Elegidos

Capítulo 2

*En la aldea… 

Ona seguía rondando por los alrededores cuando de repente sus sentidos se pusieron alertas, sentía como a lo profundo del bosque habían movimientos sigilosos y eso sólo significaba una cosa. 

-Demonios… -Ona inmediatamente corrió hacia la aldea para avisarle a todos -¡NOS ATACAN! -Grito repetidas veces. 

Los grito Ona fueron los suficientemente fuerte para que todos la escucharán, un joven se acerco hacia ella. 

-Ona, ¿Qué esta pasando? -Pregunto el chico. 

-Iván necesito que ayudes a sacar a los niños de la aldea, son demasiado y nos tienen rodeados, Eloy esta en peligro tengo que ayudarlo -Le dijo. 

Los lycans y vampiros empezaron a aparecer por todos lados invadiendo la aldea y dando inicio a una nueva batalla. 

-Ona debes ponerte a salvo junto a los niños -Ona sintió como su sangre dejaba de fluir al momento que Iván mencionó a sus hijos. 

-Los niños -Ona corrió hacia su cabaña en busca de sus hijos y hermana. 

*En la mansión Jensen de Irak… 

Eloy cobraba consciencia después de que los vampiros y lycans esparcieran sobre el aquel polvo que logró dejarlos inconscientes a el y sus nombres. 

-Voy a matarlos a ambos -Les dijo a los sujetos que permanecían en las sombras de aquella habitación donde Eloy se encontraba encadenado. 

-Nos encargaremos que tu y tu gente queden extintos -Hablo el conde mientras daba unos pasos hacia Eloy dejando que la serpiente lo viera quien en un intento fallido de atacarlo queso frente a frente al vampiro quien río para luego salir del lugar… 

*Fuera de la mansión Jensen… 

-Dijiste que podría ver a Alicia después de entregarte a la cobra -Le decía Lían a Apolo que salía de la mansión, el conde se dirijo con gran velocidad hacia el y lo tomó de la mandíbula para que lo observará. 

-Veras a Alicia pero no te acostumbres -Le dijo para luego soltarlo. 

Unos guardias escoltaron a Lían por la mansión hasta llegar a aquella celda donde Alicia permanecía. 

-¡Lían! -Exclamó Alicia al verlo, este no dudo en abrazarla fuerte. 

-Lamento no haber podio haberte ahorrado todo estaba situación -Le dijo aun abrazándola. 

-Baltasar no me ha dejado sola durante todo este tiempo -Le dijo al separarse de el y tomar a la bebé que yacía en la pequeña cama. 

-Baltasar -Repitió el nombre -Desde que fue desterrado no se supo más de el, ¿por que aparecer ahora? -Le pregunto. 

-Aun no se lo que planea pero es más poderoso que antes -Dijo mientras dejaba a la bebé en los brazos de Lían. 

La pequeña resplandecía en hermosura y sencillez pero su apariencia era inigualable, una apariencia nunca antes vista entre los sobrenaturales.  

-No entiendo esto… -Dijo mirando confundido a su esposa. 

-Es una hibrida -Le dijo -Baltasar me ha dicho que sus poderes despertaran luego de un tiempo -El lobo la miro y luego a la bebé. 

-Esto es increíble -Dijo aún observando a la bebé -¿Cómo se llama? -Preguntó. 

-Aun no tienen nombre, quería que lo eligiéramos ambos -Le dijo. 

-Quisiera que se llamará Sandra, como mi madre -Le dijo y la mujer asintió. 

-Sandra es un hermoso nombre -Ambos sonrieron. 

-Se ha acabado el tiempo -Un guardia de la mansión habló interrumpiendo el momento. 

Lían sin más le entregó la bebé a Alicia y se retiró. 

-Todos van a pagar por esto, en especial tu Miryan -Dijo Alicia al aire mientras dejaba a la bebé en la pequeña cama de aquella celda donde permanecía. 

Alicia se acerco a la pequeña ventana de la habitación y observo el profundo bosque que rodeaba la mansión, un frío repentino caló sus huesos y Alicia sabía que significaba. 

*En los límites del territorio Jensen…  

Baltasar observaba el profundo bosque en dirección a la mansión Jensen. 

-Ya falta poco Baltasar, no te tortures tanto -Habló una mujer mayor que aparecía tras el hombre. 

-Las cosas se están complicando -Hablo Baltasar -Se suponía que ambas debían dar a luz al mismo tiempo -Le dijo. 

