Capitulo 10

-Jack, se que quieres una explicación acerca de lo que acaba de pasar; pero ahora mismo tengo que hacer algo... Será cuando regrese—Dije pasándole por el lado.

Me dirigí hacia donde comúnmente hablaba con la diosa Luna, es algo así como un templo pero obviamente más pequeño.

Me acerqué a un altar que se encontraba en el centro y me senté en el escalón.

-Sé que sabias que vendría, no tengo porque llamarte ¿no es así, Luna?—Dije rodando los ojos.

De fondo escuche una melodiosa carcajada.

-Soy tu diosa, debes respetarme, niña—Dijo mientras se colocaba frente a mi.

La diosa Luna es muy hermosa, piel blanca como la porcelana impoluta, unos impresionantes ojos azules tormenta adornados con unas pestañas oscuras, su cabello era negro como la noche misma y llegaba hasta su pequeña cintura. A su cuerpo se ceñía un vestido blanco que representaba pureza.

Sin duda es muy hermosa.

-Eres SU diosa, no la mía Luna—Dije burlona provocando otra carcajada de su parte.

-De acuerdo, a lo que viniste, ambas tenemos cosas que hacer.

-Bien, empecemos por la parte en la que me explicas el porque tengo un mate si se supone que debo quedarme en este bosque siempre. Y para rematar, un alpha—Dije mirándola mal.

-Oh, ¿eso lo que quieres saber?—Dijo mirándome con sus profundos ojos.

-Si... Solo eso—Me lo pensé—Bueno, no solo eso.

-Bien, responderé tu primera duda mientras piensas que preguntar, ya sabes que son solo dos consultas por noche...—Dijo mientras se aclaraba la garganta—Desde que naciste se te impuso que la protección "del bosque"—Dijo haciendo comillas con sus dedos respecto a lo de que debo "cuidar el bosque" cuando en realidad no es así...—Es la única razón por la que estas aquí. Nunca se te hablo sobre el mundo exterior, bueno, solo lo mas básico—Asentí dándole la razón—Te criaste solo conociéndonos a Jack y a mi, que por cierto está espiándonos desde allí —Dijo señalando unos matorrales —Pero vayamos al grano, tu mate no fue un error—Dijo haciendo un gesto despreocupado con su mano, ¿qué clase de diosa es esta?—Ahora me voy, espero y encuentres la respuesta correcta a esta incógnita, adiós—Dijo agitando su mano en señal de despedida, para luego desaparecer.

-Ok, eso es raro, y lo que me dijo no tiene ningún sentido... Además me falto una pregunta—Me quejé mientras me ponía de pie y me sacudía mis ropas. Deje salir un suspiro y me dirigí hacia la cabaña en la que dormía, ya que anocheció

En el camino me puse a pensar en "la prueba" esa, ¿Qué será lo que esperan que haga? ¿Qué es lo que yo quiero hacer?