La sala de entrenamiento era en un espacio abierto, con el bosque rodeándonos y un gran edificio de metal, en frente.
—Acérquense—.Indico un joven de cabello castaño y ojos de un café muy intenso—.Yo seré su profesor en esta clase, tengo entendido que no tienen un arma en específico, así que los llevar a elegir una, se dice que si cuando tocas un arma y esta se convierte en un accesorio en específico, te ha elegido y te apoyara en el momento que la necesites convirtiéndose en lo que sea, así mismo tu poder se intensificara.
Al entrar en el edificio había muchos chicos agarrando todo tipo de armas, espadas, cuchillos, dagas, arcos, pistolas, etc.
Camine lentamente por cada sección hasta llegar a una hermosa espada delgada y muy fina con una especie de gema en el centro, la observe por unos minutos mientras notaba cada una de las aptitudes que tenía y como me podía ayudar.
—Esa es realmente linda y buena, pero nadie ha podido acoplarse a ella—.Comento una chica a mi lado.
La tome y realmente me gustó, era liviana, en un momento lo que tenía colgando de mis manos ya no era una espada, sino un bello anillo con una gema roja en el medio.
—Llega a ser sorprendente la forma en la que tu hermano y tú están tan unidos como para lograr encontrar un arma ideal al mismo tiempo—.La voz del profesor llego detrás de mí.
Dirigí mi mirada hacia Alexander que poseía un anillo con una gema azul en el medio.
—Para nosotros ya no, en absoluto—.Conteste mientras avanzaba hacia Alexander.
—Hace mucho que no tocábamos una espada, realmente considero prudente que lo tomemos con la mayor calma posible—.Me acerque a el lentamente con miedo de su reacción.
—No hay necesidad de que me tengas miedo Alexandra, se controlarme correctamente en este tipo de situaciones, lo he aprendido por ti—.Volteo a verme con el ceño fruncido.
—Entonces entiendes la importancia de por qué te lo digo, entonces puedes hacer lo que quieras, mientras eso no afecte a los demás—.Asintió con la cabeza a mis palabras y se dirigió a la parte de afuera.
—Necesitaran un escudo, ocupen estos, les van a ser muy útiles, a la hora de la batalla—.Agarre los escudos que el profesor nos ofrecía y me Salí a encontrar a Alexander.
En la parte de afuera todos ya estaban manteniendo una rutina que por lo visto es demasiado entrenada, sin importar lastimar a quien sea y como sea. Alexander se encontraba en la parte más alejada hablando con la chica con la que anteriormente me tope a la hora de elegir un arma.
—Alexandra esta es Nessa Collins, la líder de los elementales Agua, espero puedas llevarte bien con ella.
-Alexandra Elment, un gusto conocerte Nessa.-Mi tono de voz fue duro, algo frio, lo normal.-Lamento interrumpir su plática, pero el maestro me ha enviado a practicar contigo Alexander, considero prudente hacerle caso, de cualquier modo estoy segura de que Alexander estará encantado de quedar contigo para otra momento.-Hice una seña refiriéndome a Nessa.
-Un gusto conocerlos, espero volver a poder conversar con ustedes.-Asentí mientras la veía alejarse a paso rápido.
-Veo que lograste encontrar el arma indicada.-Su mirada acusadora me dio a entender que no estaba de acuerdo con algo.
-Así es, por lo visto tú también, es un bonito anillo para ti, así mismo la gema azul resalta con tus ojos Alexander.
-No tienes por qué hablar por mí, lo sabes, se expresar correctamente mis emociones y mis pensamientos, tu comentario estuvo totalmente fuera de lugar.-Lanzo un ataque hacia mi persona inclinando la espada para hacerme una rasgada.
—Lose, pero no vi ningún inconveniente en expresar el hecho de que te gustaría volver a charlar con ella en algún momento, deberías hacer amigos y cosas por el estilo, este es un buen lugar y puede que nos quedemos en el definitivamente, lo estoy considerando—.Me encogí de hombros mientras lanzaba una patada directa a su mandíbula.
—¿Es por mi verdad?, siempre has pensado que no es correcto que yo tengo que iniciar una vida de nuevo debido a los problemas que causamos, a tu criterio debería de relacionarme con más personas que no sean tu—.Asentí debido a la realidad de sus palabras.-Pues no, si soy una persona agradable Alexandra, pero no es que me guste relacionarme con las demás personas, estoy completamente bien si solo somos tu y yo, siempre ha sido así y de esa manera se tiene que mantener.
Realice una pirueta para quedar detrás de él, y así realizarle una llave, dejándolo tirado en el suelo.
—Los sentimientos descontrolados, las emociones en situaciones inapropiadas te podrían costar la vida, si fuera otra persona estarías más que herido Alexander, tienes que poner atención—.Le tendí una mano para que pudiera levantarse.