Y acá estábamos de vuelta, a punto de comenzar el mismo viaje de todos los años por toda la costa de California. Siempre era la misma travesía en la casilla rodante de la familia, que nos llevaba a través de casi todo el Estado recorriendo lugares como Jackson State Forest, La Playa Carmel y Hendry's Beach entre otros lugares, y quedándonos tres o como máximo cuatro noches en cada lugar, para luego cuando lleguemos a San Diego (el final del recorrido) volver por el mismo camino pero parando en los lugares que no paramos antes. Todo estaba meticulosamente calculado por Mr. Young, como le gustaba apodarse a sí mismo a mi papá. Él tenía como una manía en cuanto a la organización, no podía realizar nada sin previamente ya haberlo anotado en su libreta y repasado unas tres veces mínimo para asegurarse de que todo estuviera bien. Él en pocas palabras era la cabeza de la familia ya que sin él no podríamos organizar un viaje como este.
Con mi familia llevamos realizando dicho viaje desde que yo nací y con el paso de los años se le fueron agregando más integrantes, primero mi hermano Luke cuando tenía dos años, luego le siguió Lizzy a la edad de cinco y por último los gemelos Lark y Lowen a los siete, así que digamos que con una familia así de grande es necesario que mi papá sea así de organizado. Y ya que estamos hablando de mi familia nos falta mi mamá, quien ciertamente es lo opuesto a mi papá en todo sentido. Ella es la que lo hace sacar de quicio por siempre tratar de cambiar todo lo que él ya tiene organizado, y ciertamente a veces lo hace por el simple hecho de que le gusta verlo estresarse, por diversión. Ella es la que le pone alegría a toda la organización que dicho viaje conlleva, porque a veces se vuelve tedioso repetirlo todos los años.
A mi particularmente me tenía un poco cansada ya el viaje, ya me sabía de memoria todas las paradas y siempre era los mismo y el mismo procedimiento para bajarse y que no nos olvidemos a nadie por equivocación. Ya estaba cansada del viaje familia, pero a diferencia de quizás otras personas, yo no quería dejar de hacerlo, quería hacer que sea más divertido, que sea más emocionante y con algo nuevo, por eso este año me había propuesto hacer todo lo que me ofrezcan hacer, si van a hacer una caminata allá voy a estar, si van a meterse al mar también voy, todo iba a hacerlo para que sea diferente. Y esto último me llevaba a lo que estaba haciendo justo ahora, cantar canciones infantiles por diversión con los gemelos.
-¡Witsi Witsi araña subió la telaraña! ¡Vino la lluvia y se la llevó!.
No quería admitirlo, pero estar acá cantando con ellos en vez de en la cama cucheta arriba leyendo no hacia la gran diferencia, la verdad que era lo mismo y no sentía más emoción en el viaje.
-Vamos Lexy, una canción más. -Me insistía Lowen.
-Lo siento Low, pero ya me canse.
-Parece que no duro mucho tu meta por querer hacer este viaje más divertido Lex -me dice burlón Luke.
-No voy a dejar que tu comentario me afecte Luke, me alcanza con saber que al menos yo intento hacerlo más divertido y no lo hago más aburrido como vos.
-Sabias palabras, lástima que no te quedan bien -dice arrogante.
Ignoro dicho comentario y sigo mirando el paisaje que ya he visto más de mil veces.
-Y así es como se gana otra batalla contra Lexy gemelos, vayan tomando nota a futuro.
Vuelvo a ignorarlo sabiendo que lo que quiere es hacerme enojar, y no lo voy a dejar obtenerlo.
-Prepárense que ahora están viendo la fase que me gusta llamar "finjo que no me molesta pero te quiero matar" -habla dejando suspenso-, es importante que la tengan en cuenta ya que la que sigue es peligrosa porque siempre es impredecible...
Trato de contenerme y no contestarle nada ya que sé que es lo que quiere. Siempre hace lo mismo, relata todo lo que hago cuando evito discutir para que termine discutiendo, pero esta vez va a ser diferente, no voy a dejar que gane.
-Y ahí están viendo, ese movimiento que hace con la boca es una clara señal de que está teniendo un debate interno sobre cuál va a ser su siguiente movimiento. -Escucho las risas de los gemelos disfrutando de sus burlas-. Atacar o no atacar, esa es la cuestión Lexy, ¿Cuál elegirás?
Y eso es suficiente para que me olvide de que no iba a dejar que me afecte su jueguitos. Me paro y lo empujo de al lado mío haciendo que se caiga al piso de la casilla rodante.
-Típica elección Lex -dice negando con la cabeza desde el piso-. La próxima podes cambiarla así nos sorprendes.
-¡Cállate! -le digo dándole un golpe en la cabeza y dándole inicio a una de nuestras típicas peleas.
Él logra defenderse de mis golpes mientras se ríe, y no solo él se está riendo, Lizzy junto a los gemelos también están disfrutando de la diversión, y eso hace que me enoje más y le pegue más golpes. Me molesta tanto que se estén riendo cuando yo estoy tan enojada por el simple hecho de que me traten como su títere para que se diviertan a costa mía cuando les dé la gana.
-¡¿Qué está pasando?! -Aparece nuestra madre abriendo la puerta trasparente que nos separa del conductor y su copiloto-¿Qué estás haciendo Lexy? Deja a tu hermano tranquilo.