-Era lo que se esperaba, pero alguien se ha encargado de complicar las cosas -Le dijo pensativa. 

-Alguien… esa mujer debería estar extinta al igual que su reino -Hablo Baltasar. 

-Pienso lo mismos pero por ahora debemos irnos -Informó Boris haciendo presente.  

-Cuida a mi nieta Baltasar -Hablo la mujer para luego desvanecerse al ser tocada por Boris. 

-Ve por la niña, yo me encargo de lo demás -Le dijo Boris al hechicero que asintió para luego desaparecer. 

*En algún lugar del inmenso bosque… 

Ona e Iván corrían por todo el bosque buscando a la castaña y a los niños, mientras los demás hombres se encargaban de sacar a todos de la aldea. 

-¡MARIZOL! -Iván gritaba desesperado  

-Debí ir primero con ellos -Ona se encontraba desesperada al no haber podido encontrar a su hermana y sus hijos. 

-Ona -Se acercó a la mujer -Informaste a la aldea a tiempo y gracias a eso se han salvado muchas vidas, quizás Marizol escapó con los niños antes de que esos malditos atacaran tu cabaña -Dijo intentando calmarla. 

-Y si no -Dijo al borde de llanto -Y si Apolo y Frederick los tienen al igual que a Eloy -La mujer cubría su rostro con sus manos. 

-¡IVAN!... 

El grito de Marizol se escuchó a lo lejos, ambos inmediatamente corrieron en dirección a los gritos. 

-¡ONA!... 

Los gritos de Marizol se escuchaban mucho mas cerca, al encontrar a la mujer Iván corrió hacia ella para abrazarla, mientras Ona se detuvo de golpe. 

-Marizol, ¿Dónde están los niños? -Pregunto Ona al no ver rastros de sus hijos. 

-Tranquila -Marizol se acerco a Ona para abrazarla -Los niños están bien, están escondidos al otro lado del río tras la cascada -Ona relajo su cuerpo al escuchar aquello. 

-Volvamos a la aldea -Propuso Iván -Necesitamos ayudar a los que aún no han podido escapar -Los tres se pusieron en marcha para auxiliar a los demás miembros de la aldea. 

*En la mansión Jensen de Irak. 

-Bueno viborita cuéntame ¿Qué se siente estar encadenado mientras que allá afuera tu gente muere uno tras otro? -La venenosa voz del conde resonaba por la habitación mientras Eloy forcejeaba para soltarse pero se le era imposible. 

-Púdrete -Escupió con desagrado y molestia -Cuando me libere voy a arrancar tu cabeza -Un guardia golpeó con fuerza su abdomen haciéndolo retorcerse de dolor. El conde río. 

-Señor, el Alpha ha llegado -Informo un guardia que se hacia presente en el lugar. 

-Bien iré con Frederick para decidir de que manera vas a morir -Le dijo, Eloy le miro desprecio. 

*En algún lugar del bosque. 

Lían caminaba por el bosque desesperado aún no creía encontrarse en aquella situación. Su amigo junto a sus hombres cautivos por su alpha y su suegro mientras su destinada encarcelada bajo el poder de su propio padre. 

No sabia que hacer o por donde comenzar para ayudar a Eloy y sus hombres sin poner en riesgo a su destinada y su hija, se encontraba entre la espada y la pared. 

Deseaba despertar y que todo fuera una simple pesadilla pero era imposible todo era la cruel e injusta realidad, cayo al suelo de rodillas mientras un par de lagrimas comenzaron bajar por sus mejillas. 

-¿Porque no las sacaste de hay?, ¿Eso es lo mucho que te importan? -Comento al aire con voz lastimera -¿Que debo hacer? -Susurro haciendo que el viendo cambiará de dirección trayendo con el un frío que calo hasta sus huesos. 

-¿Porque no empiezas por Ona? -La voz de Baltasar se hizo presente en el lugar. Lían lo observo frente a el. 

-Ona debe odiarme en estos momentos -Comentó.  

-Ona peligra en estos momentos, ¿Dejaras que muera la mujer que cuido de Alicia? -El rubio paso sus manos por su rostro. 

-Alicia también corre peligro -Dijo el rubio recordando la situación. 

-Alicia estará bien, yo me encargaré de eso -Le dijo animándolo para ayudar a Ona y Eloy. 

Lían asintió para luego ponerse de pies y tomar camino hacia la aldea con la esperanza de que no fuera demasiado tarde.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.