¿Es como en los Kdramas?

Danica

Mi vida está interesante. Nunca pensé que sería capaz de dar un beso. 

¡Eres increible Danica! 

Estoy dando pequeños saltos en mi habitación y ahogando gritos para evitar preguntas. 

Tengo amigas o mejor dicho una amiga que ha experimentado absolutamente de todo con todos y siempre me reprochaba el ser mojigata pero en modos "dulces" tal como ella lo dice. La verdad es que sigo pensando en llegar al altar nuevecita, es decir, no deseo dar mi cuerpo a cualquier hombre no más por encajar en la "moda actual entre parejas".

-Hija, cariño- entra mamá a mi habitación- vengo a darte las buenas noches, te amo.

*****

Han pasado dos días y mi querido vecino no me ha escrito y tampoco he tenido el gusto de verle en la azotea o en la calle. Supongo que esto se trata de un melodrama como tanto lo había deseado. Ja, no podría soportar saber qué somos en realidad si sí o si no.

-Me voy a volver loca.- Revuelvo mi cabello.

-¿Por qué hablas como sino lo fueras ya?

-Vea usted cállese.

Rosa se rie.

-¿En qué estás pensando que no me prestas atención? Agradece que vengo a visitarte. Debería de hallar un novio para ti.

Le rio de manera falsa para que noto que su chiste no me gustó.

Si le cuento mi pequeña hazaña a este ser que en ocasiones es más un ser de tinieblas que de luz. Lo más probable es que quiera aconsejarme de una manera absolutamente indeseable para mis oídos. Por lo que me lo guardo para un día en que se encuentre triste y así me preste menos atención.

《Necesitas hacer amigos nuevos, Danica》

-Mi bella amiga, debo irme. Alguien me espera- se despide con guiño de ojo y sale.

Tomo mi celular y le escribo. 

Yo: Hola...

A los dos minutos el mensaje sale en modo leído pero no me responde. Caramba me han ignorado de una manera extraordinaria.

Yo: Solo escribía para decirte que olvidarás lo de la otra noche, buenas noches. 

Tiro mi teléfono a la cama de manera dramática, porque puedo ser muchas cosas pero cuando estoy enojada me salen escenas de dramas que no puedo controlar. Mi teléfono vibra al instante. Me tiro en busca del mismo.

El mudo H: No hay nada que olvidar. No pasó nada.

Abro mi boca indignada, pensé que ya eramos algo, es decir, así como en las novelas coreanas, supuse que ya era mi pareja. 

Pensé que mi vida amoroso había comenzado pero, todo estuvo dentro de mi cabeza y ¡gracias Dios! Porque es ahí donde va a seguir estando. Estas vergüenzas no las quiero compartir.