Capítulo 11

Dylan

Es día de partido y despierto antes de que suene mi despertador, Amber durmió aquí ya que todas las noche ha tenido pesadillas y para evitar levantarse o que yo vaya a verla se duerme aquí. Me levanto sin hacer ruido y me encamino al armario a buscar mi uniforme para bañarme.

Ayer pude ver como domino el elemento tierra, ya son tres elementos que domina convirtiéndola en elemental y no dudo de que haya un cuarto elemento. Además nuestra conexión se está volviendo más fuerte y más intensa al paso del tiempo, puedo sentir donde está aquí en la casa y como se siente. Cuando fue a cenar con Steve pude percibir el cómo se sentía y su confesión del otro día me deja más tranquilo sabiendo que puedo estar a su lado para protegerla.

Eso me recuerda que debo hablar con Steve para conocer sus intenciones con ella, no quiero que la dañe. Ya lo hicieron una vez y no quiero que vuelva a suceder.

Luego de ducharme y vestirme, agarro mi teléfono y bajo a la cocina dejando dormir a mi hermana. Enciendo mi teléfono y lo colocó en el mostrador de la cocina mientras busco en el refrigerador algo para preparar el desayuno.

Amber siempre despertaba primero que yo y me dejaba el desayuno preparado y tengo que devolverle el favor. Ian baja y me saluda tomando una taza de café, él y Amber son adictos al café, si no lo toman andan de malas todo el día.

— ¿Irás al partido verdad? — le pregunto asegurándome, a pesar de que fortaleció su amistad con Amber sigue siendo mi amigo tambien.

— Claro, no me lo perdería.

Preparo el desayuno de todos y mi hermana baja directo a la cafetera, la tuve que comprar cuando supe que volvería. Ya que si despertaba el primer día sin café la iba a ver amargada todo el día. Me saluda y se sienta a comer junto a Ian. Guardo el celular en mi bolsillo, termino de comer y subo a recoger mis cosas para salir al campo. Siento que comienza a sonar mi teléfono y contesto sin mirar quien es.

— Hola — es lo que digo al ponermelo en la oreja

— Hola, por favor no cuelgues — dicen al otro lado de la línea dejándome congelado — necesito hablar contigo y quisiera conocerla también.

— No y ni pienses en acercarte — es lo único que digo y después cuelgo. No entiendo por qué la insistencia. Debo evitar que Amber conozca a esta persona y protegerla de otra en la universidad. Luego me encargo de eso.

Bajo ya que los chicos ya están listos y dejo que mi hermana maneje mi auto mientras me coloco los zapatos para jugar. Llegamos al campo y me muevo a los vestidores a guardar mis cosas, mis hermanos se fueron a su lugar en las gradas, el entrenador entra con Alex para reunirse.

— Espero que estén listos para ganar, ya que si lo hacemos entramos totalmente en el torneo — dice y los demás gritan afirmando. El entrenador sigue hablando y Nate se pone a mi lado. Luego de la charla del entrenador nos juntamos con las manos en el centro en el grito del equipo para salir al campo.

Alex me detiene antes de salir.

— Recuerda en lo que quedamos, tenemos que ganar. Confío en ti — me dice dándome un leve golpe en la espalda. Salimos a la cancha y me tocó estar en la banca hasta el segundo tiempo o antes como estrategia del entrenador.

Veo a mi hermana junto a Ian y junto a ellos esta Steve con sus amigos. Más arriba veo al chico del que me habló Ian el otro día.

Ian es un gran amigo y sé que no dice las cosas por dañar, por lo que me comento conoce a este sujeto y sabe lo que es capaz de hacer. Pienso que pudo ser él el que levantó las columnas de arena el otro día en el centro.

Me concentro en el juego y mi equipo mete un gol avivando las gradas, minutos después el otro equipo comete una falta grave con uno de mis compañeros haciendo que el árbitro saque la tarjeta roja expulsándolo. El entrenador me pide que vaya calentando para entrar. Una vez que sacan a mi compañero de la cancha entró y Alex cobra la falta. No falta mucho para que termine el primer tiempo y antes de que acabe metemos el segundo gol del partido.

El árbitro pita y nos vamos a los vestidores contentos, van 2-0 y debemos mantener el marcador así o meter otro gol. Al terminar el descanso volvemos y comienza el segundo tiempo defendiendo nuestro arco. Y con el balón busco la forma de hacer el pase pautado con Alex y metemos el tercer gol.

Veo a mi hermana celebrando con los chicos, seguimos jugando defendiendo hasta que termina el juego dándonos la victoria. Comenzamos a celebrar y en tantos saltos me separo de los demás para comenzar a caminar a dónde está mi hermana que está saliendo de las gradas para entrar al campo, pero me quedo inmóvil viendo a la persona que está parada cerca de la puerta.

Le dije que no sé atreviera a aparecer, pero veo que no me hace caso, Amber se me viene encima abrazándome y pierdo de vista a la persona que vino. Juntos vamos a casa de Alex a celebrar, pero primero voy a casa a ducharme y cambiarme de ropa.

Antes de salir tomo mi celular y escribo un mensaje.

— Te dije que no aparecieras.

— No puedes ocultarme Dylan y te dije que necesito hablar contigo — responde de vuelta.

— Está bien, nos vemos en el mismo lugar de la otra noche a las 10 pm.