Capitulo 36. Final

Abrí los ojos de repente para luego tener que cerrarlos por la luz. Cuando pude abrirlos bien miré a mi alrededor y me fijé que estaba en la habitación de Áaron; como un flash mi cabeza vinieron los recuerdos de todo lo que pasó y sin poder evitarlo dejé salir las lágrimas que tanto había estado ocultando.

Áaron entró de repente en la habitación y sin hacer preguntas simplemente me abrazó. No sabe cuanto agradezco que no haya preguntado nada.

Pensé en el incendio del bosque, la llegada de los guardianes, la guerra, la muerte de Jack, y en las ultimas palabras del guardián antes de que lo matara. 
 

Flashback

-Siempre serás un monstruo, nadie quiere a los monstruos, ¿En serio creíste que Jack te amaba?¿Crees que tu mate te amará al saber lo que has hecho?—Dijo sonriendo

Tengo que admitir que eso me dolió, pero nunca se lo demostraría.

-Incluso los monstruos sabemos cómo amar, si es por su bien no me importa que me odien.— Respondí sin ninguna emoción en mi voz, para luego sacar su corazón de su pecho.

Fin del flashback
 

Yo sé que soy un monstruo pero hasta un monstruo como yo sabe amar y si es verdad lo que Carer decía y nadie me ama, que solo están fingiendo, no me importa que no sea real, solo lo disfrutaré mientras dure. Le devolví el abrazo a Áaron y lloré hasta quedarme sin lágrimas.




 

5 Años después

12-04-2023

Querido Jack

Otra vez te escribo una carta que sé que no recibirás, se unirá a las muchas otras cartas que escribo para ti y guardo en el cajón. Esta vez te escribo para contarte lo que ha pasado en estos 5 años que no te he escrito.

Abbie encontró a su mate hace 4 años, y un año luego se casaron y tuvieron su primer bebé; un pequeño al que llamaron Nathaniel. Lucas el beta de Michael y Carla, su mate, se casaron hace 3 años, esperaron mucho ¿verdad? Teniendo en cuenta el tiempo que se conocen.

Hoy estamos celebrando el cumple años de mis hijos, porque si, me casé con Áaron y tuvimos gemelos, una niña a la cual llamamos Jaqueline, y un niño que llamamos Jack, como tú. No podría ser más feliz. Tu partida dejó un vacío inmenso en mi corazón, un vacío que por muchas personas que tenga a mi alrededor no llenaré; porque tu fuiste y siempre serás muy especial para mí.

En cuanto al bosque, pues... Lo arreglé. Me tomó mucho tiempo pero lo hice, hicimos del bosque parte de la manada, lo sé, ¿por qué no se me ocurrió antes? Y construimos nuestra casa ahí. No te preocupes por mí como puedes ver desde donde estés, estoy bien y muy feliz. Nunca te olvidaré.


 

Te ama con todo su corazón

Layla O'Dowell