"Al fin te muestras, perra"...masculló para sí misma cuando apareció una publicacion en una red social del rostro de Daira. Buscó con el GPS el lugar donde decía se había producido el evento en el que se la veia a ella con un micrófono en la mano, "Las cañas", con razón perdió de vista a la muchacha el día que salió de Corpus llorando y prácticamnete corriendo. La siguió hasta que vió el número del micro al cual se subió "5"...miró el mapa con los recorridos y supo entonces que se dirigía para esa zona. Siguió en medio de las calles atestadas al micro, simpre unos metros atrás.
Con la moto de doscientas cincuenta cilindradas era más sencillo sobrepasar a los vehículos que a esa hora se dirigían a sus casas luego del arduo día laboral. Estaban en hora pico y el micro se movía lentamente, haciendo múltiples paradas en las esquinas reglamentarias pero al llegar a la avenida principal, tomó velocidad y una ambulancia a la que tuvo que ceder paso le impidió mirar por donde viró al llegar a la esquina. Siguió por donde su instinto le dijo...pero ya no vovlvió a ver el trasero gigante del colectivo rojo que antes había seguido durante media hora. Maldijo su mala suerte, pero tenía una idea de la zona adonde se dirigía. Recorrió las calles hasta que vio un grupo fumando marihuana y decidió salir de allí. No quería que la asaltaran, la moto era nueva, la había comprado con los ahorros que juntó para el recital de Danny..."maldito Danny" .."y encima te casarás con otra" iba pensando y se regresó hecha una furia.