Es de día no se oía nada más que el sonido de este Valle iba caminando ya cansado unos kilómetros, aunque me cansara, no podría hacer nada más que seguir aquel pico para que más gente no muera, no creo que la gente quede como mi amigo así como un zombi que bajaba que le dispararon 1000 balazos.
Pasó una hora y apenas llevo un kilómetro, algo como de subida no caminaba tanto, no es que me de miedo, no veía ni el sol entre los árboles, escuché a un animal rugir, salí corriendo como una ardilla no me importaba si mi estrellaba con los árboles pasaba por encima.
El animal iba detrás de mi Parecía un Zorro que corre por sus hijos, pero yo no le llevaba nada, hoy a una persona gritar ¡Auxilio! subí corriendo, Cuando miro hacia delante un derrumbe de rocas. Ayudé a esa persona a pararse, salimos corriendo hacia abajo, alejando de arriba porque mi plan era llegar arriba al pico ahí adonde aquel que manipulaba a los humanos mató a mi amigo.
No podía hacer nada Ya llevaba 48 kilómetros de abajo para arriba Ya que me había perdido en el bosque decidí ir al pico de esta montaña, iba de arriba para abajo pero me toca correr hacia abajo por este derrumbe de rocas.
seguí corriendo no me importaba si bajaba igual, voy a volver a subir con tal de que el derrumbe de rocas no me aplastara, voy bajando Ya 14 kilómetros, cuando cogí y vi una casa, ¡Wow! era la mía seguía en pie, me tire hacia la casa porque era segura hecha de árboles y todo, pero lo que no podía era dejar de correr, ya me inventé un gran cruce de lado y entre a mi casa, una roca le cayó, pero la casa resistió y me tocó que saltar para llegar a mi casa, espere un tiempo, pero en ese tiempo llegó la noche y no había avanzado nada porque llegué a dar al mismo lugar donde empezaba todo el derrumbe bueno, ya no se hacía nada por lo que perdí mi amigo, quería cobrarle una venganza que la prometí de pequeño.
Llegó el día estaba buscando comida, pasaba por los árboles buscando algo de comer pero no encontraba nada, a mi frente estaba aquella finca sangrienta. Entre a buscar comida aunque me daba asco, cayó un humano encima de mí, un humano muerto porque esta finca era de Muertos, ni sé quién vive o vivía allí en esa asquerosa y Sangrienta finca.
Pasó un tiempo el derrumbe de rocas ya había parado, yo estaba bien sano y a salvo, no podía parar de caminar, hasta que recupere unos kilómetros, al fin llegue al pico, había una cabaña allí, me daba miedo entrar, pero mi mente me decía entra.
Entre vi hacia el techo y el suelo que no valla ser como aquella granja sangrienta, que no puedo olvidar, bueno creo que llegue a la mitad, ¡o no! No se por donde entre, habían 6 divisiones, bueno entre por la numero 3.
Iba caminando por el pasillo, escuchaba unas máquinas funcionar al fondo del pasillo, ¡Ahhh! Que asco es una cafetería de órganos, ya se de donde salió la granja sangrienta, ¡que cosas comen aquí animales o bestias!
—¿bestias amigo? —escuche una voz.
—¿quién habla? —preguntaba yo.
—soy el corazón de esta cabaña —Respondió aquella voz.
—¿tú eres el que mata a los del valle? —le pregunte.
—¡no! Yo no soy —Me respondió.
—¿entonces quién es? —le pregunte.
—Son mis latidos, ellos atraen a las personas y las mata —Me respondió.
—sea quien sea lo mataré —Le dije.
Volví al centro y me metí por la división 4, seguí caminando llegue a un punto que era una pared no veía nada.
Editado: 01.12.2020