El Ultimo Día Contigo

Capítulo 15

La tranquilidad era tan extraña, extraña cuando hacia mis informes e investigaciones tan pasivas y tranquilas que estaba tan feliz porque así tenía tiempo y estaba feliz tal vez ya me estaba acostumbrando a la forma de trabajar

Cuando estaba saltando de un cuadrado a otro en las veredas de la universidad sentí una llamada detrás mío haciendo que estuviese confundida y paralizada

Voltee mi mirada y la vi de nuevo era tan extraño verla, jadeando con una mano sobre su rodilla y la otra viéndome como si hubiese visto algo bueno y extraño

Ella camino hacia mi sonriendo tan grandemente que me estremecí porque sentí que aquello era malo y saben mis premoniciones siempre han sido buenas

Retrocedí un paso pero ella me tomo de la casaca que tenía encima por el frio que ya empezaba a sentir, la mire como si ella tuviese una enfermedad contagiosa en mi mente

- podemos hablar - ella era rara tan rara como lo normal que sería en aquí pero para mí siempre seria extraña – o lo siento – me soltó y levanto las manos en señal de paz

- bueno – hice un ademan mientras ella parecía suspirar

- tu… puedes ayudarme – la mire de l forma más estúpida posible, tal vez mis ojos le dieron la sensación de decirla

- no nos conocemos, lo sabes verdad – negué levemente con mmi cabeza, mientras entornaba los ojos – y tú me pides ayuda, con algo que ni siquiera conozco

Retrocedí dos pasos poniendo una distancia segura entre ella y yo, mientras miraba de un lado a otro lo más sorpréndete que casi no había nadie y un grupo de personas estaban cerca de un árbol mientras me miraban y cuando las mire miraron hacia otro lado como queriendo fingir otra cosa

- Tú quieres, que quieres hacer – me negué de forma concisa – me voy y lo siento no te conozco y no puedo ir con usted

 

- Pero si hablamos aquel día – ella quiso explicar

- Bueno es que tú, das miedo no conozco nada de nada, lo siento adiós  - me fui hacia los dormitorios porque quería leer aquel comic que estaba en emisión el cual era muy importante para ella, además solo volver a verla daba miedo creo que vi demasiadas series donde hay investigaciones sobre asesinos y cosas así

Sentí por primera vez un miedo, que me calaba los huesos en donde quisiera sentirme segura ya que siempre siento que muchas personas me siguen algunas caras que ya había visto en esa tarde junto a ella, con toda la fortaleza que mi pequeño cuerpo podía reunir me pare y la busque

La busque en el comedor, en el salón, en el ala de deportes, en donde hay computadoras para hacer las tareas

Ya dándome por vencida la encontré, ella estaba cerca de un chico, habían más personas junto a ellos, hay caras que vi cuando estaba por ese lugar, me acerque con miedo a ellos

-Tu… - me acerque más y uno de los amigos le toco el hombro – tu, podrías decirle a tus amigos que dejen d seguirme, es súper incomodo no los conozco pero siempre parecen aparecer donde estoy – tome aire – una o dos veces pueden parecer una coincidencia pero ya demasiadas veces da miedo y

- Y tú qué quieres – ella me miro y por primera vez abrí los ojos con resentimiento

- Joder – hable en español – y dicen que y tratan bien a las persona de otros países, puta madre con ellos

- Que – mi mirada vio a los demás, mientras me miraban confundidos – estas diciendo

- Fuck you – me fui después de eso, negué repetidamente mientras pisaba fuertemente

Tom mi laptop que compre con los ahorros de mi vida, el capítulo que tanto había esperado pero al final todo estaba increíble, puse mis tareas y empezar con dicha cosas esto parecía estar como i mi cerebro explotaría por aquellas letras irreconocibles que reescribí de las monografías en el presentador 

Mi mirada esta tan perdida y con una taza de café en mano bien cargada, todo parecía tan molesto actuar como si me conociera en el inicio pero al final actúa como una desconocida y joder con ella, joder con todos

Ya valió cuando volví dormir sentí que todo estaba dando vueltas, con un poco de dolor en los ojos después de todo estoy tan confundida con los problemas sociales en donde tienes que hallar una gran empatía con las personas que se demostraban en aquellos casos juzgados, se supone que no debes poner tu propio pensamiento pero como crear empata si no pueda poner mis emociones como tal, estudiar derecho nunca había sido tan difícil hasta el 7 ciclo

Leer libros parece no tan bueno cuando se habla de cómo tomar decisiones en un momento álgido, me dormí con tanto dolor que al día siguiente desperté 15 minutos tarde y el primer pensamiento que tuve es que me iba a morir y mis calificaciones bajarían por esta falta como pude haberme quedado dormida eso era lo peor mi asistencia perfecta se malograría pensé mientras me vestía prácticamente de la forma más rápida posible, casi cayendo sentada por que los pantalones no ingresaban al estar con las zapatillas

Salí corriendo con un gorro encima una casaca gigante mi mochila y mis lentes en una mano, la mochila casi cayéndose, llegue pensé en mi pero el problema estaba en si el amable profesor me dejaría pasar al salón no es como si se pudiese interrumpir una sagrada clase con aquel juez, y aunque parezca buena onda no se puede interrumpir, el miedo me estaba consumiendo mientras caminaba de un lado y otro empezándome a querer morder los lados de los dedos y provocarme un poco de claridad en este momento

Escuche las risas de unas personas detrás mío y me di cuenta de que hoy también era el día que llevaba clases con esas personas, mis manos empezaron a temblar cuando me acerque a la puerta y quise pedirle al profesor que me dejase pasar, lo sorprendente es que no había un profesor y todos me miraban con miradas irónicas, sentí que esto era pues estaba bien ya que tal vez me eliminaron del grupo en donde el profesor manda algunos mensajes

Ingrese para ir mas tras mientras los demás volvían a hacer sus cosas, me senté tranquilamente pensando en que hice para merecer esto, no hablo con nadie, o con el profesor, pero que todos se pongan en el chiste me provocaba repulsión y unas ganas inmensas de vomitar, mientras me tomaba el estómago vi a los demás que venían a tras mío sentarme a mi lado, mi cabeza se sentía tan mareada mientras me mordía el dedo sin mostrarles a los demás por la casaca gigante que tenía y si bien el profesor llego mis ganas de vomitar no se fueron para nada , mis ganas de salir crecían pero aquel acido que subió hasta mi boca volvió a mi estómago por la fuerza




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