El día del útlimo recital
Daira
"¡Dios mío!" trató de contener un grito ahogado despues de haberse paralizado cuando escuchó el disparo. La mente se puso en blanco, no entendía nada. Salió corriendo hacia donde lo había escuchado y se dio cuenta que provenía del camarín de Danny. "No, no, noo. Dios mío, noo", iba anticipándose a lo que se imaginaba...
Richard
Tomó el celular al escuchar el disparo y por como había rebotado el sonido, supo que venía de la zona del camarín de Danny. "Que no sea lo que estoy pensando", pensaba. Al llegar, un espectáculo en su vista lo hizo lanzar el teléfono que llevaba en la mano, el cual se hizo trizas en el piso. Vio a la mujer parada en un costado extendiendo ambos brazos al final de los cuales estaba el arma. Tenía el rostro desencajado y miraba la escena esperando algo.
—¡Danny!!! —gritó al ver el piso lleno de sangre. Gritó con todas sus fuerzas intentando llamar la atención cuando pudo reponerse. Necesitaba llamar una ambulancia...
Se escucharon unos pasos que retumbaban por el largo pasillo dirigiéndose allí por lo que la mujer, dudosamente, inició la huida hacia la dirección contraria...
Danny
"Salgo del camarín y mi primer pensamiento es ¿Dónde diablos se metió Daira?. Iba ensimismado pensando en eso cuando siento que alguien se abalanza sobre mi. Una muchacha se colgó de mi cuello y enrrolló sus piernas alrededor de mi cintura. No me había pasado desde mis épocas de giras, pero allí los guardaespaldas me seguían a todas partes, jamás dejarían que alguien se me acercara. Intenté zafarla de su abrazo..."
Silencio
Moira
"Debo huir, no dejaré que me atrapen". "Al fin me desligue de esa perra y de paso le dí su merecido a Danny", iba riendo mientras corría por el largo pasillo. Estaba tan absorta que ni siquiera se dio cuenta que llevaba aún el arma en la mano. Al girar en una curva se quedó paralizada. Estaba llena de guardias que le apuntaban.
—Suelte al arma" —escuchó a sus espaldas cuando intentó regresar por donde había venido.
"No, no debo morir. No hasta leer en los periódicos que maté a la maldita prometida de Danny y a él. Sino mi sacrifcio será en vano."
Los titulares del periódico
Tiroteo durante el recital de Danny West
En horas de la noche, cuando el show llegó a su fin, una mujer identificada como Moira Conrad fue abatida por el personal de seguridad del cantante cuando, despues de dispararle a una fan y al él mismo, intentó huir. Aun está investigándose como logró burlar la seguridad para pasar el arma. Nada se sabe aún de la fortuna de Danny West. Existe un silencio total alrededor del hecho. Ampliaremos.
Fueron días frenéticos en los que no hubo tiempo para nada. Pronto Las Cañas se llenó de policías y curiosos que se dedicaron a recopilar la mayor cantidad de información posible para saber lo que realmente había ocurrido y como se dieron los hechos.
Los fans de Danny West acampaban afuera del recinto en el que había dado su último recital rogando en todos los idiomas y credos habidos por su pronta aparición en los medios. Un hermetismo se implantó en el ambiente, nadie hablaba. Se decía que tanto él como su prometida habían sido asesinados por la seguidora de Danny porque estaba tan enamorada de él que no soportó verlo con otra mujer. Otros comentaban que Danny y la mujer habían tenido una relación como amantes y cuando se enteró que se casaría con alguien más los mató a los dos. Las versiones corrían tanto en las redes sociales como en los medios de comunicación. Ya había pasado una semana y el revuelo continuaba.
El representante de Danny hizo su aparición un par de veces sin dar respuestas a los periodistas que pasaban días y noches en vela afuera del local.
Mike estaba ocupado atendiendo un par de hermosos senos cuando recibió una llamada. Eran las dos de la madrugada y por la hora supo que no podía hacerse el desatendido. Hizo a un lado con gran esfuerzo a la pelirroja que no lo quería soltar y atendió.
Su cara empezó a cambiar a medida que avanzaba en la charla.
—¡Maldición! Voy inmediatamente para allá — se levantó de un salto y despidió a la decepcionada muchacha.
Condujo como loco la distancia que lo separaba del lugar citado. Estaba todo oscuro, apenas una luz se percibía que quedaba siempre encendida. Ese lugar solo lo conocían Danny y él. Iban allí cuando querían estar con alguien durante su juventud o simplemente para pasar holgazaneando en los días de verano. El fondo daba a una playa que en esos momentos estaba silenciosa.
Recién al entrar se acordó que estaba disgustado con Danny. Desde aquel día en el que planeó la firma de los papeles de matrimonio se sintió traicionado por su amigo de toda la vida. Él permaneció fiel a su amistad a pesar del alejamiento de Danny hacia nuevos rumbos olvidando a todos incluso de él. No pensó que podía fallarle a su amistad por un arranque de celos, si bien Daira era una muchacha especial él sabía muy bien cual era su lugar y no violaría nunca el acuerdo de complicidad tácito que existía entre ellos.
La misma noche del baile, el día en el que Danny se tardó para llegar con Daira, citó a Mike a su oficina. Fue el día que le puso fecha de matrimonio, con esto estaba claro que quería dejar marcado el territorio que solo le pertenecía a él. Le molestó muchísimo el comentario de Daira haciendo alusión a las cualidades de Mike lo que lo hizo enceguecer de rabia y celos y lo llevó a precipitarse y casi perder a la mujer más idóndea del mundo.