Elizabeth

13

- Prometido primo
- Beth, promete que aceptarás a Duncan,al fin y al cabo yo os separé.
Al ver que no contestaba volvió a repetir mi nombre.
-Connor, le dije
- Prometelo Beth, la vida se me va
- Prometido.

Besó a nuestra hija, le susurró un te quiero al oído y se marchó. Lágrimas salían de mis ojos sin esfuerzo ninguno,y lo único que me aliviaba era tener a Sofía en mis brazos.
- Beth, quieres que me lleve un momento a tu hija y te puedas despedir de el?
- Por que se fue Duncan?
- Fue lo que Dios quiso, fue su voluntad.
- Dios no separa a un bebé de su padre, no lo hace.

Mi hija al mirarme nerviosa, empezó a llorar y Duncan me pidió salir, debían prepararlo para el entierro.
En el despacho que era de Connor ahora se encontraban los Reyes, querían hablar con nosotros.

Cargaba todavía a mi pequeña y Duncan con la mano en la cintura nos acompañaba.

- Hija, has hablado ya con Connor por lo que veo,dijo la Reina.
- Connor murió poco después
- Ha aceptado? Le preguntó el Rey a Duncan
- Si, nos lo hizo prometer. Dijo Duncan
- Quiere alguien decirme que es lo que pasa aquí? Preguntó la Reina
- Duncan y Beth se casaran, eso es lo que Connor les hizo prometer.

La Reina se acercó a mí y me dio un beso en la frente.
- Hija, dame a mi nieta, la voy a dormir mientras vosotros habláis. Y ella se marchó con mi pequeña.

Me senté en los sillones que había junto a Duncan.
- Beth, mañana son los entierros.Connor será enterrado igual que mi hijo Jorge. Pero pasado mañana nos debemos marchar.
- Como me voy a marchar de mi casa?
- Beth, me habló Duncan, te vendrás a mis tierras, nos casaremos. Esta ya no es tu casa, mañana llegará el nuevo Duque.
- Recuerdas que mi esposa te habló de eso no?
Asentí
- Tu hija tendrá su dote pero cerca de la casa donde viviréis.
- Muy bien. Debo ponerme el atuendo necesario. Además estamos hablando de una boda sin enterrar a mi marido siquiera.

Los dos ataúdes estaban ya en el salón,pero antes de acercarme a ellos una doncella me informó de la llegada de una carroza. Debía salir a recibirla.
Una anciana bajó y se acercó a la escalera.
- Tu debes ser la furcia que se casó con mi hijo.
-No señora,soy la Duquesa de Belfast, no soy ninguna furcia
- Furcia,es toda aquella jovencita que no llegó Virgen al matrimonio. Quita, me dijo aquella señora senil.
- No le permito que me hable así ni que me juzgue sin conocerme.
No me quiso escuchar. Pasó dentro de casa y se encontró con los Reyes.

- Majestades, encantada de teneros en mi casa. Espero que aquella niña que dice ser Duquesa os tenga bien atendidos.
- No le permito que hable así de Elizabeth, es nuestra protegida.

La cara de esta señora pasó del asombro al enfado. Yo sinceramente me alegraba. No me gustaba y menos mal que solo la veré una vez en la vida.
Se fue al ataúd de su hijo y empezó a reñirle.

- Tu cabezonería te llevó a esto, te llevó a casarte con una mujer que no era pura, que te engañó y todo por tener un heredero,aun sabiendo que tu enfermedad te iba a matar. Espero que por lo menos hayas roto las copias de tus cartas.

Todos me miraron a mi, mientras la anciana seguía diciendo tonterías en voz alta. Disimuladamente me encerré en el despacho y busqué las cartas. Las tenía en el primer cajón de la mesa. Leí una por una hasta la última que era antes de irse a la guerra.

"Mamá, me marcho , a la guerra. Posiblemente no vuelva vivo, ya que usted al igual que yo, sabemos que un pequeño corte me puede provocar la muerte. Que mi sangre no coagula.
Elizabeth está estupenda, y espero que aquello que lleve en su vientre sea un niño para que el Ducado no quede en manos de tu sobrino.
Entiéndelo madre,es por honor,es un título que yo herede de mi difundo padre.
Como ya te comenté en mis cartas anteriores, a Elizabeth no se le considera una mujer de mi clan,ya que en la boda no le di el tartán. Pienso dárselo el día del bautizo de nuestro hijo.
Respecto a su pregunta madre,una vez tenga al heredero, echaré a Elizabeth de mi casa, castigandola por su traición. En cambio si es una niña, la querré igualmente, pero aguantaré a la madre hasta tener al niño.
Si estoy muerto,cuando vuelva de la guerra, haré prometer que se casa con el hombre al que ama. No habrá peor castigo que eso.

Gracias madre por haberme dado la vida.
Tu hijo,
Duque de Belfast"

 



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En el texto hay: highlands, elizabeth, duncan

Editado: 25.09.2018

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