"Todos tenemos sueños, tú eres quien decide si rendirte o hacerlos realidad"
—Taiga Bridger
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Capítulo 1:
SUEÑO QUE QUEMA
Washington D.C -EEUU
17 de enero del 2020
Noticias tele J:
<<Desde hace una década, entre nosotros se oculta un cazador; un despiadado ladrón que ha logrado robar incontables sumas de dinero a más de 34 países, como lo son: Canadá, Rusia, Alemania, Suecia, China, Japón, México, España, Reino Unido y la lista sigue, esto sin contar los robos que no han sido registrados.
En nuestra amada nación se cuentan 35 robos al Banco Central de los Estados Unidos (al sistema MEX), sumando aproximadamente 900 millones de dólares.
Nuestro gobierno, junto con los otros, han creado la alianza más grande entre naciones, nombrada "El cazador" conformada por 40 países, quienes luchan arduamente por detener estos ataques cibernéticos al sistema MEX; los cuales, gracias a su naturaleza tecnológica, se vuelven imposibles de predecir o repeler.
Se estima que en estos 10 años El Zorro Blanco ha acumulado una fortuna inmensurable, colocándolo en el puesto número uno en la lista de personas más ricas de todo el planeta.
Sus riquezas ni siquiera pueden ser medidas por los expertos, y calcularla se ha convertido en el desafío de muchos, aún cuando no se puede comprobar la realidad.
¿Quién se esconde detrás de este nombre? ¿Quién es la mente maestra detrás de todo esto? Muchos han dado sus mejores años a descubrirlo, sin resultado alguno, y las recompensas a quienes logren dar al menos una pista de su identidad se estiman en millones de dólares, ocasionando que, no solo países enteros busquen a esta persona, sino también mercenarios que han sido azotados por estos robos cibernéticos de dinero e información.
El Zorro Blanco, la mente maestra que todos quieren capturar; el genio cibernético más buscado de todo el mundo. Él es la noticia mundial del siglo y descubrir su identidad es el sueño de muchos.
Yo soy Alison Cooper y estas fueron las noticias>>
Escuché como finalizaba la transmisión matutina dictada por mi madre.
Era costumbre para todos desde hacía mucho tiempo que El Zorro Blanco estuviera en el titular; ya casi 10 años. Desde aquel 11 de octubre.
Lo recordaba perfectamente. Mi madre había hecho un documental sobre eso, o bueno, en realidad había hecho unos 70 documentales desde el primer robo registrado con la marca de "ZB". Este fue en contra del sistema MEX por varios millares de dólares en moneda digital vaciando el sistema; sí, ese estúpido mecanismo económico que primero prometía ser un éxito y ahora solo era usado para ridiculizar a las fuerzas que se supone deberían defenderlo.
Unas horas después, cientos de denuncias llegaron a la policía hechas por usuarios que habían visto esta marca en cajeros cuando intentaron sacar efectivo, y otros países comenzaron a dar voz de cosas similares en sus bancos. ¡Fue una locura! Tan solo tenía 9 años cuando todo ocurrió y lo recuerdo tan vívidamente que da miedo.
Desde su llegada, las noticias se transformaron en resúmenes de todo lo que pasaba entre los gobiernos y en sus intentos de detener los robos frecuentes. Nunca había una señal de que pasaría, no había rastro de su entrada o salida del sistema, ni siquiera se encontraban registros de su ingreso; solo quedaba el vacío de las cuentas y esa marca.
Lo máximo que se supo de él fue un año después cuando, sin previo aviso, la marca cambió a "Zorro Blanco" y ahí surgió lo más parecido a un nombre con el cual llamarle.
Todos querían saber su identidad y atraparlo, todo el mundo deseaba su cabeza. ¿Y yo? Yo sería la responsable de su captura.
—¡Janette! —La familiar voz de mi mejor amiga, Becca, en la parte baja de mi ventana me hizo saltar. Ya era hora de marcharnos y no aún no me había preparado.
—¡Ya voy! —grité con fuerza, me levanté de la silla y caminé a la ventana para encontrarla.
—¡Ni siquiera te has arreglado! —dijo en forma de regaño y yo solo pude rodar los ojos.
Ella suele exagerar.
—Estaba ocupada —instintivamente, mi mano subió hacia mi cabello. Estaba hecha un desastre por el mal dormir de la noche.
—Sí, claro. Rápido, ya es tarde —habló con pesadez y luego caminó en dirección a mi puerta.
Me fui al baño con intenciones de ducharme para quitar aquel aspecto de indigente mañanero. Luego de hacerlo, me vestí con una camisa azul cielo y pantalones ajustados de jeans.
Mientras me ponía mi chaqueta de la universidad, observé hacia el gran espejo que cubría la pared, notando las ojeras casi brillantes que me hacían parecer un mapache.
El aspecto de Zombi parecía ser mi favorito.
—¿Estás hablando con tu jabón de nuevo? —la oí decir entrando a mi habitación.
¡Eso solo había pasado una vez!
—No, solo me estaba arreglando —terminé de trenzar mi cabello y salí del baño.
Ya afuera, vi a Becca analizando cada uno de los implementos de detective; folletos, artículos de periódicos, un gran pizarra con teorías y hasta una grabadora. Tragué grueso ya que nunca había dejado que nadie viera aquello, en todo este tiempo había dedicado gran parte de mi esfuerzo a mantener todo oculto y aunque mi mejor amiga tenía conocimiento de la investigación, la última vez que había visto mi base de datos fue hace mucho.
—Estás obsesionada —dijo a manera de reproche, mientras se cruza de brazos.