Capítulo 12

"Dejé de contarte muchas cosas para no preocuparte, tal vez fue un error muy grande, ya que, en vez de pelear juntos, peleé por ti y ahora ya no puedo pelear más"

Capítulo 12
 

- ¿Estás bien?, dijo preocupado

- Sí, solo me desmayé, tranquilo

- Está bien, pero enserio tenía miedo de que te pasara algo

- No te preocupes, enserio estoy bien, dije tomando su mano

- ¿Qué te pasó?, ¿qué te dijo ese idiota?

- No fue nada, solo me sentí un poco mal, dije nerviosa

- ¿segura?

- Sí, no te preocupes, dije dándole una sonrisa

- Está bien princesa, dijo sonriendo

- ¿podemos leer un capítulo?

- Claro que sí princesa

Tome mi libro, le dije que se acostara a mi lado y comenzamos a leer, después de un rato ya habíamos leído tres capitulos, Emilio estaba muy entretenido al escuchar la lectura, cerré el libro, a esta acción me dijo:

- ¿Por qué lo cierras?

- Porque es suficiente por hoy, dije revolviendo su cabello

- No, yo quiero escuchar más, dijo haciendo berrinche

- Hagamos un trato, leemos mañana y a cambio te preparo unas galletas

- Me parece justo, pero yo te quiero ayudar

- Está bien, entonces vamos al supermercado a comprar más ingredientes

- Muy bien, vamos, dijo poniéndose de pie

Me levanté y fui por mi abrigo, para después irnos, compramos todo lo que necesitamos y regresamos a casa, acomodamos todo y comenzamos a cocinar. Mi cabeza no dejaba de dar vueltas en las mismas palabras que Carlos me había dicho, realmente me preocupaba que pudiera hacerle daño a Emilio, me siento perdida, no sé cómo voy a solucionar esto, pero por ahora no puedo dejar que Carlos nos vea juntos

(Carlos)

Después de que Elizabeth se fue de casa, decidí seguirla ya que ni siquiera se tomó un segundo para pensar que se había desmayado y sentido mal de la nada, solo para escapar de mí casa y no querer estar conmigo.

Llegue a su casa y me quede observando si había llegado bien a casa, pero en el momento en el que abrió la puerta, ví cómo se volvió a desvanecer, su nana se acercó rápidamente mientras llamaba a alguien, por suerte aun iba frecuentemente a visitarla, me iba a acercar hasta que a lo lejos vi a Emilio corriendo hasta la casa de ella, él la levantó y se la llevo. En ese momento me di cuenta de que eran novios, que todas las fotos que me enviaron eran ciertas, que yo era un idiota por dejar a una niña tan tonta sea parte del futuro de mi familia, pero sobre todo permitir que ese idiota me quité lo que por contrato es mío, él tiene que pagar por esto y lo pagara muy caro.

(Elizabeth)

Mientras mezclaba cada uno de los ingredientes, él lo hacía también, cada que lo hacía me daba una gran sonrisa buscando mi aprobación, continuamos mezclando todo hasta que teníamos la masa lista, realmente me gusta hacer este tipo de cosas para pasar el tiempo, pero gracias a su compañía ahora se volvió de las mejores actividades del mundo.

Acomodamos la masa en la charola y las horneamos, mientras esperábamos a que estuvieran listas, decidimos jugar un juego de mesa, yo solía comprar muchos pero mis padres jamás jugaban conmigo, hasta que Emilio llego a mi vida, él siempre jugaba conmigo, aúnque siempre haga trampa y su risa lo delate, comenzamos a jugar, pasaron algunos minutos y las galletas ya estaban, él estaba muy emocionado por que había hecho un postre, al verlo dije:

- ¿te gusto hacer galletas?

- Sí, fue muy divertido, gracias por enseñarme princesa

- De nada, fue un placer tener a un alumno como tú

- Tomemos una foto, para recordar este momento

- Está bien, voy por la cámara, dije para después subir a mi habitación

Entre a mi habitación y tome mi cámara para después bajar, tomamos algunas fotografías mientras reíamos mucho, él preparo té y comimos muchas galletas hasta que no pudimos más, después de algunas horas fuimos a una cena sorpresa que habíamos organizado para Lily ya que era hora de dejarla ir, lo único que no contábamos era que iba a suceder todo esto, Lily después de ver que estaba bien fue a su casa a dejar todo lo que había de aquí, Emilio le aviso que la veríamos en un restaurante, ella aceptó y ahora la veríamos ahí.

Cuando llegamos ella estaba sentada con un vestido verde y a su lado un señor de muy buena apariencia, cuando la vimos nos emocionamos mucho ya que nunca había salido con alguien y eso era algo que nos hacía mucha ilusión, pasamos a sentarnos, ella nos presentó a la persona que estaba con ella, cenamos y hablamos por mucho rato hasta que llegó el momento de despedirme de Lily, tomé una de sus manos y dije:

- Primero que nada, te agradezco por criarme y jamás dejarme sola, gracias por enseñarme muchas cosas, gracias por cuidarme y ser la mejor amiga, confidente y la mejor mamá que pude haber tenido.

Te agradezco por todos estos años que decidiste quedarte conmigo para ser la mamá que nunca tuve, ahora que te veo feliz y enamorada de alguien que te va a ayudar a salir a flote siempre, me quedo tranquila de que vas a estar bien donde sea que quieras estar.

Te deseo lo mejor y te agradezco por todo lo que hiciste y haces por mí, te quiero mucho Lily, dije a punto de llorar

- Muchas gracias mí niña, sabes que eres una niña increíble y si en las siguientes vidas me pidieran que te ayudara siempre estaría ahí, gracias por permitirme cuidarte y quererte mucho mí niña, dijo al borde de las lagrimas

Me dio un fuerte abrazo y no pude contener mis lágrimas, ella era mí compañera de vida, era mi mejor amiga, era todo lo que nunca pude tener y verla ir a vivir su propia vida era una sensación agridulce, porque por una parte me hacía feliz que viviera su vida pero triste porque ahora la casa estaría más vacía y el eco sería más grande. Pero como una vez leí a las personas que quieres debes dejarlas ir.