Capítulo 1

-Aun no comprendo tu obsesión por querer vengarte -Hablo aquella mujer de apariencia majestuosa. 

-No es venganza Ona, ¿Por qué no lo entiendes?, gracias a ellos estamos casi extintos somos los únicos sobrevivientes de nuestra especie y todo porque los lycans y los vampiros se creen superiores -Alzó la voz observando a la mujer, suspiro para luego acercarse a ella y tomar sus rostro haciendo que sus ojos conectaran. 

>>Ellos saben que aun no estamos extintos y nos están buscando, no permitiré que les hagan daño -Dijo este mientras que con su pulgar acariciaba la mejilla de la mujer, y seguía contemplando aquellos ojos dorados. 

-Yo también quiero que Erick y Kiara estén bien que puedan ser libres, que todos podamos vivir en paz -Ona se separó del sujeto -Pero si para eso tienes que arriesgar tu vida prefiero que no sea así -Termino de decir. 

-Tampoco exageres, no voy a ir a una guerra solo iré a hablar con Lían -Le dijo y la mujer lo miro enfadada. 

-Te parece exagerado, iras a encontrarte con un miembro de la manada que quiere asesinarnos, es el delta de Frederick no entiendo como confías en el -Dijo la mujer. 

-Igual que como tu confías en Alicia que el la hija de Apolo, otro que también quiere acabar con nosotros -Dijo y la mujer le dio la espalda. 

-Es diferente… 

-Eloy, ya todo esta listo -Hablo un hombre interrumpiendo. 

-Voy en seguida -Dijo y el hombre se retiró sin más. 

-¿Con quienes pretendes ir? -Preguntó Ona. 

-Alonzo, Carmelo y Bruno -Dice al tomar su mochila y depositar un beso en la frente de su esposa. 

-¿Por que no llevas mas hombres contigo? -Preguntó. 

-Porque deben proteger la aldea en todo momento, tu y los niños son lo más importante no los dejaría desprotegidos -Le dijo para luego salir. 

Sin más que decir Ona siguió los pasos de Eloy hasta donde sus tres hombres lo esperaban para salir.  

Segundos mas tardé los hombres yacían en sus caballos emprendiendo marcha hacia aquel encuentro. Una voz tras Ona la sacó de sus pensamientos trayéndola devuelta a la realidad. 

-No te preocupes tanto, no es la primera vez que se verán con el lobo -Le dijo Marizol su hermana. 

-Siento que algo está a punto de ocurrir -Dijo simplemente.  

-Anda, vamos a la cabaña con los niños te hará bien -Propuso y Ona asintió. 

Al llegar a su cabaña esta se dirijo a donde sus hijos descansaban, Erick un pequeño de casi dos años de edad y una pequeña de apenas dos meses de haber nacido. 

-¿Qué crees que haya pasado con Alicia? -Pregunto Marizol. 

-No lo sé, seguramente ya debe haber dado a luz -Dijo simplemente para luego mirar a su hermana -Marizol, podrías cuidar a los niños, necesito salir a tomar aire -La castaña asintió y Ona salió a dar una vuelta por los alrededores. 

*A kilómetros... 

-Esto no me da buena espina -Hablo Bruno a un tono bajo. 

-¿Tu también? Estas igual de paranoico que Ona -Respondió tranquilo. 

-Eloy, Bruno tiene razón, el ambiente no es el mismo de siempre -Carmelo miraba a su alrededor. 

Eloy pretendía responder cuando Lían se hizo presente ante ellos, los cuatro bajaron de sus caballos al igual que el rubio lo hizo, los tres chicos se alejaron mientras Eloy camino hacia el lobo. 

-¿Qué es eso que tienes que decirme? -Preguntó Eloy… 

-Le suplico piedad mi señor -Lían duplicada por su vida luego de ser descubierto de haber estado aliado con la cobra. 

-Te atreves a suplicarme que tenga piedad después de que has traicionado a tu manada – Hablo el alpha frente al rubio. 

-Y no sólo a tu manada sino también a mi clan, el clan al que pertenece tu mate, mi hija -Hablo el conde que se hacia presente con la pelinegra tras el que marcaba en su vientre ocho meses de embarazo siendo custodiada por soldados -Pero sólo por ser una buena carta a nuestro favor te perdonaremos la vida -Le dijo. 

-Deberás guiarnos hacia la cobra -Hablo el alpha. 

-¿Y si no lo hago? -El alpha tomó una postura de autoridad y miro al conde. 

-Despierte de tu amada y tu hijo -Hablo sin remordimiento, para darse la vuelta y disponerse a retirarse. 

-¿Serias capaz de lastimarme junto a tu nieto? -Pregunto Alicia sin mirar a su padre quien frenó sus pasos y sin mirar a nadie respondió. 

-Es mejor que no me pongan a prueba -Dijo simplemente para retirarse.

-¡ES UNA TRAMPA! -El grito de Carmelo puso a todos en alerta Eloy tomó a Lían del cuello. 

-¿Por qué lo has hecho? -Le pregunto Eloy a Lían mientras veía como un gran grupo de lycans y vampiros los rodeaban y esparcían aquel polvo púrpura sobre ellos.