Ella es mi secreto

Capítulo 8: Elige

Adrik

Espero la respuesta de la niña mientras ella solo mira mis ojos con algo de desconfianza, ya olvidé por qué estoy aquí, olvidé que no conozco a la pequeña de nada, pero si vive con mis hermanos algo significa, ¿por qué si no es hija de ellos vive con ellos? La pregunta daña mi cabeza porque no tengo respuesta a ella, todo es demasiado confuso.

—No puedo decirte quien es —es su respuesta dejándome desconcertado, luego río

—Está bien pequeña

—Pero puedes darme tu número y le preguntaré si puedo decirte su nombre —sonrío

—Te daré algo mejor —busco en el bolsillo de mi pantalón y saco una tarjeta con mi nombre, mi dirección y mis teléfonos —llámame preciosa —le guiño un ojo, ella ríe guardando la tarjeta.

—Kristin —la voz de Marcia me tensa —que te he dicho de hablar con desconocidos en —se calla abruptamente al ver mi rostro y da un paso hacia atrás tomando la mano de la niña, yo simplemente quedo mudo ante mi hermana sin saber cómo actuar luego de tantos años —Adrik —susurra mirando con incredulidad mis ojos

—Veo que te acuerdas de mí —sonrío

—No deberías estar aquí —ella echa a andar sin soltar la mano de la niña

—Marcia espera, quiero que hablemos

—No tengo nada que hablar contigo Adrik —me mira deteniendo sus pasos —ya has hecho bastante mal a nuestra familia

—Marcia

—Aléjate de nosotros, de Sergio, de mí y de mamá —me señala —hace mucho que aprendimos a vivir sin ti —veo a mi hermana alejarse y respiro hondo, la pequeña va caminando mirando hacia atrás, hacia mí, hay confusión en sus ojos y solo paso las manos por mi rostro, esto no salió como quería, pero era claro que ella pensaría igual que Sergio, ahora solo tengo una maldita duda que me atormenta, ¿quién es la pequeña y qué hace con ellos?

Abro la puerta del apartamento y entro a este aún demasiado pensativo, todo está en silencio y eso es bastante raro, camino por el lugar hasta llegar a la habitación de Ashly, la puerta está entreabierta y con cuidado la empujo un poco, solo para ver lo suficiente, ella está frente al espejo, de espaldas a mí y con un vestido rojo demasiado provocador, la boca se me seca mirándola, su cabello cae en su espalda luciendo demasiado bien y solo pido poder controlarme.

—¿Te quedarás mirándome como bobo? —me mira a través del espejo —¿me ayudas Adrik? —muestra un collar y tensando mi mandíbula me acerco a ella.

—¿A dónde vas? —sonríe cuando tomo el collar en mis manos

—A cenar fuera —responde, aparto su cabello con el corazón a mil, mis dedos rozan su piel y mis manos tiemblan

—¿Con quién irás? —Ashly ríe volteando hacia mí cuando he acabado

—Gracias —murmura mirando mis ojos —ya lo sabrás Adrik ¿o me dejarás ir sola? —sonríe —eso pensé —intenta pasar por mi lado, tomo su brazo con delicadeza logrando que me mire.

—La historia que me contaste

—No fue para dar lástima, no te preocupes —se suelta de mi agarre —olvídala Adrik —camina hacia la puerta

—¿Por qué entonces volviste a la empresa de tu padre? —mi pregunta detiene sus pasos, evito recorrer su cuerpo con mi mirada —dices que los odias.

—Lo intenté —dice mirando mis ojos —pero no pude huir de quien era Adrik, no pude seguir huyendo así que solo me resigné —ella sale de la habitación y bufo sin creerle una sola palabra, ¿y si Steven tiene razón y solo juega conmigo?

Bajo del auto antes que ella para abrirle la puerta, no conozco el lugar, pero sé que es un hotel, uno de los más caros, la cabeza comienza a dolerme cuando nos adentramos en el lugar, la sigo de cerca hasta llegar al restaurante, el sitio está completamente vacío y me tenso por completo al ver al hombre que está en la última mesa, no es otro que el hijo de Mark Brook, el hombre causante de todas las desgracias de mi familia y ahora ella viene a ver a su hijo, el cual lleva el mismo nombre que su padre y además sus negocios.

—¿A qué juegas? —mascullo tomando con rabia su brazo, detengo sus pasos, los hombres de Mark se ponen en alerta, pero yo sigo mirándola a ella

—He venido a cenar Adrik —sonríe y siento que mi cabeza volará de la rabia

—Te conté mi historia Ashly, pensé que me habías entendido

—Lo hice y por eso estoy aquí —su sonrisa aumenta —quiero preguntarle yo misma al hijo de Mark si es verdad que su padre hizo lo que hizo, disculpa Adrik, pero no confío en mi familia, no soy como tú —bufa —ahora suéltame —tenso mi mandíbula

—El padre del hombre con el que vas a cenar acabó con mi familia solo por querer dañar a la tuya Ashly —ella solo sonríe

—Te equivocas Adrik, tú acabaste con tu familia —sus palabras hacen que la suelte —debiste quedarte con ellos, en cambio, te fuiste con quienes según tú no eran culpables de nada —ella se aleja de mí y camina hacia él, apretando mis dientes voy detrás de ella.

—¿Algún problema Ashly? —ella le sonríe y toma asiento luego de besar su mejilla

—No te preocupes, solo es mi guardaespaldas, un perro rabioso —aprieto mis puños cuando la escucho, se hablan como si se conocieran de toda la vida

—¿Por qué querías verme? —él hace una señal con una de sus manos —¿no fue solo para cenar y pasar la noche cierto? —evito bufar, es claro que se conocen de antes.

—Quiero que me digas algo —Ashly se acomoda en su asiento —hace años hubo muchas familias afectadas a las que se le quitó todo y le echaron la culpa a mi padre —miro al tal Mark que es idéntico a su padre —dime Mark, ¿fue mi padre o fue el tuyo el que hizo eso? —él solo ríe sin saber todo el mal que ha causado.

—Mi padre y el tuyo estaban enemistados Ashly, jugaban sucio ambos

—Solo quiero una respuesta, sabes mi posición —Ashly sonríe y no entiendo nada, entrecierro los ojos mirándola —solo responde

—¿Por qué tanto interés en algo que sucedió hace muchos años? —ella sonríe

—Si respondes con la verdad te lo contaré mientras bebemos vino en tu habitación —dejo de mirarla




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