saco.

— ¿Tía? — Dijo Hideto después de reconocerla — ¿qué haces aquí?

— Vine porque tú padre me dijo que Mugi ingreso al hospital, ¿cómo está ella? ¿Es grave? ¿Fue una recaída?

— Tía, tranquilízate — empezó a decirle — Mugi está bien. Seguramente colgaste antes de que te dijera el mensaje completo.

La obligó a sentarse.

— Es el novio de Mugi, cayó en la bañera y casi se ahoga pero está fuera de peligro. — explicó Hideto al tiempo que su padre se acercaba. — Papá, ¿porque no le explicaste bien a la tía Kai'er?

— Lo siento pero esa manía de solo escuchar la primera oración no se le quita — se disculpó, Kai'er empezó a acomodarse el cabello antes de parecer andrajosa.

—  Jajaja ahora es mi culpa — dijo — esperen, ¿Mugi tiene novio? ¿Desde cuándo?

— ¿Hace tres meses? — Contesto Hideto — ¿es importante?

— Claro que lo es — dijo Kai'er — ¡es mi única hija!

Se abrió la puerta, Mugi asomo su cara de pocos amigos pidiendo algo de silencio y antes de darse cuenta ya está en los brazos de su madre.

— Mi niña — dijo abrazándola — ¿porque ya no me has visitado? Papá te extraña también Ryohei y Azuma.

—  Kai'er déjala antes de que la asfixies — pidió el médico.

Mirándolos Fabián no sabía que decir, era extraño.

— ¿Te sorprendes que sea así? — pregunto Hideto al ver su cara

— Mucho, simplemente es raro.

— Un poco, mi padre es el director del hospital se llama Akio Akimoto, está mujer es Akimoto Kai'er mi tía (hermana de mi mamá) ya conoces a Mugi y su padre se llama Yamabuki Ukyo.

— Ya veo no creí ser capaz de ver tal escena. — dijo. — ¿Mugi no estaba alejada de sus padres?

Mugi escucho y giro la cabeza.

— No lo estoy. Hay una historia detrás pero no diré nada.

Fabián no insistió así que se quedó junto a Hideto. De los familiares de Kenji, solo avisaron que su madre iría lo más pronto posible ya que estaba fuera del país pero su padre o hermanos no mencionaron nada. Según el médico pronto recobraría la conciencia pero Kenji seguía dormido.

— Dime Kai'er, ¿cómo está Ukyo?

— Bien, recuerda que no soy bienvenida en esa casa.

— Lo sé pero exageran. Eres la madre de sus hijos además...

— No digas nada — le dijo. Después empezaron a platicar sobre los conciertos que ella ofrecía de manera gratuita en escenarios poco conocidos.

La familia Akimoto dirigía un restaurante que quedó en manos de la hija mayor Akiko la madre de Hideto, ella tiene una hermana menor Kai'er y un hermano adoptivo de nombre Akio, quien en el futuro se convertirá en su esposo. Su relación era bastante simple. Los señores Akimoto adoptaron a Akio a edad temprana antes de tener a sus propias hijas pero años más tarde, un familiar biológico de Akio le pidió que regresara a la familia. Solo accedió si podía mantener el apellido y de alguna manera se hizo del control del hospital.

Akiko Akimoto, la hija mayor, tenía su propio orgullo así que tomo el restaurante para sí y con eso mantuvo a Hideto pues sabía que los familiares de Akio nunca lo reconocerían como su descendiente. Además ese restaurante fue el que ayudo a Kai'er con sus estudios en música.

Mientras sucedía eso, Kai'er comenzó una relación con un talentoso pianista de nombre Yamabuki Ukyo; su familia decidió que Kai'er no era suficiente para él así que no permitió ninguna unión legal pero eso no los detuvo pues procrearon tres hijos y vivían juntos. Ukyo siempre deseo que Kai'er fuera bienvenida pero no se había dado la oportunidad y probablemente no pasaría.

Ahora bien, cuando Mugi tuvo ese incidente, ella estaba en su casa escondida. Cuando sus padres llegaron, lo primero que vieron fue un joven hombre que se cubría y recitaba " yo no la mate", asustado Ukyo fue a buscarla hasta que encontró un rastro de sangre. Llamaron a la ambulancia y a la policía para llevarse a Eric por agresiones e intento de asesinato. Ellos estaban poniendo su denuncia cuando les dijeron que no podían procesar nada.

Fueron los abuelos quienes no querían levantar cargos pero la versión oficial se distorsiono. De cualquier manera Eric paso casi dos años tras las rejas por agresión, en su memoria Mugi creyó que eran sus padres quienes le habían dicho que sucedió pero fueron los abuelos quienes decidieron actuar. Estaban confiados de que sería lo mejor.